-Simon-
Me desperté, estaba un poco atontado, no entendía por qué todos me miraban y se reían, ¿tan mala cara tenía? Me desperecé y me uní a ellos, estaban en corro pasandose un porro. La tarde prometía. Decidimos jugar a adivinar títulos de libros con mimíca, como tantas veces habíamos jugado por el grupo. Era el turno de Diana, que después de la charla con Falba parecía estar de mejor humor. Diana estaba en el suelo,revolcándose e imitando la forma de lanzar una flecha, todo el mundo sabía que libro era, pero no se lo decíamos porque nos hacia mucha gracia verla retozar en el suelo. El móvil de Alba empezó a sonar, nos pidió silencio para poder escuchar, vimos como asentía con la cabeza, empezó a ponerse pálida, cada vez pestañeaba más rápido, intentando contener las lágrimas, colgó.
Fati fue la primera en reaccionar, la abrazó.
Fati: Alba, ¿qué ha pasado?
Alba: es... es Miri, está ingresada.
De repente todo mi alrededor se convirtió en un torbellino de actividad, caras pálidas y lágrimas. Unos recogían los platos, otros las mantas...
Al llegar al hospital todos tenían cara de poker, no sabíamos que esperar, lo único que nos habían dicho era que Miri estaba ingresada. Durante el trayecto en taxi al hospital la única que había hablado era Diana, que mantuvo una conversación en voz baja con alguien, explicando lo que sucedía con Miri.
Subimos a la tercera planta, donde se encontraba Miri. Al llegar vimos a Meli sentada en la sala de espera con la cabeza entre las manos, llorando desconsoladamente. Al oirnos llegar se lanzo a los brazos de la primera persona que encontró, Gara.
♡FIN♡