¿Debemos casarnos? [En Emisión]

¿Esto será una buena idea?

7:06 a.m.

Casémonos mañana.
Casémonos mañana.
Casémon---

La voz del rubio resonaba una y otra vez en su propia cabeza, como si fuera un sueño, pero al ir abriendo los ojos lentamente y terminar de despertarse, cayó en la maravillosa realidad de que no era asi. Se levantó de la cama y rascó suave su cabeza, mientras sonreía para si mismo recordando tal escena.

Le esperaba un largo día, comenzar los preparativos de la boda, que vestir, que comer, que hacer en el gran día, pero no había cosa más importante que ir a hablar con su tripulación. Estaba claro que no los abandonaría aunque estuviera comprometido, y de hecho no era propio de él querer "dejar" una dama, pero como nakamas que eran, tenían un sueño por cumplir y él también, por eso salió a navegar en primer lugar, y no solo eso, si no a ayudar a su capitán a cumplir su anhelo más preciado.

- Puddíng-chan... - A pesar de pensar en sus amigos, también pensaba en su prometida muy enamoradizo. - ¡Ah, te haré la mujer más feliz del mun--! - Sus ojos se tornaron como un corazón, y desconcentrado de su rumbo, tropezó con la puerta del baño, estaba por darse una ducha, pero cuando recuperó la compostura, así lo hizo y salió tan pronto de su habitación como pudo.

Salió del castillo, esperaba ver a la castaña por ahí cuando caminaba, pero aún dormía, no la molestaría.

Aunque estuviera muy pocos días viviendo en el castillo, no tenía idea de donde estarían sus nakamas, así que se dirigió al puerto donde estaba el Thousand Sunny, con suerte y se encontraría a alguien ahí.

Llegando, a lo lejos pudo encontrar a Chopper y Robin sentados en el barandal conversando, y claro, no pudo evitar emocionarse al ver a la arqueóloga, como siempre. Eso le motivo a ir más rápido.

- ¡ROBIN-CHWAAAAN! ♡ ¡Chopper! - Parecía que no se hubieran visto hace años por como los saludaba, pero siempre habría un gran afecto entre la tripulación.

Ambos respondieron alegremente a su saludo mientras sonreían, y cuando puso un pie en el barco, Chopper fue el primero en abrazarle. Robin mantuvo la distancia, pero de igual forma se notaba su alegría por verle.

- Cocinero-san, ya hacía falta que estuvieras por aquí. ~

El corazón del cocinero se paró, ¿acaso escuchó bien? ¿Le extrañaba demasiado? ¿Una declaración de amor?

- ¡Yo te he extrañado mucho más, Robin-chwan! ♥

Estaba a punto de querer darle un gran abrazo, hasta sentir un cuerpo muy peludo interfiriendo en su camino, era Chopper, molesto porque al parecer olvidaba que él también estaba ahí.

- No me olvides, cabronazo.
- Vale, vale...

Le da el abrazo a él, y por fin logra calmarle.

- Por cierto... ¿los demás están aquí? Hay algo importante que debo hablar con todos ustedes. - Preguntó el rubio.

- No todos, Franky y Brook fueron a comprar algunas cosas, el resto está durmiendo.

- Ya veo...¿sabes en cuanto tiempo volverán? No tengo prisa, pero no puedo esperar por decirles que pasa.

- ¡Cuéntanos a nosotros! debe ser algo emocionante. - Exclama el reno intrigado con mucha emoción.

- No, aún no es el momento.
¡Y baja la voz! Vas a despertar a Nami-swan.

Tarde.
De repente se escucha una de las puertas ser golpeadas con fuerza para abrirla, viendo al capitán de los Mugiwara muy enfurecido.

- ¿¡POR QUÉ HAY TANTO MALDITO RUIDOOOO!? - Cuando menos lo esperó vio al rubio, y fue suficiente para hacerle olvidar su enfado. - ¡Sanji!