Disparatado Asesinato en el Upper East Side - Capitulo 5

62 1 0
                                    

Ahí estamos. Veintiún años después ¿Cómo si no  hubiese pasado nada? ¡Y un cuerno! Lo que pasa es que me he quedado perpleja y no he sabido reaccionar. ¿Qué queréis que le haga? Ya os dije que siempre evito la confrontación. Incluso con mi peor enemigo.

Billy no ha cambiado demasiado; se nota que han pasado los años pero sigue teniendo la misma chispa en los ojos, la misma manera animada de hablar y el mismo movimiento tan gracioso de su barbilla al articular las palabras, incluso esa manera socarrona de entornar los ojos... ¿Pero qué estoy haciendo? ¡No! Billy está fatal; ha envejecido y es completamente repulsivo, que digo repulsivo, es vomitivo.

¿A quién voy a engañar? Sigue estando guapísimo. ¿Soy tonta, verdad? Lo sé, en el fondo siempre lo he sabido. Aunque no me creáis estoy realmente enfadada con él. No en vano me falló en el peor momento de mi vida y eso no podré perdonárselo nunca. Se podría decir que fue el plantón más inoportuno de la historia.

¿Qué hago? ¿Le digo todo el discurso que llevo elaborando año tras año? ¿Finjo indiferencia? ¿Me invento una vida increíble para darle envidia? No sé que hacer la verdad, esto no estaba previsto.

- Pues he montado un negocio con unos amigos en este edificio. ¿Y tú que haces aquí? -pregunta poniendo cara de niño bueno.

- Planta 38 -contesto secamente.

- ¿Cómo?

-  ¡Que trabajo en la planta 38! -musito con gran parquedad.

- ¿De verdad? - ¿Por qué narices se emociona tanto? Como si yo le interesase un ápice, si le hubiese interesado algo me hubiese buscado hace años- ¿Y dónde trabajas?

- En la revista “In Style”, soy periodista -confieso bostezando.

- ¿Periodista? –pregunta sorprendido- Que interesante…

- Muchísimo… -añado mirándome las uñas- ¿Y tú? ¿A qué te dedicas? –pregunto por compromiso. ¡Mierda! Ahí va la buena chica.

- Soy Analista financiero.

- ¿Qué aburrido, no? –no es que quiera ser impertinente, es que realmente me parece aburrido.

- Bueno… cuestión de gustos. La verdad es que no me puedo quejar. Es algo que está en auge –explica poniendo cara de póker- ¿Y qué opina tu marido sobre que seas periodista?

¡Por Dios! Que manera más cutre de sonsacarme si tengo pareja. ¿Qué le importará a él? ¿Quiero que él sepa de mi estado? Sin saber por qué abro la boca.

- No opina nada porque no tengo –mi respuesta es prácticamente automática- ¿Y tu mujer que dice de tu apasionante trabajo?

- Mi ex mujer cree que mi trabajo es un asco –confiesa haciendo una pausa- A ella únicamente le interesaba mi dinero…

- ¡Vaya, lo siento! –pobrecillo, aflojaré un poco.

- No me extrañaría que la muy pécora intentase matarme –me explica echándose a reír ¿Qué mala, no? - para ella valgo más muerto que vivo, por lo menos hasta que formalicemos el acuerdo de divorcio….

- Vaya… que interesante –digo sin saber muy bien como reaccionar. ¿Por qué se sincera así conmigo?

- Te veo guapa. Hacía mucho tiempo que quería decirte que…

Se abren las puertas del ascensor. Hemos llegado a la planta baja. Un miedo insuperable se apodera de todos los músculos de mi cuerpo y esquivando a la gente echo a correr. ¿Habéis visto que valiente soy?

- ¡Adiós vecina! –escucho en la lejanía.

Salgo corriendo a la calle. Me siento ahogada. ¿Me estará dando un infarto? Realmente no me extrañaría. Ha sido un shock en toda regla. Sin darme cuenta desvío mi mirada hacia el reloj que hay en la fachada del  edificio de delante. ¡Son ya las 10.30! Tengo que llegar a Le Cirque en 30 minutos…

El recorrido en coche si no  hubiese trafico es de 10 minutos, pero a estas horas de la mañana, y en Nueva York, puede pasar a ser 30 o 40 minutos perfectamente. Podría ir en metro, pero como paga la revista cogeré un taxi y lo que tarde tardaré. Así tendré tiempo de pensar en mis cosas. 

Hubiese deseado decirle tantas cosas… y me he limitado a callar y a mirarlo delatando que todavía siento algo por él. ¿Qué hago ahora con esos sentimientos? No puedo permitirme esta flaqueza, no puedo perdonar así como así lo que me hizo. ¿Cómo acabará esto?

Disparatado Asesinato en el Upper East SideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora