El juicio final

Capitulo 1 : ¿Te conozco?

–Hola amor. Si si, ya estoy llegando a la tienda para la primer prueba del vestido, aún no puedo creer que nos casemos, en serio, me siento muy nerviosa. Tiffany va a acompañarme, porque su nuevo departamento está a 2 calles de la tienda. Está bien, te veo en la cena.
Haré una pausa para ubicarlos en la historia.
Cathery Lian es una muy conocida abogada de la ciudad de Nueva York, que se casará con su pareja desde hace 3 años, Chris Daven que es uno de los empresarios más ricos de la ciudad, él trabaja en la empresa de su padre, quién lo considera un fracasado incompetente que lo único que hizo bien en su vida fue conocer a Cathery. Su boda será en el hotel New York Palace, uno de los más costosos y exclusivos del país, y se casarán a fines de año.
Ella se encuentra en la puerta de la tienda con Tiffany, su mejor amiga de la secundaria. Al entrar, ambas sienten un muy agradable aroma, cómo a perfume caro, aunque no se sintieron abrumadas. Todo era muy elegante y color blanco, colgaba un hermoso candelabro con cristales del techo y habia decenas de maniquíes con lujosos vestidos puestos. Era un lugar de película.
–Hola señoritas ¿Que se les ofrece? Preguntó una empleada del lugar vestida totalmente de negro con el pelo recogido.
–Hola, vengo para la primer prueba de mi vestido, tenía cita a las 10:30, ella es mi acompañante - dijo dulcemente y señaló a su amiga.
–Ah si, disculpe, pase por acá - dijo la mujer.
Cathery se prueba el vestido y observa a su amiga.
–La espalda me encanta! - dice ella
–A mi me gusta mucho la cola con encaje y el corte de la parte de arriba. - le dijo Tiffany.
En ese entonces, entra Malcolm Sacher, el diseñador de su vestido, quién fue a verla personalmente.
–Se te ve hermoso querida - Dijo el hombre vestido de blanco de unos 50 años aproximadamente, mirándola de arriba a abajo.
–Muchas gracias, aunque me queda un poco grande de la cintura.
–Tiene razón si quiere podemos ajustarlo ahora y usted y su amiga pueden esperar acá o venir a buscarlo mañana - dijo él.
–No tengo nada que hacer- dijo Tiffany.
–Entonces podemos esperar.
–Perfecto - dijo Sacher y se retiró.
El teléfono de Cathery suena.
– Cathery Lian, ¿Quién habla?
La asistente de ella, Iris, contesta.
-Un nuevo cliente, debe hablar con usted.
–¿Ahora? Estoy en la prueba de mi ves..
– Necesita hablar con usted urgente - dijo con un tono de voz firme.
–Ok, voy para allá y, pida 2 cafés por favor.
–Esta bien, acá la espero - contestó.
Ella corta y se sienta en una silla blanca de terciopelo.
–¿Estás bien? - preguntó Tiffany al verla algo cansada.
–Si, debo irme, perdón por hacerte venir - dijo algo avergonzada.
Está bien, tengo que ir a ver a los niños - dijo ella.
–Nos vemos
–Bye, te veo después.
Ella sube a su auto,se sienta y resopla, al ver la hora va directo a su oficina.
– Perdón por la tardanza Iris.
–Solo fueron 5 minutos, tranquila - dijo tratando de calmarla.
Ella entra a su oficina y pide disculpas, le ofrece un café.
–Enserio discúlpeme, tuve un día complicado - dijo ella, y cerró la puerta.
–Soy Cathery Lian - dijo estrechandole la mano derecha y con una leve sonrisa. Se sentó en su silla giratoria blanca y lo miró fijamente, con esos ojos azules que tanto la caracterizaban, sentía que ya lo conocía.
El hombre, sentado en frente de ella, se distrajo mirando uno de los cuadros de la pared blanca, era un paisaje muy otoñal y de las pocas cosas "coloridas" en la habitación.
- Oliver Glemus, dijo estrechandole la mano de nuevo. – Te acuerdas de mí? - él la miró directo a los ojos, haciendo una media sonrisa muy sutil.
Al escuchar su nombre, ella al fin pudo recordar y sintió una especie de sudor frío corriendo por su espalda, hizo un gesto de nerviosismo, poco disimulado.
-¿Cómo has estado este último tiempo? – él se sienta en la silla justo enfrente de su escritorio, sin dejar de mirarla con sus ojos marrones y bien brillantes que tanto lo caracterizaban
– Muy bien - respondió tensa.
–¡Ay por favor! ¿No me recuerdas Cait?, Aunque no me sorprendería, tuvimos una adolescencia muy aburrida - dijo con ironía.
– Nunca lo había visto antes, Sr Glemus - dijo asiendose la tonta, aunque era inútil seguir fingiendo, ella lo recordaba perfectamente.
– A ver, déjame refrescarte la memoria... - dijo tomando un sorbo de su café.
– Recuerdas cuando nos conocimos, hace 20 años más o menos en esa cafetería, yo accidentalmente te choqué y derramé todo mi té encima - dijo recordando el momento y sonriendo y con un poco de vergüenza. En ese momento, rozó su mano con la suya.
Ella lo recordó e hizo una leve sonrisa mientras hizo su mano a un lado para juguetear acomodar su cabello. Ambos sonrieron. El ambiente algo tenso se relajó por un momento.

–Si lo recuerdo, nunca pude sacar la mancha de esa camisa blanca - dijo arqueando una ceja.
–Veo que se refrescó tu memoria y... ¿Te acordás cuando un año después estábamos escapando en un barco con mercancía de ese viejo narcotraficante italiano? - dijo de repente. Eso la desconcertó por completo, y la cálida atmósfera que se había formado entre ellos se enfrió por completo. Cathery no esperaba que dijera eso, al menos no tan drásticamente, aunque no se podía esperar nada de él.
– Shh baja la voz, supongo que ahora estás en problemas y por eso viniste, - dijo ella, sonaba decepcionada pero no sorprendida, lo conocía lo suficiente como para descifrar la mayoría de sus intenciones.
– Algo así, necesito tu ayuda, - dijo él, y por un momento la oficina estuvo en un total e incómodo silencio, ninguno dijo nadamenos unos segundos. Oliver le extendió una carpeta a Cathery, ella la tomó rápidamente y comenzó a leerla. En ese momento, suena el celular de Oliver, ya que le había llegado un mensaje, él contesta mientras ella terminaba de leer esos interminables papeles.

Hola! Espero que te haya gustado la primer parte de la novela! Estoy segura de que la historia te encantará. Capítulo nuevo en 1 semana o menos.