La vi agacharse y tomarme en sus brazos con delicadeza, sonriendo como embobada. Me pareció adorable ver cuán feliz estaba Kara. Sus ojos azules brillaban y no pude evitar sonreír como idiota de la ternura que me dio verla tan feliz.
"Voy a pedirte un favor, sostente fuerte y cierra los ojos. No los abras hasta que yo te diga, es una sorpresa."
"Pero me gusta ver National City desde arriba..."
Comenzó a elevarse y me sonrió, deposité un rápido beso en su mejilla antes de que hable.
"Está bien, pero solo sobre National City, cuando salgamos de la ciudad tendrás que cerrar los ojos."
Me sorprendió escuchar eso. ¿A dónde me estaba llevando?
"¿A dónde me llevarás a cenar, Kara?"
"Si te digo no sería sorpresa."
Fruncí el ceño pero disfruté de cómo se veía la ciudad bajo nosotras, era increíble. La vista era maravillosa, hacía que amaras la ciudad aún más. Podía entender porque ama ser Supergirl y pasar la mayor parte de su día volando por aquí arriba. No pensaba quitarle esto, esto era algo que debía mantener en su rutina pues era relajador. Cuando salimos de los límites de la ciudad cerré mis ojos sin que me dijera nada y me apoyé contra su pecho. Olía riquísimo y como estuvimos volando largo rato, prácticamente me dormí. Por lo que demoramos, calculé que me estaba llevando fuera del país y una emoción surgió en mí. Me sentí como una niña chica, quería abrir los ojos para ver por dónde íbamos. En especial cuando sentí el sol sobre mi cara. En National City eran recién las 19 horas. ¿A dónde me estaba llevando? Sentí que descendíamos y esperaba mi pelo no se viera tan mal por el viento fuerte que atravesamos.
"Dime, Lena... ¿Cómo está tu japonés?"
Abrí los ojos cuando me bajó y escuché eso. ¡No podía creerlo! ¡Me trajo a Tokio! La miré de boca abierta y sonreía orgullosa.
"¡¿Kara, me trajiste a Japón?!"
"Sé que te invité a cenar pero creo que un almuerzo con sushi original puede compensarlo."
Me acerqué a ella y me acerqué para besarla. Agradecí haberme puesto mi nuevo labial de color rojo, este estaba diseñado para que no se corriera incluso luego de besar, comer o beber. Debías usar un producto para quitarlo y no dañaba la piel. Sabía que en una cita con Supergirl querría besarla todo el tiempo y tener esto era la solución perfecta. Corté el beso para mirarla y tenía los ojos entrecerrados, deleitada. Mordió su labio y entrelazó sus dedos en los míos, llevándome por la calle rumbo a un restorán. Ingresamos a uno donde tenías que sentarte en una pequeña mesita con almohadones en el suelo, muy tradicional. Me senté frente a Kara y una muchacha con kimono se nos acercó. Kara me sorprendió hablándole en japonés.
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The One You Love Most
AdventureKara queda atrapada en una prisión psíquica alienígena cuando se interpone delante de Lena para salvarla. El ataque deja a Kara alucinando inconsciente donde sufre el dolor de la soledad y la idea de que nadie realmente la ama. La única forma de sac...