DON'T YOU ASK | ALBALIA OT18

CONFESIONES

En el capítulo anterior:

-La primera es que llevo dos días sin ducharme. -Alba negó con la cabeza, pues, me vio ducharme ayer. -La segunda es que me muero por besarte ahora mismo.

-La gracia está en que una sea verdad y otra mentira. -Me dijo, a lo que yo asentí segura y muerta de nervios a la misma vez. -Pero...Ayer te vi saliendo de la ducha... -Volví a asentir y ella se mordió el labio.

Se hizo el silencio, Alba miró a las cámaras, seguían hacia abajo, se acercó a mí y...

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Cuando estaba a escasos centímetros de mi boca, nos miramos a los ojos, yo no sé a ella, pero a mi el corazón se me iba a salir. Se acercó más...

-¡Chicaaaas! -Gritó Marilia. -¡Hemos vuelto! -Nos alejamos rápidamente y disimulamos. 

-¿Qué tal ha ido? -Preguntó Alba con una sonrisa enorme.

Mientras todos hablaban, yo fui a los armarios para coger una sudadera y de ahí pensaba ir directamente al reparto de temas, pero Marta irrumpió en mi camino y me llevó a la habitación. Me hizo sentarme en su cama y me miró con una sonrisa pícara durante varios segundos.

-¿Qué? -Pregunté confusa al ver que no decía nada.

-¿Nada que contar? -Seguía con aquella sonrisa.

-Venga ya. -Insistió. -Que Julia y yo os hemos pillado. -Se me tensó el cuerpo, no dije nada. -Si Marilia no llega a gritar, Alba y tú...

-¡No! -Mentí.

-¿Quieres que traiga a mi otra testigo? -Se referia a Julia. -Lo hemos visto las dos.

-Está bien. -Cedí. -Casi nos besamos...

-¡Lo sabía! ¡Lo sabía! ¡Lo sabía! -Empezó a gritar y a saltar. -¡Julia!

-Pero no va a pasar nada entre nosotras. -Mis palabras petrificaron a Marta.

-¿Qué? ¿Por qué?

-Marta... Yo tengo pareja. -Agaché la mirada.

-No puedes renunciar a algo que quieres por otra persona.

-El caso es que no sé que quiero. -Volvió el maldito nudo de la garganta. Respiré hondo y continué hablando. -Además a Alba le gusta Joa... -Me callé, pero Marta se enteró perfectamente y soltó una carcajada.

-Alba babea contigo tía. -Dijo riéndose aun. -Creeme, no le gusta Joan, si te ha dicho eso es para que no pienses que le gustas tú.

-No sé, no creo... 

-No soy la única que piensa eso, pero bueno, ya se verá todo, el destino decidirá.

Más tarde ese mismo día nos dieron los temas para la gala 2, me tocó con Marta, Tainted love, que temazo y que gran compañera... Aunque eso sí, daba por asegurado que me hablaría de Alba toda la semana.

Después del reparto fuimos a comer, me senté al lado de Alba y enfrente de Marta y Julia, las cuales no paraban de hacerme miraditas y gestos y había veces que no me podía aguantar la risa.

-¿Qué os pasa hoy? -Preguntó Damion inocente desde mi otro lado al percatarse de nuestras risas.

-¡A mi nada! -Reí. -Son estas dos que son más tontas... 

-¿Me dejas un sitio Natalia? -Preguntó Joan, quería volver a sentarse entre nosotras.

-Te puedes sentar aquí Joan, yo ya he terminado. -Dijo Julia apresurándose con su último trozo de pan.

-No pasa nada, yo tambien he acabado ya. -Dije para que se pudiesen sentar juntos. Me levanté y él ocupó mi lugar.

Me fui al salón con Miki y Famous, estaban hablando de cosas que echaban de menos de fuera de la academia, pero tampoco presté mucha atención porque estaba intentando aprenderme la letra de mi canción semanal. 

No pasaron ni 10 minutos cuando Alba vino en mi búsqueda. Se sentó a mi lado y se quedó varios segundos mirándome, yo me hice la loca.

-Oye Nat. -Apoyó todo su cuerpo en mí. -¿Me enseñas a tocar la guitarra?

-Claro. -Sonreí. -Trae una. -Cerré el cuaderno de la canción y me senté mejor. 

-Toma. -Me pasó la guitarra. 

-¿Qué sabes?

-Nada... -Se encogió de hombros y yo sonreí al verle esa cara de inocente.

Estuve un buen rato enseñándole acordes básicos y parecía que iba pillándolos. Mientras ella los repasaba en voz alta no podía evitar mirarle la boca, por mucho que quisiera evitarlo, se me iban los ojos a ella.

-Oye Albi. -Quité la guitarra del medio y agarré su mano. -Perdon por lo de antes. -Aparté la mirada.

-A mi tambien me apetecía.

-No sé que me está pasando. -Dije muy flojito.

-Ven conmigo. -Susurró.

Fuimos a la habitación, donde no pudieran grabarnos, era un tema delicado que podía dañar a varias personas de fuera.

-Lo siento Alba, lo siento muchísimo.

-Creo que es mejor olvidar todo lo que ha pasado antes, aunque, no ha pasado nada, pero tu me entiendes.

-El caso es que no puedo olvidarlo... -Me acerqué bastante a ella y acaricié su mejilla. -Cada vez que estoy cerca tuya me muero Alba, me tiembla todo el cuerpo.

-Creía que solo me pasaba a mi. -Se puso roja.

-Sé que esto está mal pero... -Me acerqué más. -...Tengo que hacerlo. -Dije a centímetros de su boca.

-Hazlo. -Susurró.

Entonces, pegué su cuerpo al mío, le miré a los dos ojos, luego, a la boca y finalmente... Nos besamos.