¿Qué somos? ©

Mi debilidad [Nico]

Me quedé toda la noche pensativo, si quería ver a mi padre de nuevo tenía que encontrar la forma de volver a verlo pero, ¿ Cómo? No sé dónde encontrarlo, no lo he visto más.

Mi frustración crece al pasar la noche, de tanto pensar mi cabeza empieza a doler. Guardo la carta de mi padre en el cajón de mi escritorio, me acuesto en mi cama y cierro los ojos , al poco tiempo me quedo dormido.

5Am

Estoy alistándome para ir al instituto, siento un olor delicioso a Waffles que me guía hacia la cocina. Veo a mi mamá sirviéndolo en un plato.

Mi mamá se ve hermosa y su sonrisa me llena de vida, está vestida con una camisa manga larga color blanca que lleva por dentro de una falda color negro estilo lápiz que le llega a la rodilla. Su cabello castaño está recogido en una moña dejando unos mechones sueltos detrás de su oreja. Unos aretes de plata circulares y calza unos bonitos tacones de color negro.

Veo su rostro con un poco de maquillaje, sus ojos cafés resaltan aun más y tienen un brillo especial. Me pregunto que pasaría si se diese cuenta que mi padre está cerca de nosotros.

— Nico, ¿hijo? — Pregunta mamá haciendo que salga de mis pensamientos.

— Lo siento mamá, ¿ qué decías?

Mi madre me ve con preocupación, coloca una taza con café sobre la mesa y pone un plato con Waffles y miel.

— Que si todo va bien en la escuela. — Alza una ceja en forma interrogativa. — Nicolás, te he notado estos últimos días no sé, muy pensativo ¿qué pasa?

Me gustaría decirle a mamá que papá fue quien me socorrió cuando me atacaron esos hombres, desearía decirle que él está de alguna manera cerca de nosotros, pero no puedo. Tengo miedo que mamá vuelva a recaer, ha dado un gran paso en su vida, ha sido difícil para ella dejar el alcohol, en ocasiones siente esa necesidad de beber pero ha aprendido a vivir sin eso.

Para no preocupar a mamá intento hacerle una pregunta fuera de lo de mi padre. — Mamá, me gusta Noah, y se que yo a ella también le gusto pero, yo no se sus pensamientos y no sé ¿ crees que debería pedirle que sea mi novia?

Mi madre abre los ojos de par en par súper emocionada. — ¿Te gusta Noah? Oh mi niño, estás nuevamente enamorado. — sonríe mamá acariciando mi mejilla.

Creo que de alguna forma siempre lo he estado. — pienso.

— Algo así mamá, es complicado, quería saber tu opinión.
como una rebanada de Waffle mientras mi madre se queda pensativa.

— Complicado, ¿eh? sabes cariño como tu madre y como alguien que alguna vez se enamoró debo decirte que no te precipites, a veces cuando uno es joven y está enamorado quiere correr a los brazos de esa persona y decirle todo lo que siente, quiere que lo que sienten se convierta en algo fijo o sea en una relación.

— ¿Y eso está mal? — Alzo una ceja.

— Claro que no, pero es mejor llevar las cosas con calma, ustedes son jóvenes y tienen que disfrutar la vida, con esto no te digo que la dejes ir, solo no la presiones ni te presiones en lanzarte a una relación, disfruta su compañía, demuestra lo que sientes por ella pero lleva las cosas con calma. — mamá se levanta de la silla terminando de beber su café, besa mi frente y se dirige a lavar la taza.

— Entiendo mamá, nada de presiones y llevarlo con calma.  repaso el consejo de mamá en voz alta.

me acerco a mamá dándole un beso en la mejilla. — Gracias mamá, eres la mejor.