Melissa

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Abrí los ojos y lo primero que vi fue a Denisse, quien me estaba observando, que miedo.

-Te ve tierna durmiendo –Dijo con una cara de psicópata. Me sobresalte y me senté apoyándome en el respaldo de la cama.

-Que susto me has dado –Rasque mis ojos con mis manos, tenía mucho sueño- ¿Por qué me vigilabas?

-No lo sé –Se sentó igual que yo- Me desperté un poco antes que tu, y bueno, quería ver si mi mirada penetrante te despertaba… y al parecer si lo logre –Sonrió victoriosa.

-Ag, a veces eres muy rara –Tome mi celular que estaba en la mesita de noche.

-Eh, no soy rara, soy de edición limitada –Reí y después Denisse se unió a mi risa.

Desbloquee mi móvil y recordé los mensajes de anoche, y de que Mangel nos invitó a comer a Rubius y a mi porque tenía que decirnos algo “importante”.

-Denisse –Llame su atención.

-¿Si?

-¿Quieres ir a comer a algún lugar hoy?

-Y… ¿Dónde iríamos a comer?

-A un lugar de comida italiana que está a unas calles de aquí.

-Ok, pero… ¿Por qué? ¿No te gusta comer con tu mamá o…?

-No, no es eso, es que anoche, mientras tú roncabas, yo no pude dormir…

-¡¿Qué?! Yo no ronco –Me interrumpió.

-¿A no? Y entonces, ¿Cómo explicas esos sonidos que salían de tu boca mientras dormías anoche?

-A pues, entonces creo que si ronco y no me doy cuenta.

-Emmm creo que nadie se daría cuenta si es que ronca o no –Dije obvia- Bueno, de lo que estaba hablando. Anoche me llego un mensaje de… -Había olvidado que Denisse no sabía que conocía a Rubius- un amigo, el que me dijo que otro amigo nos invitó a comer para decirnos algo importante.

-¿También me invito a mí? Pero si no los conozco.

-No tonta –Le peque suavemente en el brazo- Pues, yo decido que te voy a llevar porque no te puedo dejar sola aquí.

-A ya, pero… ¿Quiénes son esos amigos de los que hablas?

-A ver, ¿tú conoces a elrubiusOMG?

-Si… -Me miro confundida.

-Resulta que él vive en este mismo edificio, para ser mas precisa, vive en el piso de arriba y cuando llegue a Madrid, lo conocí en persona y digamos que nos hicimos amigos  –Dije apuntando con mi dedo índice el techo.

-¡¿Es enserio?! ¿Por qué nunca me lo dijiste?

-Ah, no lo sé, solo no se me ocurrió decirte –Ella me fulmino con la mirada- Eh, no te enojes –Levante los brazos- Lo que te voy a decir ahora seguramente te hará gritar de la emoción.

-Entonces dilo ya –Dijo algo emocionada.

-Ese amigo que me escribió los mensajes anoche era Rubius –Denisse me miro con cara de emoción- Me dijo que Mangel lo invito a él y a mí a comer al lugar que te dije ya que tenía algo importante que decirnos.

-Wow, es decir, que… ¡Tú, yo, Rubius y Mangel vamos a ir a comer! No puede ser –Dijo muy emocionada, pero de repente su cara de emoción cambio a una de confusión- ¿Y por qué yo voy? Si Mangel los invito a ustedes, a mí ni me conoce.

-Ya te lo dije, no te quería dejar aquí sola con Logan o con mi mamá.

-Ah ok –Volvió a sonreír- Yo me voy a duchar.

Amigos (Rubius y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora