Regalo – Parte 1
Estoy enojada, papá me llevaría al zoológico el sábado, pero me ha dicho que siempre no, que iremos a comer con el maestro Karamatsu por su cumpleaños. Yo quiero mucho al profesor, pero quería más ir al zoológico para alimentar los conejitos.
En el receso le conté a Jyushimatsu.
"¡También iremos a celebrar el cumpleaños del maestro Osomatsu!"
Cierto, ellos tienen su cumpleaños el mismo día; ahora parecía una idea divertida, sería entonces una fiesta en la que podría jugar con Jyushi por mucho tiempo.
Ya no estoy enojada.
"Deberíamos hacerles un regalo"
Propuso Jyushi muy feliz, parecía una gran idea y me emocione, pero, ¿Qué podíamos hacer?
Estuvimos pensando todo el recreo y no se nos ocurrió nada.
No puse mucha atención al maestro Karamatsu en clases porque seguía pensando en que le regalaría, pero todavía no se me ocurría nada.
Las clases terminaron y no sabía qué hacer, antes de irme Jyushi se acercó.
"¡Mira! Hice un dibujo de regalo; este es papá, este es el maestro y este soy yo"
Me enseño un lindo dibujo de los tres con un sol, un arcoíris y muchas nubes; yo también podía hacer algo igual para el maestro Karamatsu y le pondría muchas flores.
"Es muy lindo Jyushi, hare uno igual"
Le dije antes de que se fuera con su papá. En cuanto llegase a casa usaría mis pinturas favoritas para el dibujo, al maestro Karamatsu le va a gustar bastante.
Use las acuarelas, esas que papá me regalo un día y que cuido mucho, para hacer un dibujo de los tres, yo en medio de ellos con un lindo vestido rosa, papá tiene un traje verde y al maestro Karamatsu le puse diamantina azul en la ropa, sé que a él le gustan las cosas brillantes.
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Por fin sería el cumpleaños de los maestros, papá me compro un vestido nuevo muy bonito, es rosa, mi color favorito; él también se compró un traje nuevo, es como verde oscuro y se ve muy guapo.
En la casa del maestro Karamatsu ya estaban Jyushi y su papá, antes de jugar con mi amigo le di su regalo al maestro, ¡le encanto el dibujo!
"My little princess, atesorare esto por siempre, gracias"
Papá tenía una cara rara, ¿Se habrá molestado porque no le hice también un dibujo? No importa, le haría uno también después.
Me fui a jugar al patio con Jyushi, nuestros padres se quedaron adentro con los maestros, seguramente hablarían de cosas aburridas.
Más tarde comimos pastel, pero papá aun parecía raro, no estaba contento, pero tampoco enojado, ¿Estaría cansado por el trabajo? Ahora que veía, todos los adultos estaban raros, no estaban platicando y parecía como si a todos les dolería su estómago.
"¿El pastel les hizo daño?"
No pude evitar preguntarles, si no estaba bueno ya no debíamos comerlo tampoco Jyushi y yo.
El maestro Karamatsu me dijo que todo estaba bien, que no me preocupara y que siguiéramos comiendo, pero, de repente ya no quería nada.
"Cariño, disfruta el pastel, realmente es delicioso"
Papá me dijo mientras probaba un poco.
"Sí, esta rico... pero parece que no les gusta o no se sienten bien"
Murmure un poco enojada, Jyushi me vio y su sonrisa se fue un momento.
"¿Papá se siente mal?"
Jyushi le preguntó a su padre y él sólo movió la cabeza para decir que no.
Vi que mi papá y el maestro Karamatsu se miraron un rato, igual el papá de Jyushi y el maestro Osomatsu, pero no decían nada, sólo se estaban mirando y eso me hacía enojar, era como si tuvieran un secreto entre todos. Me baje de la silla y me acerque a Jyushi, lo agarre de la mano y me lo lleve, si los adultos querían tener su secreto no me importaba.
"¡Quédense su secreto, yo hare un trato secretoso con Jyushi y no les diré!"
Les mostré la lengua y salí corriendo con Jyushi al patio, nos escondimos tras un árbol.
"¿Estas enojada?"
Jyushi me preguntó sentándose junto a mí.
"No, sólo no me gusta que los adultos tengan secretos... papá dijo que ya no me escondería nada"
Jyushimatsu me abrazo y así ya no sentí ganas de llorar, igual tendría un secreto con Jyushi y no se lo diría a papá.
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Gracia por leer n_n
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Lecciones de vida
FanfictionLa vida siempre tienen enseñanzas para todos, pero en ocasiones, las mejores lecciones vienen de los seres más inocentes. Los niños pueden ser más sabios que los adultos.