Lágrimas silenciosas

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La noche estaba fría, con una luna brillando en todo su esplendor, pero las nubes la opacaban, la luz caía con tristeza dando un ambiente fantasmagórico a las calles, el viento golpeaba contra las ventanas. Los animales dormían abrigándose unos a otros, las personas tenían gruesas cobijas para su protección al abrasador frío. La temporada de invierno este año azotaba muy fuerte, las pescas habían amenorado este año, los mares azotaban fuertemente las costas. Los pescadores debían tener mucho cuidado, muchas tormentas habían estado azotando los mares, pero por suerte no llegaba a las costas.

En el Mar del Norte un pequeño bote flotaba al parecer sin vida alguna sobre ella. Tenia un solo remo y este estaba dañado, las aguas estaban calmadas, el bote navegaba sin rumbo fijo, la corriente se arrimaba al norte. Una persona se asomó del bote pesquero, esta persona de cabello cobrizo, barba poblada, ropa sucia y aceitosa, se incorporó en su bote; en el bote no había nada más que el remo dañado sobresaliendo, el personaje andrajoso y una pequeña caja, en su interior traía agua y pescado crudo en mal estado.

El tipo comenzó a remar de lado a lado contra la corriente, al parecer no tenía prisa alguna de llegar a su destino, remó por varias horas, parecía no cansarse de remar, la neblina cubría con su manto la noche fría, pero una silueta entre ella se pudo percibir, otro barco pesquero, pero más grande se le acercaba. Cuando ambos barcos estuvieron lo suficientemente cerca, del barco grande apareció entre la neblina y el frío un tipo pequeño de hombros anchos.

- ¿Qué te ha pasado colega? – preguntó el tipo bajo del barco grande.

- Una tormenta en el Mar de Noruega me impactó, perdí a mi compañero. Tuve suerte de salir con vida – dijo el tipo del bote.

- Hay muchas tormentas hoy en día, en especial en este invierno del demonio. Ven – le lanzó una soga – amarra ese maltratado bote tuyo y sube a bordo y cuéntanos tu historia, colega.

El tipo del bote pesquero pequeño obedeció y subió a bordo, al estar arriba vio a 2 personas más aparte del que le dio la soga.

- Mi nombre es Victor – dijo el tipo que ofreció le lanzó la soga – soy el capitán de "Bruyas del Mar" y estos dos mis colegas Frederik y Oscar.

- Un verdadero gusto, me llamo Jakob. – dijo el del bote.

- ¿Qué hace un islandés por estos mares tan lejos? – preguntó Victor.

- Mi compañero era noruego...

- Ya no lo fastidies con tantas preguntas, déjalo estar en duelo, mejor entra al camarote y refúgiate que este frío está helando – esta vez habló Oscar, era alto, media 1.94 cm era de contextura gruesa, su cabello era muy corto y descuidado, le faltaban varios dientes y tenía una cicatriz en la mejilla.

Jakob se sintió aliviado ante tal ofrecimiento que aceptó enseguida, entró al camarote con los tres siguiéndole los talones. Le ofrecieron mantas y comida.

- ¿Cómo va la pesca en esa isla, colega? – pregunta Victor.

- Estamos sin nada de pescado, solo estamos con animales de caza, los ríos y mares parecen congelarse y los peces huyen del lugar. Mi compañero y yo salimos a pescar lejos, esta a un buen precio el pez en esta temporada, pero la tormenta fue abrumadora.

- ¿Su barca no era muy pequeña para llevar muchos peces? – preguntó Frederik, este era gordo, su dentadura era más grande de lo normal, tenia el cabello largo y esponjado.

Kurs: La BúsquedaWhere stories live. Discover now