-Primer día de clase y ya nos piden hacer un trabajo -bufó Lara. Iba a refutar su afirmación, pero continúo hablando-. No digo que no lo voy a hacer, sólo me quejó de que ni siquiera esperaron a que den los horarios oficiales, o sea, bajen un par de cambios -terminó quejándose a la nada. Reí un poco. Sus ojos se entrecerraron en mi cara.
-Te iba a decir que no es un trabajo como tal, es sólo conocernos fuera de clase -la chica me miro indignada.
-Sabes lo que es tener una mama cómo la mía -continúo con la indignación en su tono de voz, pero su expresión cambió-. No me quejó de mi mama, es genial, pero vas a tener que venir vos a mi casa, y, de todas formas, para que quiere saber nuestra vida? Es una clase de sicario, o qué? -la puerta del aula se abrió y entró otro profesor. Daniel, él de literatura. Genial. Dicen que es demasiado estricto y que no aprobas ni el recreo.
-Hola, niños. Arriba de las sillas para saludarnos -se oyó el chillido de los bancos siendo arrastrados para poder pararse. Dio una vista panorámica y habló; Bien, yo soy Daniel Manendez y soy el profe de literatura -hizo una pausa mientras seguía escrutándonos con la mirada y continúo-. Puedo notar en un par de caras que ya me conocen, o escucharon hablar de mí. Así que, pueden sentarse y empecemos.
La clase comenzó con el diagnostico, de lo que se supone, vimos el año pasado. Lara no paraba de golpear mi brazo en busca de respuestas, o era al revés? Nos picoteábamos el brazo mutuamente, tratando de no llamar la atención del profesor. Pero no todo sale como uno planea.
-Ustedes dos -elevamos la vista sin comprender-. Si ustedes, los de adelante de todo, última fila, quiero sus pruebas sobre el escritorio y a ustedes fuera del aula por el resto de la hora, a ver si así aprenden a no copiarse del otro -me paré de la silla y esperé a que Lara saliera de su banco para seguirla. Dejamos las pruebas sobre el escritorio y salimos, tal cómo dijo el profesor. Una vez fuera del aula, nos sentamos en el piso de la galería a esperar.
-No puedo creer que nos hayan cachado -Lara miraba hacia delante y reí casi sin sonido.
-Ya ves que todo es posible -crucé mis manos sobre mi regazo y empecé a jugar con ellas. Lara apoyó una de sus manos sobre las mías y me exalté, soltándolas. La mire a los ojos, me sonrió con ternura.
-Mira vos, te haces el galán y no aceptas mi mano, wow -habló con sarcasmo e hizo una mueca divertida de incredulidad. Reí.
-No, es que... -la puerta del aula de al lado se abrió y Ziggy salió por ella. Nos miro y luego a sólo a mí. Su expresión era de duda, pero no lo comprendí. Paso por delante nuestro, pero no me habló y después se perdió en el baño. Mis ojos seguían por el lugar por donde se había ido.
-No es Ziggy tu amiga? -asentí a su pregunta.
-Mejor amiga -corregí y volví mi cabeza hacia Lara.
-Seguro? -pregunto-. Porque si viera a mi mejor amigo, al menos, le daría un asentimiento, tipo "Hola, te veo", o no sé, algo.
-Debe estar molesta por cómo nos sortearon.
-Eso que es sólo el primer día -asentí.
-Lo sé.
Unos minutos después, Ziggy paso de nuevo sin hablarme y el profesor nos dejo entrar al aula tras haberse terminado su hora. Lara era agradable, pero no era Ziggy y por más que trate de sentirme igual de cómodo, no lo lograba. Y mucho menos después de que quiso tomarme la mano.
El timbre del recreo sonó a los segundos de sentarme en la silla y todos salieron expulsados del aula. Me paré de mi lugar y Lara ya había desaparecido. Suspiré, espero que Ziggy no siga enojada. Salí en su busca para entrar en el aula de al lado. Estaba vacía pero un pequeño papel estaba apoyado sobre un banco y al ver la mochila supe que era de Ziggy. Estaba arrugado, lo tomé y extendí.
"En serio sos amiga de Shawn?"
"No, ahora no"
La inconfundible letra de Ziggy me sorprendió en el reglón de abajo. Salí del aula y me encaminé hacia las escalinatas, donde pude verla con un grupo de chicos y chicas de su curso. Las bajé sin apuro y me paré frente de ella.
-Hola Gor-Shawn, que haces acá? Nadie querría estar con vos, sí eso es lo que planeas -Lautaro se rió de su propio chiste y los demás le siguieron. Ziggy me miró, sin decir nada. Usualmente, ella era la que me defendía, dado que yo trataba de ignorarlos.
-Qué sucede, Shawn? -habló sin expresión. Abrí mi boca para hablar, pero me interrumpieron.
-Dale, Zime, es Gor-Shawn -Lautaro se giró para mirar a sus amigos-. Qué le queda, no? -un pequeño coro de "si's" se escuchó a mi alrededor. Mire a Ziggy de manera suplicante, pero me ignoró. Arrugué mucho más el papel en mi mano y lo dejé al lado de donde estaba sentada. Miró con el ceño fruncido y luego me miro incrédula. Sólo me fui de ahí.
LES ESTA GUSTANDO!?!?!
LTE

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Gor-Shawn[EN EDICIÓN]
FanfictionPorque Shawn no era lo suficientemente flaco, ni lo suficientemente gordo. Porque Shawn se sentía bien, pero la sociedad no lo veía bien. Y es donde se aferra a lo menos pensado. Aclaraciones No es una historia en ofensa hacia Shawn, al contrario, s...