Konosuba: ¡¡Bendiciones Para Este Amor Explosivo!!

Interludio 2: ¿Bendita sea ésta Maldición?

Para variar fue Megumin y su estómago, la que arruinó el buen momento que estábamos teniendo, pero discutir sobre ello ahora es una pérdida de tiempo.

- ¿Puedes pararte?

- Si, ya recuperé energía, busquemos un lugar donde comer.

- Si, estamos en la capital el mejor restaurante de cinco tenedores es lo mínimo que merecemos.

Afirmé con las manos en mi cintura, en una pose de victoria.

- ¿Un restaurante? Creí que solo iríamos al gremio de aventureros.

- ¿Qué? Claro que no, ya dije, estamos en la capital y esta es nuestra cita, un restaurante cincos tenedores es poco.

- ¡Tienes razón un restaurante cinco tenedores es poco, vayamos al castillo, hagamos que los sirvientes de la realeza nos cocine! ¡Vamos!

- ¡! ¡Oye! Espera, eso es demasiado, sólo vayamos al restaurante.

Desesperado detuve a Megumin que cruzaba el puente corriendo con dirección al castillo.

- ¿Qué no dijiste que nos merecíamos más?

- Lo dije para sonar genial, no lo tomes literal, ah maldición, solo salgamos aquí.

La verdad yo también me estaba muriendo de hambre ¡corrí por todo Axel maldición!, discutir ahora es una pérdida de mi resistencia estomacal, pronto mi estómago se comerá así mismo, es lo que sentía.

- ¡Oh! Vaya, pero si es mi adorada Megumin, escuche mucho alboroto y pensé en acercarme para darles un sermón por tremendo escándalo que hacían, pero no creí fueras tú, no, creo que tenía sentido siempre sueles llamar a los problemas.

Tiene razón, no quiero coincidir con ella, pero tiene razón.

Cecily la sacerdotisa del culto de Axcis con la que desee nunca más toparme se apareció, según ella por hacer su trabajo como sacerdotisa, pero dada su personalidad seguro que solo le dio curiosidad.

- ¿Qué viniste para dar un sermón? Pff, seguro solo viniste por puro morbo.

¡Oh! Tú también tienes razón Megumin, y no me molesta coincidir contigo.

- ¿Piensas eso de mi?

- Por supuesto.

- ¡Megumin causas dolor en el corazón de tu hermana mayor! Por favor discúlpate o recibirás retribución divina, no quiero eso para ti pídeme disculpas y sálvate de la ira de Aqua-sama.

Es todo me largo, lo sinvergüenza que puede ser sobrepasa mi tolerancia.

- Vámonos de aquí Megumin tengo hambre.

Sujete la mano de Megumin con la intención de salir de allí lo más rápido posible.

En un parpadeo Cecily se paro en frente mío impidiendo que seguirá mi camino.

- ¿Tu eres? Recuerdo haberte visto antes, pero no recuerdo tu nombre ni quién eres, mmm.... Creo que fue en el festival de Aqua-sama.

Creo que el nombre oficial es Festival de Eris-sama ¡sacerdotisa molesta!

Es algo que no se lo diré ahora, no quiero cruzar mas palabras con ella.

- Soy Kazuma, novio de Megumin mucho gusto, bueno adiós.

Y de nuevo avance con intenciones de alejarme lo más posible de ella, pero de nuevo se paro firmemente en frente mío.

- ¡Ahh! ¿Qué quieres? solo déjanos ir.