Mis Animales Muertos

II

¿Cómo llamar a este momento?

Cuando discutía con tú ausencia, me vi tan ausente de mí mismo,
Soy el loco poeta que no quiere salir de su abismo,
Porque al asomarme, veo mis animales muertos,

Este ya no es mi mundo, es un mercado,
En el que he pagado de más y no he recibido mí vuelto.

No quiero volver a nacer,
Solo estoy esperando algún día poder apreciar de nuevo, el amanecer,
Dejar de entregarle mi cariño a las madrugadas,
Que me habla acerca del ser, de la nada.

Son mis sombras del arte, del filosófico, que aún cree que existe un porque...

¿Por qué existe un porqué?

Existe porqué tú existes,
Porqué no somos perfectos, sabemos que somos finitos.
Aunque ahora recorra calles de tierra, asfalto y cemento,
Después llegara el momento, en que caiga sobre estas, mi cuerpo muerto.

Me preguntó ¿Eres un animal o un Dios? ¿Hay algo peor? - Siempre lo hay, nos lo dice Friedrich Nietzsche,

Ser ambos.

Soy aquel que murió de niño, al preguntarse sobre el tiempo,
No por si es lineal o circular, sino como de él escapo.
Ayer Esteban* se iba a respirar tranquilo al campo,
Hoy no se quiere mover porque esta envidioso de Chagoman MC*

¿Y ese quién es? -
Es un sapo que no se convirtió en príncipe, pero si en un pez,

En un mar contaminado, culpa del capitalismo que lo inundo de plástico, el agua hoy es una escasez.

El obrero es distraído por el "El Gran Hermano", el cuarto poder,
La caverna de Platón, es la descripción de este gran poder,
Son sombras que están para controlarnos,
Como las instituciones religiosas que viven atrapadas y acorraladas en su ego,

En este cementerio de sombras,
Yo seré fuego.