Mis Animales Muertos

IX

Dedicado a mi habitación vacía, 

que siempre me logra entretener...

Por qué otros no podrán entender,

Aunque alguna vez les pudo suceder,

Aunque a muchos les ha de pasar,

Tener tantas ganas de hoy a alguien matar.

Pero como tantas veces que ha sucedido, sé que si lo hago no habrá vuelta atrás,

Y además tengo miedo.

Y en especial a esa persona le tengo miedo...

Sigo comprendiendo que cada vez menos me entiendo,

Y si por esta reflexión te doy miedo, o piensas que estoy loco

¿Te digo la verdad o mejor te miento?

La única conclusión que obtendrás de esta ironía, es que no tengo ni idea de lo que te quiero causar, ni en el estado en el que hoy me encuentro.

Y si alguien lee esto.

Y si alguien esta oyendo esto,

Puede estar tranquilo, que a la persona que quiero matar, no eres tú, o almeno no en este preciso momento.

Y si te digo que no habrá vuelta atrás,

Es porque esa maldita persona soy yo.

Sé que no obtendré la resurrección, ¿qué hay del renacimiento?

Para esta mente abierta pero de alma muerta,

Búscala en Europa en las aproximaciones del (1530-1550).

Imagina, las veces que me pregunte: ¿Por qué me pongo a escribir? 

Todavía no tengo clara la respuesta,

Pero creo que es la necesidad de con alguien de filosofía propia hablar, 

creo que por esa maldita razón me pongo a escribir.

Y que por esos bobos momentos de confusión, sé que el papel de mí no se podrá reír,

Por eso cuando escribo por este dúo me pongo a sonreír,

De esos extraños momentos...

En el que te tomaría del cabello y te juraría hacerte el amor de perrito (¿Qué?)

Pero más extraño es cuando te cruzo me pongo más caliente que el sol, mientras que te siento más fría como un hielo, y aun así yo soy el que me derrito.

Pero también escribo porque se, que gran partes de los que no escriben lo que piensan, ¡Mienten!

Y si algo puedo decir, es que soy hombre y no puedo cambiar,

Mejor dicho, no voy a cambiar.

Porque cuando quieres cambiar, solo mientes y mientes, y después vuelves al mismo lugar.