Mi odio pide amor a gritos,
mis ansias de libertad están en un jaula
y busco esa pasión desenfrenada de la que tanto me hablan.
No me despierto porque nunca duermo
pero tampoco dejo de soñar porque es mucho más fácil
que asumir esta tediosa realidad.
No creo que me quieras
aunque lo hagas con toda tu alma,
porque estoy ciega de asco
donde debería estar ciega de orgullo.
El combustible de lo que nunca dije
prendió la llama de lo que nunca quise que pasara.
Solo quise ocupar un rincón de la mente de alguien
pero he hecho que el paraíso se quemara.
Estoy en un punto de no retorno
me siento a descansar
ha sido mucho lo caminado
y solo quiero parar
he estado mucho tiempo en el camino equivocado.
Quiero cerrar los ojos
y abrirlos cuando la tormenta haya pasado.
