Spyro: un mundo destrozado

Capítulo 21: ¿caballería pesada?

(Por Terrador)

Fui a recibir a Volteer, Cynder y Terrador, quienes acompañaban a una bien mojada niña y Guardiana del Tiempo al mismo tiempo que escuchamos una explosión y disparos, seguidos por el silencio.

-¡Todos adentro, podrían estar atacándonos! Volteer, llévate a la niña a lugar seguro. ¡Cyril, levántate y vete con la pequeña! Ah... no te ves muy bien ¡Cúbrete la cabeza! Spyro, Cynder, quédense con él, se ha puesto pálido y ...¡Bianca!

-Puede que tenga una infección dracónica, no sé, pero no puedo hacer mucho. Podría tratar usar magia curativa.

Salí corriendo a toda velocidad haciendo zig zag, con tal que no me alcanzaran los disparos, pero me detuve. No habían más disparos y cuando me adentré al bosque, vi a dos sujetos, dragones rojos antropomorfos parados en medio de un montón de cadáveres de simios muertos vivos.

Vestían ropas extrañas. Parecían padre e hijo. El  tipo mayor usaba un 'abrigo de trinchera'  y el más joven un impermeable verde, armado con un arma grande, mientras que el mayor llevaba dos pistolas en cada mano.

-¿Ustedes hicieron todo ese alboroto? -les pregunté-

-Nada de dispararle a nativos ahora, padre... Hola, me llamo Edward y este es mi padre gruñón, Sarius Smaug. Somos dragones de fuego, por cierto.

Me recordaron a Ignitus, a él le hubiera gustado ver eso.

Edward llevaba el pelo rizado, mientras que Sarius usaba bigote y llevaba el cabello bien peinado.

-Mi hijo inventó una maquina de portales y terminamos aquí, disculpe las molestias, pero esos simios querrían arrancarnos la cara, así que los... ya ve.

-Oh, me han sacado de un buen apuro, en serio ¿ustedes causaron esa explosión?

-Yo fui, usé una carga de dinamita -dijo el que se llamaba Edward- Fue genial.

-Hijo -dijo Sarius- Creo que te excediste con esa carga. Una para un solo zombi es una pérdida de recursos.

-Fue divertidísimo. Además, le disparaste a un gran dragón púrpura de ojos amarillos y patas rojas, ¿habrá sido un conocido de este sujeto verde?

-Me llamo Terrador, no me he presentado ¡Me llamo Terrador, y soy Guardián de Tierra, señores! Oh, ya veo, a quien le dispararon fue a Malefor, ¡jajaja!

Les conté la historia una vez que caminamos juntos a la  Torre y también les dije lo que había pasado, sin olvidarme de la pequeña.

-¿Cosas paranormales, monstruos? ¿Suelos enrejados? Suena... interesante, ¿Edward? ¿Escuchaste?

-Sí.

-¿Qué te parece?

-¡Cuenten con nosotros!

-Oh, sí. Solo...no hables mucho, ¿vale? Aburres.

-Creo que él se llevaría mucho mejor con Volteer, un amigo mío y Guardián de la Electricidad -dije-.

-Además, traemos comida, bastante.

Eso quería escuchar, estaba asombrado.

-Creo que tendremos lo suficiente para un año, jaja. Nos han ayudado a limpiar el área.

-De nada, ¿hijo? ¿Qué carajos haces?

Edward parecía estar entretenido con algo.

-¿Dónde estamos?