Crossover (YAOI)

#1-Caminos cruzados.

La mañana comenzaba como cualquier otra en el reconocido estudio MAPPA, los empleados iban de un lado a otro preparando los sets y equipos necesarios para comenzar los rodajes una nueva serie, tras el éxito que "Yuri on Ice!!!" Había supuesto los productores tenían altas expectativas con su nuevo proyecto. "Banana Fish" era su nueva apuesta, la contratación del casting había sido infernal, deseando respetar la apariencia de los personajes originales encontrar actores cuyas apariencias coincidieran supuso un enorme problema.

Fue a tal grado que para el personaje principal debieron contratar un actor americano que resultó complicado convencer. Caso contrario para su coprotagonista tuvieron la fortuna de poder encontrar uno cuyo aspecto encajaba a la perfección con las especificaciones del personaje original. Y como si fueran coincidencias del destino sus actores poseían los mismos nombres que los personajes a quienes habrían de interpretar, si eso no era el destino, nadie estaba seguro entonces de que sería.

—¡Por qué tenía que quedarme dormido justamente el primer día de grabación! —exclamó un chico de cabellos castaños mientras hacía cuanto podía por apresurar sus pasos, su aspecto poco podía coincidir con el de alguien perteneciente al mundo del espectáculo. Sus prisas eran tales que llegando al sitio que sería su lugar de trabajo terminó dándose de frente con otro chico quien iba distraído limpiando sus anteojos—. ¡L-lo siento! —se disculpó a gran velocidad tras reponerse del golpe—. ¿Estás bien?

El chico tras conseguir dar con sus lentes los tomó colocándoselos—. Si, no te preocupes —ambos chicos tomando sus cosas fueron levantándose sacudiéndose sus ropas—. Hola, me llamo Katsuki Yuri. Es la primera vez que te veo por aquí.

—Soy Okumura Eiji, comienzo a trabajar aquí desde hoy —estrechando sus manos Eiji por un momento olvidó por completo sus prisas hasta que miró su reloj volviéndose a alterar, sin embargo, antes de volver a salir corriendo dirigió una nueva mirada a Yuri un tanto apenado—. Disculpa... ¿Sabes donde queda la sala de reuniones?

—Esta en el octavo piso, sales del elevador y será la cuarta puerta a tu izquierda.

—¡Muchas gracias!

Tras despedirse Yuri contemplo a aquel chico desaparecer a gran velocidad, quedándose pensado algunos instantes recordaba ese primer día en que grabaría su serie de televisión, aquel chico llamado Eiji le recordaba a él mismo, aun si sus auras parecían distintas, esa primera vez nunca podría olvidarse, más por haber sido la oportunidad que le permitió encontrarse con la persona por quien su corazón latía como un loco.

—¡Yuri!

Ahí estaba esa persona, aquel hombre con quien había caído en las redes del amor conforme las filmaciones fueron transcurriendo, como actores eran conscientes que las situaciones y sentimientos no era más que una mera actuación, pero para Viktor y él el amor fue algo que surgió espontáneamente, en algún punto pudieron darse cuenta de que ya no eran dos personas fingiendo una relación sino que eran dos seres exhibiendo sus propios sentimientos en pantalla.

—¿Viktor, terminaste con la reunión?

—Si, ya está todo listo para comenzar con las filmaciones de la película. Todos parecen estar muy ansioso hoy, incluso el director parecía estar apurado.

Yuri haciendo un poco de memoria recordó su conversación con su manager a quien le había preguntado por lo mismo—. Van a comenzar a rodar una nueva serie, y al parecer contrataron un actor americano para el papel principal.

Ambos chicos decidiendo no pensar mucho en el asunto decidieron irse a casa. Mientras tanto, Eiji tras una ardua carrera por fin consiguió llegar hasta la sala de reuniones sintiéndose apenado por ver a todos esperándolo, disculpándose en completo silencio fue que tomó su lugar. Avanzada la reunión Eiji por un instante sintió como si alguien estuviera observándolo y al pasear disimuladamente su mirada por la habitación se cruzó con unos ojos jades los cuales estaban puestos sobre él, aquel par de gemas pertenecían a un joven de cabellos rubios y que cuyos rasgos dejaban en claro que no pertenecía a dicho lugar.