Capítulo 39

2.6K 324 36
                                    

De tantas cosas que perdí,
diría que sólo guardo lo que fue
mágico tiempo que nació en abril.
Miradas tristes sobre mí,
se anidan y se hacen parte de mi piel.

—Alex Ubago,
Aunque no te pueda ver

🔱

EVAN

La realidad en muchas ocasiones puede ser asfixiante; imposible de soportar.

Muchas veces, las cosas suceden sin que entendamos el porqué y, luego de eso, nos cuestionamos si realmente existió un porqué.

Y esto que sucedió ayer, no lo entiendo.

No puedo culpar a nadie, porque no sé quién fue el responsable; sólo sé que, tanto a Juliette como a mí, nos destrozaron. Nos arrancaron el corazón y lo pisotearon una y otra vez. Nos destruyeron.

¿Por qué arrebatarnos a nuestra madre? ¿Con qué propósito?

Sinceramente, no lo entiendo...

«La asesinaron...», fueron las palabras de Juliette cuando llegué a casa a verlo por mí mismo.

La policía ya estaba allí y Juliette estaba afuera llorando; apenas vi la escena, puedo jurar que mi mundo entero se cayó. Quedé tan pasmado con las patrullas de los policías rodeando la casa, mientras otras personas sacaban una camilla de la casa donde el cuerpo sin vida de mi madre iba dentro de un saco negro.

Sentí como si me hubiera arrancado algo del pecho en ese momento. Todo a mi alrededor perdió enfoque y el aire no me era suficiente, me sentía sofocado.

Me estaba asfixiando.

¿Cómo pasó? ¿En qué momento?

Juliette estaba tan en shock y destrozada por ello, que no hacía más que llorar mientras me abrazaba.

No podía creerlo... No quería creerlo.

Ahora mismo estoy viendo como el ataúd donde se encuentra mi madre está siendo enterrado.

La pérdida de un ser querido se siente como un dolor sordo; es desgarrador y sientes que incluso morirás por el dolor tan grande que implica. De pronto, te sientes vacío y ajeno a todo a tu alrededor. Es como si se hubiera llevado una parte de ti con él. Es muy doloroso, tanto, que no se puede explicar fácilmente con palabras. Y entonces, comienzas a extrañar a aquella persona porque sabes que no la volverás a ver y que ya no hablarás con ella nunca más. Se siente como un final. Un final que nadie quiere vivir con seres queridos ni llegar a él. Un final que a todos nos duele.

Ahora comprendo lo mucho que le dolió a Elizabeth perder a sus padres.

Juliette me abraza con fuerza, mientras vemos juntos como el ataúd baja y, acto seguido, comienzan a echarle tierra encima.

La causa de muerte: una bala en el cráneo.

Juliette dijo que en el momento que ocurrió todo ella estaba en su habitación, que no escuchó nada sospechoso, y sólo escuchó el momento del disparo. Desde ahí, todo se salió de control.

Mis ojos se llenan de lágrimas, pero respiro profundamente para aminorar el nudo que se ha formado en mi garganta.

Beso la frente de mi hermana para transmitirle que todo va a estar bien, que no voy a dejarla sola y mucho menos permitiré que le hagan daño.

La policía está llevando a cabo una investigación en el lugar de los hechos, para dar con algún sospechoso o culpable. Así que por ahora no podemos regresar a casa hasta que la investigación allí se haya acabado.

Aunque no te pueda ver ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora