Аℓgσ qυє иσѕ υиє. (Єѕρє¢ιαℓ ∂ια ∂єℓ ρα∂яє)

Сαριтυℓσ 56

-Ándate- le pedí, no iba a permitir que me vea llorar.

-Escucham-- lo interrumpi.

-Ándate o me voy yo- le advertí.

-Lodo- se empezó a acercar a mi, salí rápido de la cama- No salgas así.

-¡No me dirijas la palabra!- grite, salí de la habitación y cerré antes de que entienda lo que estaba pasando la puerta.

-¡Lodo!- tome la perilla y la trabe, de modo que él no la pueda abrir, ni seguirme.

Empece a correr por los pasillos mientras todo daba vueltas y parecía ir en cámara lenta. Después de pasar por unos pocos pasillos vi una puerta abierta y un parque. Sin pensarlo dos veces pase. Claro, me había olvidado que estaba en medias, bata de hospital y que el cielo estaba lleno de nubes.

Camine muy pocos metros hasta encontrarme con una banca, y tanto el cielo como yo nos pusimos a llorar. Mi vida era un desastre, y todo lo que había construido se fue a la basura.

Nunca se sí puedo contar con Xabiani pero ¿Qué espero de él? ¡Tiene 20 años! ¡Es muy chico! Muy chico pero me dejo embarazada ¿¡Cómo me pude meter con él!? ¿Por qué me metí con él? Desde un principio me debería haber alejado, y cuando quede embarazada me tendría que haber rendido e irme a Italia.

Pero ya es tarde, Xabiani sabe la verdad. El frío recorrió mi piel y la corriente helada choco con mi cara, que aún mantenía los ojos cerrados y las lágrimas mezcladas con las gotas de lluvia cayendo. Ni siquiera pasados los cinco minutos deje de llorar. Me encontraba completamente empapada.

¿Pero qué decir? Mi vida era cualquier cosa, y yo era un fracaso. Un fracaso como persona y como madre. No le pude dar un peor padre a mi hija que Xabiani. Por eso lo que necesito hacer es buscarle un nuevo padre, que aunque no estemos juntos, me ayude a engañarla. Crecer sin un padre es duro, y Xabiani me lo ha dicho varias veces.

Sentí como una abrigada toalla se posicionaba en mis hombros, y unas manos agarraban mis brazos. Mire al costado y me encontré con la cara de preocupación de Benjamin. Baje mi mirada y puse mi cabeza en su hombro, además de que acaricie mi vientre.

-¿Qué haces acá?- le pregunte.

-Una de las enfermeras me dijo que estabas acá y te tenía que venir a buscar- hizo una pausa- Volvamos a la habitación.

-No pienso volver- afirme- Me voy a quedar acá hasta reventar.

-Lodovica, o vas a la habitación o te llevo- se enojó, me pare y le di la mano- Mejor así.

Me llevo por los pasillos, me sentía mareada eh de reconocer. Llegamos a la habitación cuya puerta seguía cerrada.

-¿Vos la cerraste Lodo?-.

-Si, encerré a Xabiani ahí- se toco la cabeza.

-¿Qué voy a hacer con vos?- yo sólo me mantuve inmóvil mientras él la abría.

Xabiani me vio de pies a cabeza y corrió para abrazarme, abrazo que no correspondí. Cuando me soltó camine hacia el interior de la habitación.

-¿Tenes un pijama acá?- fui adonde Alba me había dejado la ropa y asentí- Ponete eso, y vos Xabiani tene mucho cuidado, porque tal vez que la próxima vez se te escapa y no vuelve.

-No lo creo, si tan sólo yo la puedo contener ¿Ya te contó que la hija que espera es mía?- le respondió enojado.

-Si, lo sabía, y como sabía que ya tenes novia- hizo una pausa- Igual tranquilamente yo podría ser el padre, si en primera instancia me eligió a mi para que cuidemos a la beba.

-Ahora si que me sacaste- Xabiani se abalanzo sobre Benjamin, rápidamente me puse en el medio.

-¡BASTA XABIANI, ¡ASÍ NO SE ARREGLA NADA!- lo mire a los ojos y me di vuelta para mirar a Benjamin- Anda, perdón por lo que paso.

-¿Él empieza y le pedís perdón?-.

-Él no empezó- lo mire a los ojos enojada- Permiso.

Fui al baño y me bañe. Mientraslas gotas de agua se mezclaban con las gotas de lluvia, me quede pensando en lo que paso ¿Por que Xabiani accionó así? ¿Y Benjamin reacciono así? Si de algo estoy segura es que no fue por mi, fue por algo más difícil de entender, fue por orgullo propio. Porque uno defiende el orgullo suyo adjudicando que me dejó embarazada, y el otro se defiende diciendo que yo lo elegí porque es mejor.

Acaricie mi vientre en la ducha, era muy raro. Una vida crecía adentro mío. Crecía y no paraba. Tan sólo pensar en traer una vida al mundo. Voy a ser madre ¿Se entiende? Puse una mano en mi vientre. Decidí salir, ya me sentía menos frío, y estaba limpia. Note que no me había llevado el pijama. Agarre la toalla y la enrolle en mi cuerpo. Salí.

-Hola- Xabiani se paró y se acercó a mi.

-¿Ya se te pasó el enojo?- se sonrió.

-Si- paso sus brazos por mi espalda- Perdón por lo que dije, no me dejaste pensar...

-Es que para mi vos tenes mi edad, y esta bien lo que vos hiciste, yo estoy actuando mal y de manera infantil, pero el embarazo me da mucho miedo, me encanta, pero al mismo tiempo tengo una vida que crece adentro mío y hay veces que me gustaría pararl-- me interrumpió.

-¿Abortar?- negué rotundamente.

-Pararlo, al mundo, para tomar las decisiones con tiempo, pero ahora más que nunca soy más impulsiva que otra cosa- lo abrace.

-Ahora estoy yo Lodo, y todo esta bien-.

-No se, nunca se sí todo esta bien- lo abrace más fuerte. Nos soltamos después de un rato, pero note que se me estaba por caer la toalla- ¡Cerra los ojos!

-¿Por qué?-.

-Se me cae la toalla- proteste y río.

-Lodovica, ya te conozco desnuda- intente agarrar la toalla en un fallido intentó.

-¡Pero no es lo mismo!- de suerte la agarre y me acosté rápido, de modo que quede tapada- Primero no somos novios, segundo estoy re gorda, tercero ¡Cerra los ojos!

-Esta bien, ya los cerré- corrí a dónde estaba el bolso y rápidamente me puse la ropa interior- ¿Puedo abrir los ojos?

-Estoy en ropa interior- los abrió igual y me intente tapar con la parte de arriba del pijama- ¡Xabiani!

-¿Qué pasa?- río acercándose- ¿Tenes miedo de mi?