sempiterno • offgun

dos

Gun esperaba el bus bajo el intenso sol como siempre. Solo había una cosa diferente el día de hoy; Off lo había abandonado. El chico trató de cubrirse de los rayos con una mano mientras mordía su labio inferior con nerviosismo y maldecía a su mejor amigo en su cabeza.

Desde hace semanas atrás, Off se había dado cuenta que Tay, New, Gun y él tomaban el mismo autobús y sugirió que se fueran todos juntos, en manera de ayudar a su mejor amigo de pasar más tiempo con New. A Gun le había parecido una buena idea pues era una forma de acercarse a él sin tener que estar a solas.

Pero eso había cambiado hoy. Tay se había enfermado de algún virus del cual no recordaba el nombre, así que faltaría a clases más o menos una semana. "Está bien, al menos aún tengo a Off conmigo" había pensado Gun.

Error. Off lo llamó el domingo durante la noche avisando que su primera clase se había cancelado, así que no tomaría el bus con él. Ahora estaba allí, en la parada del camión, sudando y con el corazón en la garganta.

—Buenos días, P'Gun.—Saludó New sonriente a su espalda.

Gun tragó duro antes de voltear. La sonrisa del menor lo deslumbró. ¿Por qué tenía que ser tan bonito?

—Hola New.—Murmuró aferrándose a las correas de su mochila.

El menor miró curiosamente a su alrededor, abriendo los labios de manera adorable.

—¿Aw? ¿Y P'Off?

—No tiene clase hasta las nueve.—Explicó evadiendo el contacto visual.

—Oh, está bien.

El silencio reinó el ambiente y Gun quiso morirse. Estar alrededor de New lo ponía nervioso y no sabía qué decir. Normalmente Tay y Off eran los que hablaban sin parar, y Gun solo adhería comentarios de vez en cuando.

El autobús llegó en medio del debate mental de Gun. Ambos muchachos abordaron y sus ojos se dirigieron a los únicos dos lugares vacíos continuos. Gun sabía que New estaba incómodo y se sentaría en algún otro lugar con un extraño, así que avanzó hasta esos asientos y tomó el lugar junto a la ventana.

Para su sorpresa, New lo siguió y se sentó a su lado. El mayor se removió en su asiento, entre contento y preocupado. Estaba feliz de que New hubiera elegido sentarse a su lado, pero no tenía idea de qué hablar con él.

—Escuché que Sing lo invitó a su fiesta de cumpleaños.—Dijo New, tocando ligeramente su pierna para llamar su atención.

—Lo hizo —Pronunció soltando una pequeña risa—. Y no me hables tan formalmente, New. Soy mayor que tú por unos meses solamente.

—Pero, P'...

—Solo Gun.—Corrigió.

New le sonrió.

—Está bien, Gun.

El estómago de Gun dio un vuelco y sonrió mirando al piso.

—Así que, ¿Cómo sabes de la fiesta? ¿También fuiste invitado?

—Si, Ai'Sing nos invitó a mi y a Tay. Estaba algo sorprendido que me invitara, no somos tan cercanos.

—Sus fiestas no son tan exclusivas como las hace parecer, invita a un montón de gente.

—Lo sé, pero es su cumpleaños... ¿tal vez quiere recibir más regalos?

Gun rió enternecido.

—No creo que la mitad de gente que vaya sepa que es por su cumpleaños, New.

—¿Entonces no van a darle regalos?

—Quizá unas cuantas personas, pero no la mayoría.

El menor hizo un puchero.