Started With a Lie [Traducida Al Español]

Capitulo Cuatro

Started With A Lie – Capitulo Cuatro

Me caigo de mi silla. No estoy exagerando.

— ¿Hola? —Dice él— ¿Hola? ¿Señorita Ivory?

Toco la tela de mis jean mientras me siento en la dura madera del piso. Siento el sudor correr por mi nuca, aunque hace frio. Sigo sin creer que Lee Richardson está en la otra línea. ¿Qué digo? Pienso.

— ¿Hola? ¿Es el número correcto?

Finalmente encuentro mi voz— Hola —toco un agujero en mis jeans en la rodilla—. Lo siento por mi… lenguaje obsceno —me refiero a la maldición que dije cuando me di cuenta que estaba hablando con él. No sé cómo hablar. ¿Debería hablar formal? Él ni siquiera es tan mayor.

Él se ríe con una risa profunda— Esta bien.

Me desmayo. Su risa suena como el canto de ángeles. Me compongo— Um… Yo soy Ivory Flores

Digo con un tono de negocios. Él debe estar acostumbrado a eso.

—Bueno, soy Lee Richardson —repite—. Solo quiero enfrentarte en algunas cosas que he oído —me congelo—. Algo sobre que… ¿tú y yo declaramos algún tipo de relación?  

Me doy cuenta que él tiene un pequeño, casi imperceptible, acento Británico. No lo puedes decir la mayoría del tiempo. Solo se puede escuchar en algunas palabras.

—So-sobre e-so —tartamudeo—. Escucha, puedo explicarlo…

— ¿Puedes? —pregunto él. Él no espera por mi respuesta—. Eso sería magnífico entonces. Hice una investigación y vi que mañana vas a un viaje de estudios. ¿A Nueva York? Estoy en lo correcto, ¿Señorita Ivory?  

—S-si —¿a dónde va con esto?

—Encantador —dice él, con una sonrisa por su tono—. Una de mis oficinas está en la ciudad de Nueva York. Te veré allí.

Me detengo… por uno, dos, tres segundos— Pe-pero, no puedo visitarte —necesito una excusa—. Estoy en un viaje de estudios. Mis profesores jamás me dejaran alejarme de mi grupo.

Y justo en ese momento, mamá grita— ¡Ivory! ¡Hora de la cena!

Me quejo, esperando que él no escuchara.

Escucho una risita de Lee por la línea. Estúpido— Creo que es tiempo de irte, Ivory —aprieto mis ojos en vergüenza—. Y para responderte, hablare con tu consejo escolar. Pienso que harán una excepción por esta situación. Y si no, deberé visitarte personalmente.

—Pero…

La línea suena muerta. Miro fijo el celular. Él acaba de colgarme. ¿Muy grosero? luego de nuevo, difundiré rumores sobre él, pienso mientras bloqueo mi teléfono y lo dejo en mi cama. Pongo mi cabello rubio en un moño y me dirijo a la cocina donde mamá esta agitando un cuenco con algo humeante.

—Hola, mamá —digo. Veo una tabla de cortar con vegetales sin cortar y decido ayudarla. Comienzo a cortar algunas cebollas y papas.

—Oh hola, cariño —se gira hacia mí—. Oh, gracias. No pensé que no tendría tiempo para cortar eso —se gira de nuevo a poner unas cebollas en la cosa humeante.   

— ¿Qué estás haciendo?

—Un estofado con algunos panecillos —responde, agitando la mezcla— ¿Tienes hambre?

—Mucha hambre —respondo—. Mañana es mi viaje a Nueva York. Nos quedaremos por dos o tres días. ¿Me puedes ayudar a empacar después de cenar?