Se invierten los papeles

Parte nueve

Ha Neul comenzó a llorar fuerte, necesitada de comida y de un poco de contacto físico con su progenitor, podía sentir la suave esencia cerca, pero la necesitaba incluso más.

Sacudió con fuerza sus bracitos empuñados mientras las lágrimas recorrían sus mejillas.

Sangwoo estaba a su lado, llevaba un rato despierto y tapaba con fuerza sus oídos, le dolía la cabeza escuchar los berridos de la bebé que se encontraba a su lado.

Gritaba con fuerza a Bum para que quitara a la criatura de su lado o que hiciera que dejara de llorar, pero mientras él más gritaba, la bebé más se alteraba.

Al parecer, Bum no estaba, agudizó su olfato y ni pizca de la esencia del alfa por la casa.

Trató de regular su respiración y con cuidado, volteó hacia Ha Neul, era tan pequeña, no podía creerse que esa criatura había nacido de él, él la había hecho.

Estiró su mano con cuidado y la depositó en la mejilla de la menor, esta detuvo su llanto, un puchero aún permanecía en sus labios, su rostro cubierto de lágrimas.

Sangwoo inconscientemente sonrió. Realmente quería terminar con todo esto, pero pasó por su mente que matar a la bebé no iba a ser la solución.

¿Y qué si se terminaba atormentando aún más luego de asesinar a la criatura?, además ella no tenía la culpa de la vida de mierda que estaba llevando, ella no era la culpable de que él sea omega, de que sea un objeto.

¿Quizá todo mejoraría si se suicidaba?

Se notaba que Bum amaba a Ha Neul, que él se encargue de criarlo, él fue quién le embarazó, ahora sería su responsabilidad.

Y mientras acariciaba el rostro sonriente de Ha Neul, su mente volvió a nublarse para dormir nuevamente.