Danna

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Lanzó mis cosas al suelo y soltó una risa tan estruendoza que resonó en toda el aula.
Danna siempre había sido ese tipo de chica. La Bully, la bravucona que se sentía elevada sobre todos por tener un busto predominante para el cuarto grado.
Aunque su actitud no era lo más detestable.

También su rostro parecía ser como el de una ardilla comiendo sus bellotas.

Había sido expulsada de su antigua escuela por "indisciplina" . O mejor dicho: tuvo una pelea un tanto violenta con otra niña.
Pero, ¿por qué tenía que ser transferida a mi escuela?
Tuve esa mala suerte.

Siempre me molestaba, me decía cosas para hecerme sentir mal, trataba de hacerme siempre la vida difícil.

En una ocasión me amenazó con golpearme en el horario de salida.
Le conté a mi mamá de la situación, pero no respondió, suele no prestarme tanta atención.
Después de insistir varias veces, terminó escuchandome y decidió hablar con su mamá.
Lloré esa vez porque no quería tener más problemas con Danna, sabía que me molestaría aún más.

Antes de que ella llegara, las cosas eran muy buenas.

                           ***

Fátima, mi mejor amiga de ese entonces me hacía pasar buenos ratos. La llamaba "Sammy" por Sam Pocket de i carly. Digamos que se ganó su apodo debido al gran parecido (no sólo físico) sino también en su forma de ser con la de esta chica.

Éramos totalmente contrarias, ella era demasiado enérgica, siempre se la pasaba gritando, corriendo, brincando, buscando pleitos armando cualquier desorden en la clase. Mientras que yo era la niña retraída, callada, la nerd de la clase, la que prefería quedarse tranquila observando a su amiga.
Aún así eramos muy unidas.

Pero como mi vida está llena de desgracias...
Para mi mala suerte Sammy tuvo que cambiarse de escuela.
Me dolió mucho tener que verla irse, pero no podía hacer nada.

De nuevo me quedé sola.

Tenía más amigos, claro, pero no era lo mismo.
Había un niño llamado Manuel que era bastante extraño pero aún así me caía bien.
También era alguien aplicado, aunque no tanto como yo, él era un poco más relajado.
Recuerdo muy pocas cosas de él.
Un vez le pedí prestado un peso para comprar unos dulces o algo parecido.
Creo que a todos nos ha pasado que se nos olvida pagar nuestras pequeñas deudas, ¿no?
O es al revés y se te olvida cobrarlas.

Bueno, pues a él jamás se le olvidó.
Todos los malditos días se tomaba la molestia de pedirme su peso prestado. Y obvio la primera vez que me lo dijo se lo devolví.
Pero él seguía insistiendo que le debía su mísera moneda.
Creo que en total de todas las veces que me cobró ese mismo peso debí de darle unas cien veces la misma cantidad.( Debió advertirme que era préstamo con intereses)

Lo bueno fue que antes de que me cobrara otras doscientas veces él también se cambió de escuela.
Había dicho que fue porque el profesor que nos daba la clase no enseñaba.
Y no se equivocaba, no hacía más que jugar Candy Crush, navegar en su Facebook y ver porno.

*Sé que es verdad lo del porno por experiencias que será mejor no mencionar*

Una vez sin Sammy, me encontraba sola de nuevo.
Danna comenzaba a lanzarme sus malos tratos...

Llegó una niña nueva.
Seguramente muchos de ustedes la conocen.
Arlette.

El día que se presentó frente la clase llevaba un pantalón de mezclilla con la camisa de la escuela, y zapatos escolares con calcetas de estampado.
Me dió un poco de gracia el detalle de sus calcetas.
Estaba demasiado nerviosa, solo mencionó algunas pocas cosas.

No me pareció alguien muy interesante.
Así que decidí que sería mejor comenzar a hablar con ella después de un tiempo.

Cuando hablamos hubo cierta conexión, me cayó súper bien y supongo que yo a ella también porque terminamos por hacernos amigas.
Con el paso de los días nos hacíamos cada vez más y más cercanas.
Terminó por convertirse en mi mejor amiga.
Y aún extrañaba a Sammy, pero con ella era algo muy distinto.
Arlette era más callada, más comprensiva, más aplicada.
Me llevaba mucho mejor con ella.

Ahora todo parecía estar bien, ya no me sentía tan sola, sabía que al menos ahí había alguien.

Y aquí es donde entra Danna, tirando mis cosas al suelo riéndose de mí, burlándose de mí.

No podía seguir con estos abusos, necesitaba poner un alto.
Exploté en ese momento, estaba llena de ira, de coraje.
Me levanté de golpe y comencé a gritarle.

Ella asustada me dijo:

-"Está bien, está bien.
Tranquila"

-¿¡Acaso te hice algo yo alguna vez como para que me molestaras!?
¡Ya déjame en paz!

-"E-está bien".

Se alejó rápidamente, caminando de manera muy torpe. Estaba realmente nerviosa.

Yo me sentí verdaderamente satisfecha en ese momento, estaba demasiado excitada por la adrenalina de lo que acababa de pasar.
Ahora estaba más tranquila.

El asunto con Danna ahora estaba más que arreglado.
No volvería a molestarme.

Más no reparé en lo que vendría después...

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Holaaa a todos, sé que ya me había tardado demasiado en subir la tercera parte, pero me había encontrado realmente ocupada.
Espero les guste, si tienen alguna pregunta, comentario, no duden en escribirme algo por ahí.
Los amo!!! Gracias por leer mis historias! ❤️

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