« H3: Guiños de fantasmas »

622 91 10
                                    


Sólo podía escuchar sus pisadas que dejaban marca en la plancha de nieve que cubría todo el pasto de ese parque.

Pero más temprano que tarde logró percibir otro movimiento, un movimiento rápido pero firme.

Cuando se dio la vuelta para encarar a aquello que lo estaba siguiendo quedo congelado del miedo. Esa silueta, la silueta que había visto antes ahora estaba a unos metros de el, totalmente inmóvil, parecía una estatua y no lograba verle la cara. Esa cosa parecía haberlo seguido pero no escucho ningún pasó detrás de el, solo un movimiento brusco que se acercaba a lo inhumano.

Y sintió que el mundo se le venía encima cuando la única farola que servía pego su luz contra la cara de esa cosa que se mantenía firme como un soldado. Esa cosa le sonreía de una manera asquerosa y sintió que se desmayaria en cuanto subió la mirada ¡Esa cosa no tenía ojos!

—¡YAAAAH!— Gritó Hoseok por lo aterrado que estaba, pegándose a Seokjin como si su vida dependiera de ello.

—Vamos Hoseok, ni si quiera termine de contar la historia— Dijo Namjoon en un tono que hacía notar su decepción.

—Sabes que a el no le gustan las historias de terror— Contestó Seokjin con una pequeña sonrisa marcada en su rostro.

—Está bien, de igual forma ya tenemos que irnos— Comentó Namjoon levantándose del tronco donde tomaba asiento.

Eran más o menos las 11:30 p.m, los chicos se encontraban en un campamento de verano en medio del bosque, que, según el folleto que había sido entregado a sus padres, los ayudaría para el desarrollo de habilidades corporales además de que pasarían mucho tiempo con sus más grandes amigos.

La actividad de hoy era disfrutar del cielo estrellado en una fogata mientras contaban esas historias que no los dejarían dormir por la noche. Para ello creyeron que sería buena idea adentrarse un poco en el bosque para hacer de todo una mejor experiencia.

—Hoseok, tenemos que regresar a las cabañas— Seokjin trato de hacer que Hoseok lo viera a los ojos pero todo su esfuerzo parecía no dar frutos.

—Yo no iré ahí— Se negó al instante —¿Y si en el camino me encuentro con el hombre sin ojos? No quiero ir ahí...— Lloriqueo refiriéndose al bosque.

—No te pasará nada, yo te cuidaré— Le tranquilizo mientras se ponía de pie.

—Yo aún puedo irme— Dijo Mingyu buscando algo entre los troncos.

—¿Qué es lo que buscas?— Preguntó Seokjin amablemente acercándose a su compañero.

—A Jazmín— Respondió bajito.

—¿Jazmín? ¿Quién es Jazmín?— Preguntó nuevamente.

—Jazmín es una...—

—¡Araña!— El grito de Irene logró ganar la atención de todos los chicos del campamento que se encontraban en aquella fogata.

Lo siguiente fue un completo alboroto de chicos y chicas que corrían, gritaban y se escondían en donde podían.

—¿Dónde está Hoseok?— Preguntó Seokjin en cuanto notó su ausencia.

—Hoseok corrió hacía el bosque— Contestó Namjoon señalando la dirección en que se había ido.

—Demonios...— Exclamó Seokjin antes de correr hasta la dirección que se le había indicado.

—No existen los monstruos que contó Namjoon, no existen los monstruos que contó Namjoon, no exist- ¡Ah!— Gritó Hoseok cuando piso una rama rompiendola en el acto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—No existen los monstruos que contó Namjoon, no existen los monstruos que contó Namjoon, no exist- ¡Ah!— Gritó Hoseok cuando piso una rama rompiendola en el acto. —Tranquilo, solo necesitas calmarte...—

Hoseok siguió caminando en los largos caminos del bosque, tomando sus manos entre si en un débil intento de relajar sus nervios.

El sonido de las pisadas se hicieron presentes, pisadas que no eran suyas.

—¿H-hola?— Preguntó mirando nerviosamente a sus lados, no había nada.

—Okay...— Murmuró devolviendo su vista hacía el camino que tenía en frente.

El camino estaba sólo, el clima era frío y sus manos temblaban ¿Acaso no encontraría el camino nunca?

Esos pasos, de nuevo escucho pasos pero esta vez más cerca, como si aquello que provocaba esos ruidos quisiera ponerlo aún más nervioso.

Siguió con pasos lentos hasta que algo lo tomó por la cintura.

—¡DIOS MÍO, SEÑOR SIN OJOS NO ME HAGA DAÑO, YO SOLO ESTOY PERDIDO, NI SIQUIERA SOY SABROSO, COMI INSECTOS EN TODO EL PRE-ESCOLAR!— Lloriqueo cerrando los ojos con fuerza.

—Eso lo sé, Hoseok— Contestó Seokjin tratando de no reír.

—Jin...— Hoseok abrazó a su amigo con fuerza -Creí que moriría-

—Te dije que yo siempre te cuidaria, anda, vamos— Le llamó antes de comenzar a caminar.

—¿Por qué me estabas siguiendo? ¿Por qué no me llamaste?— Preguntó Hoseok ahora más relajado.

—Yo no te estaba siguiendo, recién te encontré— Contestó confundido.

—Si tú no me estabas siguiendo entonces ¿Quién...—

Pero su oración fue interrumpida por el sonido de una rama rompiéndose.

—¡JIN, VÁMONOS DE AQUÍ!—

Jin salió del bosque con un Hoseok en brazos, cumpliendo a la perfección con su papel de héroe.

¿Así sería siempre?

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Besitos, gracias por tanto apoyo, los amo. 💜

[S]

Héroe; 2Seok-JinSeok | BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora