Me despierto con la alarma del móvil a las siete y veinte. Me levanto rápidamente, a diferencia de otros días que se me pegan las sábanas. Pero el motivo es claro: hoy es el primer día de clase y estoy ansiosa por empezar. He tenido un verano fantástico en Europa, concretamente en Malta: fiestas en yates, risas con ricachones, tratamientos de belleza, un bronceado de playa perfecto...
Han sido las mejores vacaciones de mi vida porque las he pasado en compañía de mis tres mejores amigas: Kate, Alison y Jenny.
Pero debo olvidarme del paraíso mediterráneo y concentrarme en aprovechar al máximo mi último curso en el instituto ¡necesito buenos resultados para la universidad! Tarea no muy difíl para mí, consigo todo lo que quiero cuando quiero y como quiero. Me pongo el conjunto que había elegido ayer por la noche, es necesario ir bien vestida el primer día de clase, bueno, el primero y ... ¡Todos!
Me miro al espejo, estoy radiante.
Bajo las escaleras y me saluda Leonor, mi nana. Como mi padre está de viaje de negocios y mi madre colaborando en África como voluntaria en una ONG, este curso lo voy a pasar con el servicio: Nana; Michael, el mayordomo; el chico de la piscina, a quien todavía no conozco; el chef Angelo y Georgina, la nueva criada.
Mi hermano mayor vuelve mañana de sus vacaciones en Ibiza e iré a buscarle al aeropuerto con Nana.
El desayuno esta preparado, tortitas con sirope de caramelo. Me doy el capricho de comer tortitas por ser un día especial. De repente, comienza a sonar mi teléfono móvil y para mi sorpresa, son las plastas de mis vecinas:
-Hola vecinita, somos Sarah y Shana, las gemelas ¿sabes quienes somos no cari?-me preguntan al unísono.
Como odio a esas dos, no sé como se las habrán apañado para conseguir mi número.
-No sé quienes sois-miento.
Oigo de fondo a Shana, escandalizada.
-Anda gordi como no vas a saber quienes somos, si somos tus vecinitas de al lado, las que atropellamos a tu pe...
Se oye de fondo a Sarah insultando a su hermana, a punto de haber metido bien la pata.
"¿Cómo eres tan estúpida de decir que atropellaste a su perro cabeza de cacatua?"
-Lo siento chicas, nunca he tenido perro, os equivocais.-las aseguro. De todos modos, si esto es una clase de broma de frikis, mi tiempo es muy preciado como para desperdiciarlo hablando con vosotras dos.
Cuelgo. Que horror de mujeres, era la quinta vez que me llamaban esta semana para preguntarme si iría con ellas en su escarabajo rosa nuevo el primer día.
Con el teléfono todavía en la mano, entro en el grupo de Whatsapp que tengo con Kate, Alison y Jenny.Jenny:
Nenas, Kate, Alisson ¿cuando vais a venir a recogerme? ¡Se me van a dormir las piernas de estar plantada en la puerta de mi casa como una idiota!Kate y Alisson primero recogen a Jenny y después vienen a por mi.
Kate y Ali son hermanas mellizas pero son completamente opuestas y su prototipo de chico afortunadamente también, por lo que sus relaciones amorosas nunca han conseguido romper el lazo que tienen tan especial.Kate:
¡Ya llegamos pelirroja! Siempre gruñendo, alegra esa cara de guarrila que tienes...Jenny bromeando:
Tía ¿Qué confianzas son esas? ¡ Ni que nos conocieramos desde los cinco años!Al oberservar que dejan de discutir por mensajes imagino que ya habrán recogido las dos hermanas a Jenny y que vienen a por mi. Me termino las tortitas, lo más rápido que puedo evitando atragantarme. Oigo llegar el audi descapotable, me pitan, ansiosas por ver mi modelito. Salgo a toda velocidad caminando con firmeza sobre mis cuñas nuevas y hago un pequeño desfile en frente de las pavas de mis amigas que me aclaman y gritan: "¡Guau estás buenísima con ese conjunto!" Las lanzo un beso y empezamos a reirnos todas como solemos hacer mientras entro en el descapotable.
Ali arranca y noto la potencia de los caballos del cochazo, suena en la radio Memories de David Guetta y todas cantamos a pleno pulmón la pegadiza canción.
Cuando llegamos al aparcamiento del instituto todos se nos quedan mirando. Llevamos la música muy alta y como a Ali le encanta dar la nota empieza a pitar a la gente. Aparcamos al lado del coche de Danny y Marc. Les vemos fumando cigarrillos y están muy sexys apoyados en el jeep granate.
Las primeras en salir del audi somos Jenny y yo. Los dos chicos del equipo de fútbol nos miran de arriba a bajo y sonríen, que descarados.
Nos saludan a las cuatro y nos preguntan por nuestro verano.
Llevaba sin hablar con Marc desde que dejamos nuestra relación. Exactamente, antes de que empezara el verano. No acabamos muy mal, simplemente me cansé de él y por su parte, se lo tomó bien.
Suena el timbre ¡empiezan las clases!
ESTÁS LEYENDO
¡Dame lo que necesito!
Novela JuvenilRoss desde pequeña ha sido el centro de atención y siempre ha tenido lo que ha querido: ropa, maquillaje, chicos locos por ella... Pero la vida de Ross no es tan perfecta como todo el mundo cree, nunca ha recibido ninguna clase de amor y es lo que m...