CON O SIN MÁSCARA... TE AMO (PARTE II) [COMPLETA]

CAPITULO II

Ahí está de nuevo el lago y la pequeña barca de madera.

Y ahí está el.
Erik se encuentra sentado en un escalon.
Usa unos pantalones negros de piel y una blusa que le deja al descubierto su pecho.
Y también usa su máscara.

-Pense que no vendrías.
Ven...

Me siento a su lado.

El me rodea con su brazo acercandome a su cuerpo.

-Cuanto tiempo ha pasado...
-Hay pasado mucho.
-En verdad te extrañe.

Erik me da un beso en la frente.
-Ven conmigo.

Erik se coloca encima de la barca y yo avanzo hasta llegar a donde está el. Me siento sobre la barca
Y Erik comienza a remar.

Con el eco de las catacumbas aprovecho para cantar.
Junto con el.

En sueños yo te vi
Y te escuché

Mi corazón se enamoró
Y sigue así

Yo quiero estar aquí
Junto a ti

Fantasma de la ópera aquí estás, conmigo ya...

Mi ángel eres tú,
Mi hermoso ser

Contigo quiero estar
Hasta el final

Mis ojos no vieron
Tu bella luz

Fantasma de la ópera soy yo...
Y tuyo soy...

No me importa lo que digan
De tu faz

Yo te amo por tu ser...
Yo soy tu máscara...

Y yo el portador...

Tú voz y mi voz juntos al fin
Fantasma de la ópera eres tú/ soy yo...
Y mío eres/ mía eres...

Mi ángel de la música...

Había pasado mucho tiempo de que no habíamos cantado juntos.
Fue un momento tan emotivo. Y hermoso.

Llegamos hasta su casa.
Me ayuda a salir de la barca y ambos nos sentamos frente al órgano.

-¿Donde esta tu hijo?
-Esta estudiando. Le estoy pagando a una mujer por su cuidado.
Me da pena salir así a la calle. Y que me vean como una bestia.
-No deberías tener miedo.
-Mirame Elizabeth, soy una criatura horrible. Además soy un asesino.
-Eso ya quedó atrás. Ahora eres diferente... ¿No es así?
-No he cambiado del todo.
Hubo un hombre llamado Dimitri, un ruso.
Que quería comprar el teatro, pero le veía la cara al señor Firmin y también a André.
Algo no me gustaba en el y comenzaba a tratar mal al público y tambien algunos de los cantantes.
Y bueno... Lo mate.
-¿Que? ¿Por qué?
-Por que estaba harto de el. Se lo merecía.
-Eso no era necesario...
-Debo confesar que también iba matar a Aarón.

Me levanto del asiento y lo miro atónita.
-¿Aarón?
-Si, iba a darle fin a su vida.
-¿Pero por qué?
-Por que estoy harto que toque lo que es mío.
-¿Erik, por qué te molesta eso?

Le muestro a Erik mi mano izquierda señalando mi anillo de compromiso.
-Erik, yo estoy comprometida.
-Lo sé. Para mi maldita suerte.
-No entiendo por qué te molestas.
Cuando yo te quería , tú estabas con Christine. Siempre hablabas de ella. Y yo sufría cada día por ti.
Yo sí te quería, y sin importarme tu rostro.
-¡Si, lo sé era un estúpido!
Christine fue una mujer maravillosa, a pesar de que ella si me tenía miedo al principio, pero es la madre de mi hijo.
-Escuchame Érik, estoy comprometida y...
-Pero tu te entregaste a mi.
-Si, lo hice por qué te amaba...
-¿Y me sigues amando?

Le doy la espalda.
-Si...
-Entonces... ¿Por qué sigues con el?
-Por que una parte de mi todavía lo quiere.
-Yo te quiero.
La luz en mis ojos me cegaban ante tu amabilidad y tu belleza.

Erik se acerca a mi y rodea mi cintura.
-Deseo olvidar a Christine. Y comenzar una nueva vida contigo Elizabeth.

Me separo de Erik.
-No puedo.
-¿Por qué no?
-No lo sé, una parte de mi dice que no.

Erik se ha quitado la máscara y se coloca justo frente a mi.

-Mirame.

Le obedezco.

-¿Te doy miedo?
-No.

Erik se acerca y besa mis labios.
Acarició su rostro con delicadeza.

Se separa de mi.

-Quiero lo que es mío.

Erik me carga entre sus brazos y me lleva hasta la cama con la base en forma de cisne.

Al estar ahí, besa mi cuello y acaricia mis muslos.
Separa mis piernas y se coloca frente a mi.

-Tu eres mía, y yo soy tuyo.

Me quita la bata y él se retira la blusa.
Me besa en todas partes incluyendo mi pecho.
Me besa de nuevo en la boca, y sin separarse se retira los pantalones y los calzoncillos.
Y también aprovecha para retirar mi ropa interior.

Y sin separarse todavia, se introdujo en mi de manera suave y dulce.

Me rodea en sus brazos.
Continúa haciendome el amor.

Esa manera tan bella de hacérmelo y el demostrarme su amor hacia a mi, es simplemente bello.

Estamos aún acostados en la cama.
-Recuerdo cuando te entregaste a mi por primera vez. Fue algo especial para mi, el que lo hicieras.

Erik se levanta de la cama, coge algo de una caja y regresa de nuevo.

Sujeta mi mano izquierda y quita mi anillo de oro.
Y lo sustituye por otro. Dorado y con un rubie incrustado pequeño.

-Tu eres mía, no de el.
-Erik, no puedo.
Entiende estoy comprometida.
-Y yo te digo que no quiero que estés con el. Eres toda mía.
-Erik, fue algo hermoso lo que hicimos. Pero no puedo.

Me levanto de la cama y me vuelvo a poner toda la ropa.

-¿A dónde vas?
-Debo volver, ahora me devuelves mi anillo.
-No Elizabeth.
-Damelo por favor.
-¡No!

Erik se levanta y arroja el anillo al fondo del lago.
-¿Que te ocurre Erik?
-No vas a volver.

Erik de forma rápida cierra todo con llave. Cada una de las puertas.

-No te irás
-¿Que te pasa?
-No permitiré que te vallas
-Ahora harás lo mismo conmigo, igual que Christine.
-¡Si!
-Dejame ir Erik.
-¡Dije que no!

Erik se coloca sus pantalones y de nuevo se coloca frente a mi.
-Dejame Erik.
-¡Que no!
-¿Por qué no?
-Iras con él. Lo sé.
-Claro, entiende el es mi esposo.
-No por mucho.
Lo asesinare.
-¿Que? No, Erik. No vayas a cometer un desastre.
-Entonces déjalo...

Erik se arrodilla frente a mi.
Tomando mi mano y besándolo.

-Yo te amo y mucho.
No me dejes solo.
Quiero estar contigo, y formar una nueva vida.

Me coloco a la misma altura que Erik.
-Erik, debo volver
-No, por favor no... No me gusta estar solo.
-Perdona pero debo irme.

Al ponerme de pie, Erik lo hace igual y sostiene mi brazo.
-Erik, ya basta de pelear. Dejame.
-¡No!

-Bueno me quedo, pero no compartiré ningúna palabra contigo.

Me separo de el y me recuesto en la cama. Colocando encima la sábana de terciopelo de color carmesí.

Erik se acerca.
-¿Elizabeth?

No contesto.

-Elizabeth, por favor...

Le doy la espalda de nuevo.

Erik se acerca y me rodea entre sus brazos.
Me abraza tan fuerte.
-Me da igual si no quieres hablarme... Yo te amo mucho

Susurra en mi oido.

Ambos permanecemos así, hasta quedar dormidos....