Capítulo 17: Segundo ataque

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La pesadilla apenas comenzaba para todos en esos momentos...

- ¿Qué les pasó a los demás? – preguntó Jiang Cheng notando que apenas y tenía una túnica sencilla y el cabello suelto –

- Están inconscientes todavía – dijo el joven sin levantar la mirada y apretando los puños – Jingyi fue envenenado y Sizhui tiene heridas internas –

- Jin Ling.... – dijo el mayor mientras lo recuerdos golpeaban su mente poco a poco - ¿cómo nos sacaste de ese hechizo? –

- No fui yo – admitió tomando un respiro – fue él – agregó señalando una sombra en un rincón del recinto – no te vayas a molestar, él aprecia mucho al tío Wei, te salvó la vida... -

- ¿Wen Ning? – parpadeó incrédulo – pero ¿cómo? –

- No lo sé – dijo Jin Ling – solo sé que si no es por él, todos estarían muertos – dijo levantándose de su asiento – iré a ver a los demás, debes descansar –

- No, iré contigo – dijo Jiang Cheng mientras se sentaba en el borde de la cama y trataba de amarrarse el cabello –

- Lamento que estés en ese estado – dijo el menor notando la molestia de su tío al verse desarreglado – pero tuvimos que tratarlos rápido y quitarles todo la arena que les cayó encima –

- No pasa nada, - dijo poniéndose de pie y buscando un abrigo – quiero ver cómo están, descansaré luego si acaso – agregó mirando a Wen Ning algo pensativo – tú vendrás también, quiero saber cómo hiciste para sacarnos de la hipnosis –

El aludido solo asintió tímidamente y siguió su paso mientras salían...

En algún lugar...

- ¡Estate quieto, imbécil! – gritaba un hombre mientras forcejeaba con otro –

- ¡Déjame! – devolvió el otro – necesito regresar con ellos –

- No, no lo harás – repuso mientras le daba un puñetazo y lo hacía caer – al menos no con vida –

Aprovechando que había tumbado a su víctima, logró atar sus manos en su espalda y luego lo hizo arrodillarse...

- Ya deberías estar agotado – dijo el hombre mirándolo fríamente – antes debería preguntar cómo te has mantenido vivo todo este tiempo –

- ¿Sacas algún provecho haciendo esto? - preguntó Wei intentando acomodarse un poco – si es por el pasado...

- ¡No me importa eso!- replicó serio - ¿acaso, no te parezco familiar? – preguntó agarrando la barbilla de Wei con fuerza, obligando a mirarlo –

- No sé de qué hablas... - dijo moviendo con cierta brusquedad su cabeza para soltarse –

- ¿No sabes? – interrogó mientras sus ojos se inyectaban de sangre - ¡infeliz! – gritó y pateó el estómago de Wei - ¡Haré que lo recuerdes! – sentenció mientras repetía el golpe –

Aquel hombre no estuvo satisfecho solo con atarlo y darle algunos golpes, su ira lo llevó a repetir una secuencia de más golpes que hacían retorcer a Wei por el dolor... se desmayaba pero a los minutos recuperaba la consciencia al sentir como una ráfaga de agua le golpeaba inesperadamente el rostro...

- Si vas a matarme... hazlo de una vez – dijo Wei en medio de una nueva ronda de ataques –

- No quiero – dijo deteniendo su ataque y limpiando sus nudillos – quiero ver como lentamente se te va la vida –

Wei había perdido la cuenta de las veces en las que su cuerpo era cruelmente maltratado por esa persona... se sentía impotente al saber que no podía hacer nada debido a su estado débil...los golpes no cesaban, su estómago ya estaba resentido y podría jurar que todo su abdomen estaba morado e hinchado, vomitaba en ocasiones producto del mismo dolor que punzaba su cuerpo...sus brazos estaban pálidos e insensibles, ya que ahora no estaban en su espalda sino sobre su cabeza mientras sus rodillas seguían en el suelo...

CRISTAL CARMESÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora