Ocho hermanos, un primer amor ~HunHan~ // Especial de Navidad

Joyeux Noël!

—Vamos a tener una banda de rock —anunció Baek en el almuerzo. —Los 9.

Faltaban tres días para navidad, y el 26 se llevaría acabo un evento navideño en la escuela. Los jóvenes tocarían instrumentos, cantarían, actuarían. Muchas cosas para reunir dinero para los niños de la calle.

Kris y SuHo se miraron antes de mirar a sus hijos de nuevo —¿De rock? —preguntó Kris. Su tono de voz le dijo a Kyungsoo que no creía que ellos pudieran hacer una banda de rock.

—Así es —afirmó LuHan con una sonrisa.

Kris asintió con una sonrisita un poco burlona —No sé si...

Kyungsoo dejó caer su tenedor, aún con un pedazo de papa incrustado. Se puso de pie bruscamente moviendo la mesa. —Sé lo que tratas de hacer, papá. —dijo —Y no funcionará.

Kris lo miró con ternura. Sus padres nunca temían de Kyungsoo, sabían que eran un ángel por dentro. Muy muy dentro. —Cariño, no sé de qué...

Kyungsoo lo interrumpió de nuevo —No dejaremos que tomes nuestro sueño y lo escupas como basura. —Kyungsoo se subió a la silla y levantó el puño —Seremos más grandes que Queen, Kiss, Metallica. ¡y todos!

Baekhyun lanzó un gritito emocionado y empezó a cantar —Cause we are the champions, my... Brothers.

Los demás rieron y empezaron a golpear la mesa al ritmo de We will rock you. SuHo golpeó a Kris en el brazo —Te dije que no era buena idea ponerles Queen mientras dormían de bebés.

Kris rodó los ojos. SuHo había sido el que insistió en hacer eso, no él. Por supuesto no iba a decírselo, no quería otro golpe. —Está bien, está bien. —esperó hasta que todos se calmaron y Kyungsoo volvió a sentarse —Pueden hacer su banda de rock, está bien. Sólo no derrumben la casa con el sonido. —entonces frunció el ceño —Ustedes no tienen instrumentos.

Lay asintió rápidamente —Sí tenemos. La guitarra de Chanyeol y el triángulo de Xiumin.

SuHo sonrió enternecido —Esos no son instrumentos de rock, cariño. La guitarra de Chanyeol es acústica.

—No lo escuches, Lay. —dijo Kyungsoo —No sabe lo que dice.

Así que esa misma tarde estaban en la cochera, en su primer ensayo oficial. SeHun estaba con ellos.

De hecho, SeHun había sido el que consiguió guitarras eléctricas, un órgano y la batería era suya, pero se las había prestado.

Cuando tuvieron todo conectado, Kyungsoo fue el que eligió una de las guitarras eléctricas. La acarició suavemente mientras sonreía. Lay, inocentemente, le subió el volumen a la extraña máquina que vio. Cuando Kyungsoo tocó la primera nota con fuerza, el sonido fue tan fuerte que las ventanas temblaron como si hubiera un terremoto. Los chicos en la cochera se taparon las orejas y cayeron al piso, el fuerte sonido incluso pareció empujarlos.

Kris y SuHo bajaron corriendo. —¿Qué demonios les dije? —gritó Kris, aunque no estaba seguro de si lo hacía. Estaban tan sordos como sus hijos. —¿De dónde sacaron esas cosas?

SeHun levantó la mano desde el piso. SuHo corrió hacia sus pequeños y los ayudó a levantarse, incluido SeHun. —No se supone que deban ponerlo a ese volumen —dijo.

Todos miraron a Lay porque sabían que era el único despistado que siempre tocaba las cosas. Él se encogió de hombros —Lo siento. —dijo.

—Creo que me sangra la oreja —comentó Tao.

Todos miraron a su oreja y sí, sí sangraba. Nadie quería decir nada porque sabían lo llorón y asustadizo que era. Cuando tenía una herida se ponía a chillar para que no lo tocaran, solo porque tenía miedo del dolor. Sonrieron para disimular y negaron.