kagome

BANKOTSU

Lo primero que sintió al despertar fue un gran dolor de cabeza, seguido de un gran por todo el cuerpo. Cerro los ojos con fuerza y se sentó con una mueca de dolor. Aun con los ojos cerrados, toco un costado de su cabeza con una mano y cuando no sintió algo liquido y caliente en su mano, abrió los ojos con sorpresa y miro su mano

Tenía algo de sangre, pero era muy poca y no se sentía grave su herida. Al mirar a su alrededor se quedo sin aliento. Estaba en lo que parecía un calabozo, el piso era rasposo he irregular, las paredes eran de roca y en algunos lados parecían que habían sido rasguñadas por algún animal. En medio de la habitación habían unas cadenas para las manos o pies, y también algunas otras pegadas a las paredes

Asustada se paro de golpe y casi se cae de nuevo cuando su cabeza dio un pulso de dolor y cerro sus ojos con fuerza esperando que pasara el dolor. Volviendo a abrir sus ojos comenzó a caminar por todo el calabozo con precaución intentando encontrar algo que pudiera ayudarla a salir de ese lugar. Movió las cadenas y nada, regreso a la entrada donde estaba una puerta de hierro. En el momento en que intento tocar la sintió un choque de energía que la mando a volar a una de las paredes del calabozo chocando su cabeza contra ella y desmayándose en ese momento

La segunda vez que despertó tenía un balde con agua y lo que parecían ser unos trapos. Se quedo sentada contra una de las paredes del calabozo por lo que parecieron horas. Recordaba estar con sango cuando ocurrió el ataque

Habían estado siguiendo a un youkai con un fragmento de shikon por al menos una hora y cuando por fin pudieron derrotarlo, una docena de youkai llegaron a ellos y poco a poco comenzaron a separarlos, lo ultimo que vio fue a miroku ser golpeado en un costado y cuando fue a ayudarlo sintió un gran golpe en su cabeza y después vio todo negro

Si ella estaba atrapada en uno de los calabozos ¿también lo estarían los demás? Esperaba que no. Mirando a la puerta frunció el ceño, ¿como saldría? Parecía que tenia una especie de sello por las letras y dibujos pintados en ella. En el momento en que se paro para ir a verlos mejor la puerta se abrió de golpe y arrojaron algo dentro de su celda y la volvieron a cerrar

Un poco asustada miro a la esquina de su celda, y solo vio un gran bulto tirado en la oscuridad. Sea lo que sea eso era muy grande. Miro entre la puerta y el bulto gigante, pensando en que hacer, hasta que empezó a escuchar quejidos de dolor. Sin pensarlo corrió hasta que llego al bulto. Al estar cerca de el, por fin lo distinguió como una persona, pero no podía verla bien pues esta le estaba dando la espalda y el calabozo estaba muy oscuro

Con cuidado coloco una mano en su hombro y le dio la vuelta para que quedara boca arriba, y al ver su rostro intento alejarse, pero se detuvo cuando vio su rostro lleno de dolor. Tenía los ojos fuertemente cerrados, su cara estaba llenada de sudor y sangre. También estaba jadeando un poco

Se quedó viéndolo por un momento, viendo que hacer, hasta que vio como volvió a quejarse de dolor, no pudo soportarlo y agarro el cubo de agua y los trapos que le habían dejado y comenzó a limpiar sus heridas, eh intento bajar la fiebre. Después de lo que parecieron dos o tres horas por fin había terminado. Se sentó con expresión cansada y lo miro ¿Cómo había llegado a este lugar? Esperaba que le respondiera sus preguntas cuando despertara 

Se quedo a su lado cuidandolo en lo que despertaba, con la espalda apoyada en la pared del calabozo. Estaba contando todas las grietas que había en las paredes para entretenerse, cuando escucho a bankotsu comenzar a moverse lentamente intentando sentarse. Ella lo ayudo poniendo una mano en su espalda y ayudándolo a sentarse

Una vez que estuvo sentado, no retiro la mano de su espalda, temía que si se la quitaba se fuera de espaldas y se golpearía la cabeza. Un pensamiento tonto, pero aun así podía pasar. Vio con algo de preocupación cuando él hizo una mueca de dolor y coloco su mano en su abdomen, luego miro alrededor con algo de sorpresa hasta que giro su mirada a ella y solo levanto una ceja cuando la vio a los ojos

"Tu, ¿no eres la moza de ese hanyou?"

Inmediatamente lo miro con una expresión molesta y se alejo un poco de él

"Mi nombre es kagome"

El solo bufo algo divertido, e intento pararse con algo de dificultad. Kagome incluso se acerco un poco por si él llegaba a caerse. Cuando el se estabilizó, camino por el calabozo analizándolo, aun con una mano en su abdomen. Kagome seguía en el mismo lugar sentada viendo lo caminar alrededor, hasta que llego a la puerta. Inmediatamente se paro

"¡No!, cuidado no-"

Iba advertirle que no la tocara pero fue demasiado tarde. En cuanto la puerta lo lanzo contra la pared casi choca con kagome, quien logró hacerse aun lado. Cuando lo vio escupir sangre inmediatamente fue a su lado y lo reviso

"Te iba a decir que no la tocaras. A mi me paso lo mismo" giro su vista a la puerta "debe de tener algún sello o hechizo que no deja que la toquemos"

El lanzo un gruñidos molesto, y miro a la mujer. Tenia unos golpes y rasguños en algunos lugares, pero aparte de eso se veía bien. No podía decir lo mismo si mismo. Le dolía el cuerpo, tenia varios cortes por todo el cuerpo, incluso sentía uno especialmente grande en su abdomen. Pero al revisarse noto que había un tipo de vendaje en el. Curioso miro alrededor intentando ver que es lo que uso, pero no vio nada hasta que fijo su vista en ella. Le faltaba una manga y parte de su pantalón. Parecía que uso su ropa para hacer su vendaje. Suspirando dejo caer su peso contra la pared

"¿Estas bien?, fue un gran golpe"

Le dio una sonrisa arrogante

"Eh tenido peores"

No supo que expresión poner cuando ella lo miro con expresión preocupada ante sus palabras. Así que prefirió mirar a otro lado, esa mujer era muy suave