CAPITULO TREINTA Y SIETE
- ¡Claro que no! - dijo la rubia.
- Vamos Ashley, te conozco. ¿Por qué te piensas que soy tu mejor amiga? - dijo utilizando unas palabras parecidas a las de su amiga. Ash entrecerró los ojos.
- Bueno si, ¿y que? Muero de amor por Zayn Malik, pero él solo ama a mi bebe. No creo que quiera algo conmigo - _______ se aguantó una sonrisa, bajando la mirada de la de su amiga. Ashley la miró bien - ¿Hay algo que sepas que yo no?
- No, para nada - dijo ella.
- _______ - dijo su nombre en forma de advertencia.
La puerta de la casa se abrió y allí entraron dos hombre sudados y a las risas. Ambas se giraron a verlos.
- ¿Los vistes? - dijo Zayn divertido - ¡Los destrozamos!
- Querido Malik, eso está demás decirlo - dijo Justin. Se acercaron a la mesa.
- ¿Cómo están? - preguntó Zayn.
- ¡Ni se les ocurra acercarse a mí, con ese olor! - habló Ash con la nariz tapada.
- Ni a mi - dijo _______ mientras se tapaba la nariz también.
- ¿Qué tiene? - dijo Justin y se acercó a _______ para abrazarla - Esto es natural.
- ¡No me toques! - chilló la morena.
- Él tiene razón - dijo Zayn y se acercó a Ashley.
La rubia lo apuntó con un dedo en forma de amenaza.
- Un paso más Malik, y te arrepentirás - le advirtió.
- Solo quiero abrazarte Platinada - dijo él con una sonrisa.
- No Zayn - dijo ella retrocediendo lentamente.
- Si Ash - dijo divertido. La tomó de la cintura y la acercó a él, para abrazarla.
Ashley frunció el ceño y trato de no desmayarse de la impresión, y de la sorpresa.
_______ miró a Justin, y este le hizo un gesto para que salieran de allí. La morena asintió y salieron dejándolos solos.
Luego de varios segundos Zayn soltó a Ashley, que aun no se sacaba la mano de la nariz.
- ¿Por qué me odias? - le preguntó ella.
- No, yo no te odio - dijo él. Ash sintió que sus mejillas tomaban color - Yo te amo.
Sus ojos se abrieron bien y lo miró como si acabara de decir una locura. Despacio se quitó la mano de la nariz.
- ¿Qué? - preguntó atónita.
- Que te amo platinada, eso pasa - dijo él.
Ella no daba crédito a lo que sus oídos escucharon. De seguro estaba soñando y en cualquier momento iba a despertar.
Con cuidado Zayn se acercó a ella y acomodó una mecha de su cabello detrás de su oreja. Recorrió su rostro con la mirada y luego se inclinó sobre ella para rozar sus labios.
Los ojos de Ashley se cerraron al instante ante el suave contacto de su boca, y pensó que iba a desmayarse.
- Zayn - susurró.
- Déjame amarte - musitó él y terminó de besarla.
- Déjame amarte - musitó él y terminó de besarla.
Colocó sus brazos alrededor de su cintura y la apretó más contra él, sintiendo el vuelto de su vientre. Ese vientre que llegaba un hijo, que aunque no tuviera su sangre, ya lo sentía suyo.