Capítulo 3

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Habían pasado ya varias semanas desde que envié esa carta y mis padres habían contestado y enviado suficiente dinero. Percival y yo nos llevábamos muy bien y teníamos confianza para hablar y demás. Pensaba que ya lo sabía todo de él hasta la noche pasada, cuando me confió su mayor secreto.

Flashback:

Estaba leyendo sentada en mi cama cuando tocaron la puerta.

- Pasa- dije y entró Percival en la habitación- ¿qué pasa?

- Tenemos que hablar- dijo él, serio

- Si, claro- dije asintiendo

Se sento en el borde de la cama y me miró.

- Puede que al decirte esto cambies la manera de pensar en mí- comenzó él- como ya sabrás, una mago tenebroso llamado Gellert Grindelwald está causando estragos por todo el mundo mágico.

- Si... se quien es, pero ¿por qué me cuentas esto?- dije confundida

- Yo soy Gellert Grindelwald- cuando dijo esto me llevé una mano a la boca. No era capaz de formular ni una sola palabra- no quiero que nada cambie entre nosotros.

- ¿Qué hago aquí?- pregunté al mismo tiempo levantándome de la cama- No me has ayudado a salir del circus así por que si, ¿verdad?¿qué quieres de mí?

- ¿De ti? nada, ¿para ti? todo- seguro que eso se lo ha dicho a muchas personas ya.

- No, no me lo creo. Siempre quieren algo de mí- siempre, pensé- dime la verdad... ya no se ni como llamarte.

- Llámame Gellert, Grindelwald, como tu quieras pero en público Percival- dijo antes de continuar- te digo la verdad, pero ya que estás del otro lado no querrás escuchar mis planes...

Y antes de que se fuera por la puerta le dije- espera, quizás si lo escucho...- Él volvió y se sentó en uno de los sillones.

- Creo que el mundo mágico no debería estar en las sombras, con miedo de que los nomags nos descubran. Un mundo en el que los magos y brujas gobernemos. Y con tu ayuda puedo conseguirlo. Ese poder que tu crees que solo sirve para esconderlo es la clave. Y si tu decides estar a mi lado, en el lado de los ganadores, solo faltaría tener también al obscurus. Eso es lo que he estado haciendo todos estos días que llegaba tarde. Credence, el chico que estaba conmigo es la clave, me está ayudando a encontrar a ese niño, al obscurus. Su madre le maltrata, ella es una de las que nos quieren muertos, a todos los magos. Te dejaré para pensarlo- y sin más que añadir se fue de la habitación.

Fin del Flashback

Fui a dar un paseo para despejarme un poco la mente cuando pasé por una casa destruida. Me detuve ante la puerta. Esa casa no estaba así cuando pasé por aquí los últimos días. Ahora que lo pienso, en este sitio siempre había muchos niños repartiendo papeles. Sin pensarlo dos veces entré allí. Dentro estaba todo destruido, muchos papeles esparcidos por el suelo, muebles rotos y lámparas caídas. Y de repente se escucho algo en una habitación.

- Ayuda, por favor- fui hacia donde se había escuchado la voz.

Al entrar pude ver al chico llamado Credence sentado en un rincón, llorando.

- Hey, ¿estás bien?- él me miró y negó un poco con la cabeza- ¿qué ha pasado?

- El obscurus... ella a muerto...- decía él casi sin ningún sentido.-

- ¿El obscurus ha estado aquí? ¿quién a muerto?- le pregunté

- Mi madre a muerto, yo la he matado- entonces lo entendí todo de golpe, él era el obscurus.

- No pasa nada Credence, ella era mala- le dije intentando tranquilizarlo- todo va a estar bien...

Otra persona entró en la casa.

- ¿Credence?- era la voz de Percival.

- No le va a gustar si estoy aquí- le susurré al chico-

Y sin más me escondí detrás de un mueble caído para escuchar a Pecival.

Él llegó un momento después y se agachó.

- Credence- dijo mirando alrededor- no me dijiste que tenías una hermana pequeña.

El chico le decía- ayuda- pero Percival le ignoraba.

- Llévame hasta ella- pero Credence solo decía- ayúdame- Percival se hartó y le pegó un puñetazo, a lo que yo me sorprendí.

Credence se levantó y dijo- venga conmigo- Ellos salieron de la casa y yo les seguí lo más discreta posible hasta que llegaron a un piso. Entraron y yo hice lo mismo.

- ¿estás seguro de que está aquí?- preguntó Percival

- la adoptaron aquí, tenía siete hermanos y cuando los echa de menos viene aquí- respondió Credence- ¿qué pasará conmigo cuando ya la tengas?

- tu no eres un mago Credence, nada más verte lo supe- Percival la estaba liando pero bien- tienes familiares magos pero tu no. Eres un squib.

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Un estruendo sonó por todo el piso, un segundo estruendo. Corrí hacia donde estaba Percival hablando con la niña. Credence le mataría, le faltaba una sola pared para llegar hasta él. Al romperse la última pared solo me dio tiempo a gritarle a Percival.

- Gellert!!- él se giró hacia mío e iba a preguntar algo cuando Credence ya transformado fue hacia él arrasando todo lo que tenía por delante.

Blue Fire. ( Grindelwald )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora