¿Por qué siempre son chicos malos?

Eres mío

Nota del traductor: Éste es el PENÚLTIMO capítulo. Espero que os esté gustado esta historia, ya casi hemos acabado.  Hay una secuela, un oneshot PWP situado varios años después. Tengo pensado subirlo... si os interesa  :)

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La mañana siguiente fue diferente. Ahora que todo estaba dicho, el pecho de Taemin se sentía más ligero. Minho se lo tomó mejor de lo que había pensado, o simplemente no mostró ninguna molestia cuando estaba con Taemin. No lo miró de manera lamentable y no lo trató de manera diferente.

Ese fue el momento en que Taemin se dio cuenta de la suerte que tenía de tener a Minho a su lado. El hombre más alto no lo juzgó, estaba allí cuando lo necesitaba y lo tomó como era, con todas las historias de su pasado, lo amaba tal como era.

Incluso amaba sus tatuajes, lo cual no era algo común en una sociedad que enseña a los niños que las personas que tienen tatuajes son algo malo y que todos son delincuentes.

Aproximadamente una semana después, se fijó la fecha de la reunión con los padres de Minho. Taemin estaba nervioso. No podía esperar a la reunión pero, por otro lado, tenía mucho miedo. Sabía que Minho tenía una muy buena relación con sus padres. Él no quería ser la razón para que esa relación se tensara.

En la parte posterior de su cabeza había estado orando para que la reunión se desarrollara sin problemas. Era la única manera de tranquilizarse.

Este fue uno de los primeros momentos en los que se había arrepentido de hacerse los tatuajes. Habría sido mucho más fácil si solo se viera como una persona normal. Un hombre con un trabajo estable y un futuro.

No había manera de que los dos pudieran casarse o adoptar hijos en Corea, pero al menos podrían haber tenido la oportunidad si él hubiera parecido un buen compañero para su hijo.

En estos días Taemin había pensado mucho en dejar Corea. Irse a un lugar donde la gente no temblaba de miedo cuando entraba en el metro. Un lugar donde Minho y él podrían casarse, establecerse, comprar una casa y quién sabe, tal vez tener hijos.

Pero, por otro lado, no quería abandonar este país. Tendría que aprender otro idioma y adaptarse a un país completamente nuevo. Así que estos pensamientos siempre desaparecían poco después de que aparecieran por primera vez.

Taemin se estaba vistiendo en casa, probándose varios conjuntos diferentes, revisándose en el espejo para elegir el que parecía más "normal". Terminó con unos pantalones largos negros, los únicos sin agujeros ni roturas, y una camisa de rayas que se abotonó hasta arriba. También se quitó el gran anillo que tenía en la nariz y lo sustituyó por un pequeño punto.

El piercing en su labio era demasiado nuevo para sacarlo, así que lo dejó donde estaba.

Pronto se quedó solo con el piercing en el labio, el punto en la nariz y un pequeño y discreto anillo en cada lóbulo de las orejas.

Se miró de nuevo al espejo. Parecía un desconocido. Sin sus piercings y maquillaje se sentía desnudo. Esto es lo mejor que puedo estar, se dijo mientras inspeccionaba su reflejo.

Taemin estaba mirando en el espejo al Taemin que había sido hasta hace unos años. La mayoría de sus tatuajes estaban cubiertos por la ropa. Todos ellos, excepto unos pocos en su cuello y los de sus manos.