Sábado 2 de Marzo de 2013
Sábado, si! El día más esperado de la semana después del Viernes, claro. Mis vacaciones de verano iban muy bien a decir verdad, eran divertidas. Pero este fin de semana había recaído en depresión recordando viejos momentos que vivi con mi ex-novio.
Jake nada. Él estaba con Courtney, yo estaba en lo cierto me había dejado por otra. Al parecer la tal 'Court' como él la llamo, no me conocía. Jake no le había hablado jamás de mi, ni de la existencia de una novia, sino no se explica el hecho de que no me haya reconocido ese día en Noviembre. En cuanto a mi, nada. No salía de mi casa. Es que no es nada fácil que tu novio te deje y a los pocos días esté de la mano con otra mujersuela. No quería salir y no iba a hacerlo. Nada ni nadie, ni siquiera mi madre me obligaría. Creo que pasaría mi fin de semana ordenando. Los pañuelos descartables esparcidos por el suelo, el bote de helado de chocolate con dulce de leche estaba semi vacío y el resto derretido, el acolchado tenía derramado líquido de color naranja y los libros tirados por doquier eran realmente deplorables. Mi habitación era un caos. Así que me levante y comencé.
-¡Abreme! -Gritaron del otro lado de la puerta-
-¡No, déjame! -Grité al igual que ella. Trinity-
-¡Que me abras estúpida! No puedes encerrarte de por vida
-Si puedo, si quiero lo hago. De hecho lo estoy haciendo -Sonreí victoriosa y le saqué la lengua a la puerta como si pudiera verme. Infantil-
-Tienes tres opciones o me abres, o tiro la puerta abajo, o me abres -Espetó Trin con un tono imperativo-
-Te he dicho que me dejes -Grité enfurecida, detesto que me den órdenes ¿La gente no entiende cuando es no?-
Al parecer funcionó, porque Trinity no volvió a insistir, y se escucharon unos pasos bajando las escaleras. Tome los pañuelos llenos de mis germenes y lágrimas y los deseche en el bote de basura. Se escuchaba un ruido de alambres en la cerradura de la puerta, no, no lo esta haciendo, no otra vez.
-¡Voilà! -Exclamó Trinity cual Francés (se pronuncia wualá)-
-Eres...
-Si, si, si -Me interrumpió caminando por toda la habitación- lo que digas.
- Tu eres...
-¿Una perra? -Preguntó dejándome con las palabras en la punta de la lengua por segunda vez- Gracias cariño, suelen decírmelo y creeme que no me ofende.
-Te odio, eres de lo peor. ¿Es qué no sabes aceptar un no por respuesta? -Negó con la cabeza- Te he dicho que quiero estar sola, que no quiero salir que nadie va a obligarme. Ni siquiera mi madre ha podido y tu tampoco podrás -La miré con furia-
- Bien, ¿Terminaste? -Dijo pacífica sin importar lo que le había dicho-
- Si -asentí ya mas calmada-
- Si quieres golpear solo hazo, si quieres gritar hazlo, incluso si quieres ir a buscar al maldito Jake a su puta casa para golpearlo hazlo, pero no guardes dolor dentro tuyo, no te encierres en una burbuja Brook, por favor. Soy tu amiga -Me suplicó con los ojos-
- Yo, lo siento ¿De acuerdo? Lo siento. Pero no es fácil Trin
-Lo sé, por eso estoy aquí -me sonrió y la abracé-
Trinity y yo somos muy parecidas, tanto física como sentimentalmente. Ella a veces podía entenderme de verdad, era muy comprensiva y una gran consejera aunque no lo aparente. Incluso a veces me entendía más que Emily, yesoqueEnes "laconsejera" del grupo. Hablamos durante toda la tarde hasta que se hicieron las 19:30 P.M.
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No te enamores del amor.
Teen Fiction¿Quién no se ha equivocado y por error ha herido un corazón? Brooklyn Dion dejo de creer en las cosas relacionadas al amor desde que su ex novio le rompió el corazón. Le parecía idiota enamorarse otra vez. Se volvió fría y cerrada, la Brooklyn Dion...