Capítulo 5 Phoenix

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"Cuando miramos al cielo, estamos viendo hacia el pasado, hacia el nacimiento y la muerte de estrellas."

Llegué al piso donde se encuentra mi salón, di algunos pasos cuando me encontré con él, con la persona que tampoco quería ver, Todoroki. Él estaba sentado en la orilla de la ventana, tenía un libro en sus manos. Observé su perfil por unos segundos, tenía unas facciones muy pronunciadas, puse más atención a su marca en su ojo, parecía una quemadura, pero no me he atrevido a preguntarle. Este se veía relajado, teniendo toda su atención a su libro, me mantuve al margen y caminé sin hacer ruido, quería pasar desapercibida. Lo logré, pero al dejarlo atrás sentí una mirada. Llegue a la puerta de mi salón, Todoroki se encontraba algo lejos pero aún se podía ver. Miré de reojo y este miraba a mi dirección, abrí la puerta y lo perdí en mi campo de visón.

-¡Que tenemos aquí! ¡Matsumoto Akira llegando temprano, señores! - Di un respingo ante la voz de Fukui Kai, todos gritaron y festejaron porque no llegue tarde como era mi costumbre. -¡Oh! Esperen ¿No creen que Matsumoto se ve linda hoy?- Todas las miradas se posaron en mí y se escuchaban los murmullos.

Por primera vez no puse los ojos en blanco, sino que me sentí bien, hasta me sonrojé por las palabras.

-Gracias a todos.- Todos abrieron la boca, era difícil que agradeciera o hablara con ellos de forma amable. -A partir de ahora seré una nueva Matsumoto Akira.- Todos aplaudieron y gritaron, solo reí apenada por lo que acaba de decir. Pero es lo que sentía, debía de cambiar, dejar un poco de lado mi amargura y mi tristeza por el bien de mi hermano y por supuesto el mío. No quería afectar a los demás.

Camine hasta mi banca deje mis cosas y sentí unos brazos rodeándome.

-¡Akira! Te ves hermosa hoy, me gusta la nueva tú, obviamente me gusta en todas tus presentaciones, pero me gusta más esta, más alegre y menos triste.- Me giré para ver a una Huraka sonriente con un brillo de ojos. Ella era hermosa, cada chico de la escuela quería salir con ella, pero ella no aceptaba, ella tenía un Crush o más bien un objetivo, Kaminari Denki. Un chico de la clase 12A, aunque era torpe y a veces parecía estar en otro mundo, era alguien inteligente y gracioso. Pero este no se ha fijado en Huraka.

-Necesitaba un cambio. Sabes, creo que a veces mi personalidad puede afectar a los demás. Así que mírame ahora. - una risilla salió de los labios de ella, volví abrazar para luego separase y observa el portafolio.

-¡Oh! ¿Es tu proyecto? Se que tu proyecto será el mejor, en tu cabeza hay muchas ideas, al igual que imaginación. - Dijo haciendo alemanes en el aire con sus brazos, casi con todo el cuerpo, hacia muecas, me pareció gracioso y empecé a reír, ella se dio cuenta y me siguió. Nuestras risas pararon a ver entrar el profesor.

-Como saben hoy es entregar de proyectos, pero no les mencione algo. Van a competir con otra clase. -Todos empezaron hablar, susurra cosas, solo escuche como alguien gritar "Ojalá no sea la clase 12A" y por primera vez estaba de acuerdo, no quería ver algunas personas de ahí y además es la mejor clase.

-Por su mala suerte, se enfrentará a la clase 12A, sé que son la mejor clase, pero confió en ustedes. Además, tenemos a la mejor para realizar grandes ideas, Matsumoto. -Todos gritaron en celebración, sabía que, aunque no ponía mi máximo esfuerzo, siempre tenía ideas, para cualquier cosa y situación.

-Tiene 20 minutos para prepararse, iremos a su salón, fuerza chicos.- Fueron las últimas palabras del profesor después de salir del salón. Puse mis brazos arriba de la mesa, puse un brazo y luego el otro formando un tipo de almohada, luego dejé caer mi cabeza a mis brazos. No podía creer que vamos a competir con esa clase, esto debe ser un sueño. Me pellizqué un parte de mi brazo, dolió, pero me di cuenta de que no era un sueño.

Levante la mirada y todos estaban estudiando y repasando su proyecto. Yo no lo hice, este proyecto me encanto y podía explicarlo unos 100 veces y no lo olvidaría.

...

Pasaron los 20 minutos, todo la clase caminaba hacia la clase 12A, cada paso que daba me hacía sentir más y más nerviosa. Agarre del hombro a Huraka, que estaba nerviosa, ella agarro mi mano y me sonrió, cerré mis ojos por unos segundos. "Se fuerte pequeña Akira, todo saldrá bien, se fuerte." Una voz de un niño, abrí los ojos y vi la gran puerta de aquella clase, recordé esas palabras y las tomé en cuenta. ~Al pisar dentro de esa clase, olvidarás todo, haz como si nada hubiera pasado~ Me dije a mi misma. Todo el grupo entro, en la mesa de cada estudiante había una silla extra, fruncí el ceño, no sabía lo que pasaba.

-Clase 12C, estarán compartiendo mesa con los estudiantes de la clase 12A, ya están acomodados, así que diré con quién se van a sentar. -Todos los giramos sorprendidos y nerviosos. Los nervios me comían, más bien me tragaban. Respire profundo y me tranquilice.

Empezaron a nombrar, hasta que llegó mi turno, pedía casi de rodilla que no me tocara él.

-Matsumoto Akira con Midoriya Izuku.-Mi clase empezó a hablar más bien gritar. "Matsumoto es linda" "Genio Matusumoto".

Sabía que esas palabras eran para alegrarme y darme apoyo, ya que era la esperanza de la clase. Camine hasta donde estaba Midoriya sentado, pase a lado de Bakugo, este solo me miró cuando entre, pero no cuando pase a lado. Cuando me acercaba a Midoriya, vi su rostro, se veía sonriente y alegre como siempre, en sus mejillas empezó aparecer un tono rosado. Me reí, él ha sido tímido con las chicas y tener cerca de a una lo ponía más nervioso.

-Hola Izuku, al parecer seré tu compañera de clase hoy. -mi tono de voz salió alegre hasta yo me sorprendí. Este parecía querer decir algo, pero no salía, me senté a su lado. Este rompió el silencio que se había formado.

-¡Akira! Me alegro de que sea mi compañera hoy. No la pasaremos genial hoy. -Por fin hablo el peli verde, me reí porque este aún tartamudeaba. Pero para muchos no le gustaba la idea que me sentara con Midoriya, giré un poco de cabeza, para luego encontrarme con la mirada de Bakugo, al principio tenía la mirada de odio, furia, como si quisiera matar algo o más bien a alguien, pero al encontrarme con su mirada este se tranquilizó y ahora su mirada era cálida, dulce, era como cuando estábamos juntos, siempre me miraba así. Sentí como mi corazón se aceleraba. Pero eso bastó para darme cuenta de que aún lo quería.

Un mano me toco el hombro, este me saco de mi trance, me giré para ver quien era. Era Todoroki, este me miraba.

-Suerte Matsumoto.-Su voz se escuchaba tranquila, pero con esa pizca de frialdad, asentí con la cabeza y este se alejó. Volví a mirar a Bakugo su mirada cambio, cambio a una de tristeza.

Una carta de estrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora