Capítulo 6 Fornax

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"Las constelaciones son los sueños pintados en el lienzo del cielo nocturno."

Me sentía algo rara, tenía una sensación que no podía describir con palabras exactamente. Días atrás estaba tumbada en la cama llorando por la idiotez de Bakugo y en este momento él estaba a mi lado, acompañándome a Okayama. El viaje puede que sea un poco largo, pero necesito ir para buscar a esa persona. Se que mi hermano me va a matar, pero quiero conocer y saber de ella.

-Entonces... ¿piensas ir sabiendo del todo el peligro que puedes correr? ¿Estas idiota o qué?- Se paro en seco y se puso delante mío. Le platique lo que pasó en la madrugada, la plática de mi hermano y sus sentimientos.

Bakugo me cuida, hasta el punto de sacudirme toda para que reaccione que es peligroso y tonto al mismo tiempo. Pero estaba vez no me detendría.

-No estoy idiota, necesito ir. Quiero saber quién es ella y preguntarle algunas cosas. -Dije con firmeza, sé que ir sería peligroso ya que posiblemente mi padre esté ahí, pero sería lo suficiente cuidadosa. -No me acompañes, no te estoy obligando. Puedo ir sola.- No quería empezar una pelea por estar lo suficiente idiota para poner mi vida en peligro, pero me resolverá muchas dudas. Camine a un lado de Bakugo, sabía que no me detendría y me dejara ir sola. Pero estaba equivocada, me agarró del brazo, giré mi cabeza para verlo.

-Te acompañaré, no quiero perder nuevamente. -Este tenía los ojos cerrados, en un segundo sus facciones se hicieron más pronunciados. -También lo haré porque eres lo suficiente tonta para perderte, sabes que no eres la mejor con las direcciones. - Tenía razón, soy mala para las direcciones, pero soy lo suficiente sociable para preguntar por tal lugar y así guiarme. El abrió su ojos y me miró, estos se veían más grandes de lo normal pero no le tome mucha importancia.

-Antes de ir a la estación, hay que ir al centro comercial, debo de comprar algo.- Estuve pensando entre las presentaciones de los proyectos de los demás, acerca de esto, no me deben de reconocer. La mejor opción era usar peluca y otra ropa, pero sería tardado ir a mi casa, además posiblemente estaría mi hermano ahí y mi plan se echaría a perder.

-Tsk... Vamos.- Rodó los ojos, típico de él. Se puso a mi lado, hizo la parada a un taxi y nos dirigimos al centro comercial.

...

Cuando llegamos, él pensaba que no sabía a qué tienda debíamos de ir; pero hace un tiempo vine con Huraka a comprar pelucas para un rara sesión de fotos. Lo tome de la mano y lo jale, lo tome por sorpresa, pero sabía que será la mejor opción y no estar esperando que caminara por sí solo. Caminar a lado de unas cuantas tiendas hasta que llegue a la indicada, colores brillantes, disfraces, anteojos y cualquier cosas para fiestas de disfraces estaban en esta tienda, me dirigí hacia sección de pelucas, observe unas cuantas hasta que una me llamó la atención. Era una peluca de color azul combinado con morado por una mitad y la otra era rosado claro, tenía flequillo y era algo larga.

Le señale la peluca a Bakugo, la vio por unos segundos. Parecía que analizaba algo.

-¿Estas segura? Eso se parece al idiota mitad-mitad que va en mi clase. Creo que lo conoces ¿no?.- Sonó celoso, sabía que él había visto cuando Todoroki me deseó suerte.

-mmmj-asentí - Es hijo del socio de mi hermano, ayer fueron a cenar por eso lo conozco.- No le mencioné que lo ayudé a buscar su salón, no quería que empezara con sus celos.

-Si te gusta, cómprala, yo solo comprare una gorra y unos lentes oscuros. ¿Tu solo compraras eso?.- Siguió mirando la peluca, negué a su pregunta. Quería comprar unos pupilentes de color, aunque no tuviera aumento, tengo mis lentes con aumento así que no me preocupo.

...

Salimos de la tienda con nuestras comprar y con la peluca ya la puesta. Nos dirigimos a la estación del tren para ir.

Una carta de estrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora