ʀᴇᴄʜᴀᴢᴏ •sᴛɪʟᴇs sᴛɪʟɪɴsᴋɪ•

Primera Cita "parte 2"

ANTERIORMENTE EN RECHAZO

Vamos − dijo dallas tirando de su brazo con delicadeza.

Stiles podría decir que ya no se sentía tan extraño ante el contacto ajeno, incluso estaba empezando acostumbrarse a sentir el frío en su piel.

Stiles le siguió muy de cerca desprendiendo un aire de felicidad, no podía negarlo. Estaba ansioso por ver lo que su cita había preparado para él.

(...)

− ¿Crees que tu hijo le moleste que estemos juntos?. − preguntó con temor.

Noah tomó el teléfono entre su manos con impaciencia mientras caminaba en círculo por la habitación.

− Pronto haré una cena para presentarte y contarle sobre nosotros. − La persona de la otra línea soltó un largo suspiro de alivio. − Pero ahora tengo otros problemas que resolver con él.

− ¿Está todo bien?.

Noah se rasco la nuca.

− No lo sé. − Dijo.

− No dejes que ese niño te cause un infarto, puedes solucionarlo, solo es un chiquillo de 16 años. .

−Tienes razón.

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AHORA.

Stiles camino lentamente por la sala de estar mirando el hermoso departamento decorado de un ambiente romántico, había poca luz alumbrando pero las velas aromáticas lo recompensan muy bien, jamás había olido tantos olores exquisitos al mismo tiempo y relajante en una sola noche. Inhalo profundamente deseando capturar todos los aromas a la vez, se sintió muy cómodo con el comienzo de esa noche.

Dallas le había informado que tomara asiento en unos de los sofás mientras terminaba de hacer la cena.

El castaño asintió, caminó por los alrededores sin perder ningún de los bonitos adornos en las paredes. La última vez que había estado ahí no tuvo tiempo de fijarse en esas cosas como ahora. Claro esa vez no le interesaba lo suficiente como para repetir su visita.

Tomó asiento en el sofá más grande forrado de cuero negro, puso unos de sus brazos en el reposador y recargo su cabeza del cabecero.

Dallas a pereció frente a él con una copa de vino, se sentó a su lado y le sonrió.

– Toma − le tendió la copa y stiles con timidez la aceptó. Llevándola a sus labios, dejando deslizar el primer sorbo por su garganta. Sonrió de satisfacción.

– Mm... Esta rico − dijo. Pasó la lengua por sus labios tomando el resto de vino.

Dallas no pudo evitar mirarlos fijamente mientras furtivamente se acercaba al chico lo más posible, quedando frente al castaño.

Stiles se mantuvo quieto con la copa entre sus piernas, sujetada por sus delgados dedos, que presionan los bordes lentamente.

Estaba nervioso era muy obvio, no sabía qué hacer en esta situación, una parte de él le gritaba que se alejará, pero otra le alentaba acercarse más al vampiro. Sabía cuál debía escuchar pero sencillamente hizo caso omiso, está vez quería arriesgarse. Optó por dejar que fuera dallas quien tomará la iniciativa de lo que sea que estaba inminente a su suceder.