Casa En La Playa. Segunda Parte.

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ANTERIORMENTE EN
RECHAZO.

- ¡Cora! - gritó stiles a la chica y está salto asustada. - Niña por Dios te estoy llamando.

- Lo siento - Se disculpo con un imperceptible sonrojo en las mejillas. Enfoco sus ojos en él y noto las manos de dallas abrazarlo por la cintura mientras su cabeza reposaba en el hombro del chico, era un gesto muy romántico y la vez posesivo. - ¿Qué decías?.

Stiles suspiró.

- Faltan algunas bebida para la comida, lamentablemente olvide comprarlas ya que me distraje con alguien - informo mientras miraba intuitivamente al vampiro y este sonreía inocentemente. - Como decía. Dallas irá por las bebidas y me preguntaba si quieres ir con él.

- Yo-yo..

- Claro que viene conmigo - hablo el vampiro robándole la palabra a la chica. Esta se sonrojo mientras asentía. Era tan guapo que intimidaba. - Vamos Cora. - tomó las llaves del auto de las manos de su novio y se despidió con un beso en los labios. Luego tomó a la chica por el brazo para empezar a caminar.

Cora pensó que sería un viaje muy incómodo.

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AHORA.

Cora miraba por la ventanilla los árboles que pasaban rápidamente ante sus ojos, el viento soplando con fuerza las hojas y una neblina cubriendo la atmósfera, desde que subió al auto junto al vampiro se concentró en cualquier otra cosa que la distrajera del vampiro a su lado, que se mantenía en silencio con las manos al volante diez y dos, mirando los rayos de sol que se reflejaban por el espejo. El de ojos dorado carraspeo para llamar la atención de la chica la cual giró el rostro para verlo. Sonriendo hablo.

- Cómo estás? - preguntó cordialmente.

- Creo que bien - Respondió encogiéndose de hombros, dallas asintió estrechando los ojos y volvió a fijar la vista al frente.

- ¿Y a qué te dedicas? - Preguntó ella no queriendo que la conversación termine ahí.

Estaba nerviosa hastas las uñas de sus dedos pero debía controlar esas emociones para conocer más del vampiro novio de stiles, aún se le hacía extraño llamarlo de esa manera, jamás pensó que stiles fuese gay y menos que estuviera enamorado de su hermano, sin duda derek fue un verdadero idiota al rechazarlo, ella no era fielmente amiga del castaño pero sabía reconocer cuando alguien valía la pena, y stiles era el chico indicado que derek necesitaba en su vida, su carisma y su valentía era todo lo que ellos necesitaba para cambiar, salir del hoyo oscuro que ellos mismo construyeron a base del tiempo. Sin embargo su hermano obró de mala manera y tal vez perdió la única oportunidad que la vida le había otorgado para ser feliz, un stiles no se encuentra dos veces en la vida. Ahora era dallas quien lo tenía y el que podía disfrutar de sus cualidades.

Miraba al hombre fijamente y buscaba en sus ojos indicios que le hicieran creer firmemente que él no merecía a stiles, pero era siquiera absurdo llegar a pensar aquello cuando el vampiro sonreía de una manera anonada cuando estaba con su amigo, sus ojos brillaban de la misma manera que los de stiles al estar con él. Ambos estaban completamente enamorado y cora estaba segura que nadie podría separar esa hermosa relación que estaba floreciendo.

- En realidad soy una persona multifacética, a lo largo de mi vida aprendí muchas cosas y una de ella fue el volverme rico - cora rió en lo último y dallas después de reír también continuó hablando. - Ahora tengo un bar en el pueblo y me dedico a ello.

- ¿Y te gusta trabajar en el bar? - Dallas asintió con una sonrisa en su cara. - Ojalá pudiera encontrar algo que realmente me gustará.

- Hay muchas opciones, ¿en qué te gustaría invertir tu tiempo libre?. - Preguntó el vampiro mientras aparcaba el auto frente al supermercado.

ʀᴇᴄʜᴀᴢᴏ •sᴛɪʟᴇs sᴛɪʟɪɴsᴋɪ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora