𝑯𝒆𝒓𝒎𝒐𝒔𝒐 𝑪𝒂𝒄𝒉𝒐𝒓𝒓𝒐 [ ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ ]

CAPITULO 8: Tristeza e Impureza

Aunque te encuentres lejos
Aunque no puedas escucharme
Aunque me quede sin voz
Seguiré llamando tu nombre
Ven y sálvame

El omega abrió los ojos con pesar, no sabia donde estaba no podía ver nada. Intento mover sus manos pero estaban atadas detrás de sus espalda, intento recordar lo que había pasado y a su mente llegaron las imágenes de Jiyong sedándolo y a él gritando el nombre de su alfa. Se movió un poco y dedujo que se encontraba sentado y con los ojos vendados ¿En donde? No lo sabia.

—¿Yoongi hyung?— pregunto al aire. Tenia la esperanza de que todo había sido un sueño y que seguramente esto seria una broma de Taehyung junto a Lisa.

—Al fin despiertas, cachorrito— Esa voz... Esa voz hizo que su cuerpo entero se estremeciera del miedo.

—J-Jiyong...

—Soy Jiyong y para ti, tu alfa.

¿Alfa? No lo había marcado, al menos no que el recordara.

—¿Alfa?...— Escucho como el chico se acercaba y sintió como le quitaba aquella venda. Lo primero que vio fue una mesa con una mochila de color negro, ventanas, algunas cajas, el lugar era amplio seguramente estaban en un almacén.

—Escucha, Jiminie— Era la primera que lo llamaba por su nombre —Te has presentado como omega ¿Verdad?— Jiyong se coloco enfrente del omega, a su altura y lo miro a los ojos.

—Que me haya presentado como omega no quiere decir que puedas ser mi alfa, además, tu me odias.

—Cierto, pero... A mi hermanito le gustas y la mejor forma de hacerlo sufrir es quitándole algo que quiere, ¿Como se sentirá Yoongi cuando sepa que su chico esta con otro alfa?— Jiyong sonrió ladino.

—Mi alfa es Yoongi y no puedes hacer nada— Jimin tenia miedo, pero no podía dejar que el alfa lo notoria o perdería totalmente.

—Te equivocas, sin Yoongi para protegerte no eres mas que un simple omega a merced de un alfa, y sera demasiado tarde si te marco, ¿O no?

¿Marcar? Si Jiyong lo marcaba significaría que estaría condenado completamente. Ni Yoongi podría salvarlo.

—N-no lo harías.

El alfa acaricio algunos mechones de cabello naranja que caían en su rostro —¿Por que no? Aun no termina tu celo y seria perfecto si incluso tenemos cachorros.

Jimin tembló ante esa idea, no podía imaginarse al lado del chico que lo había golpeado y hecho tanto daño durante estos años. Se sentía mejor en cuanto a su celo, pero no pasaría mucho para que el efecto del supresor pasara, tenia que darse prisa y salir de ahí.

—Solo tienes que dejarte llevar, si eres bueno seré suave— El omega no se movió, cuando observo que el chico se acercaba a su cuello y lo olfateaba —Que peculiar aroma... Nunca creí que una escoria como tu poseyera tan deliciosa fragancia.