-deja de mirarme- gruño en voz baja. El imbecil para el sonreír divertido,digo parece por que necesito verdad no se si lo hace, es difícil verle si le estoy dando la espalda colocandome la ropa.
-¿porque? - pregunta sentándose en la cama dejando que las sabias se resbalen por su cuerpo desnudo.
-por qué estás en mi pita habitación y se hace la mierda que yo digo- espero dándome la vuelta y mirándolo con el ceño Fruncido.
- por supuesto, si no fuera así no te habría dado 'más todoroki' - ahora si lo veo sonreír, ruedo los ojos mientras me coloco mi camisa.
-bien largo de aquí, sal antes de que los otros despierten.
-si es que durmieron, tus gritos quizá - no quise que hablara más asique simplemente lo amenace con mis explosiones.
Rodó los ojos antes de levantarse de mi cama, completamente desnudo, camino hasta mi y de un movimiento rápido me congeló los pies.
Gruñi de forma retadora, dispuesto a romper el jodido hielo con una de mis explosiones si no fuera por que el idiota de dos colores se habría acercando a mi rodeado mi cintura y pegando sus labios a los míos.
Una fuerte explosión salió de mis manos, antes de que el se separa asustado por casi quemarle la piel.
Rodé los ojos y en silencio rompí el hielo.
Suspire y comencé a arreglar mis cosas para hacer mi entrenamiento matutino mientras el hacía quien sabe que.
Todo fue tranquilo hasta que suave voz me preguntó algo que realmente no sabía como responder.
-bakugou...
-mmmh
-¿que somos? - me di vuelta para mirarlo entre sorprendido y enojado.
Rodé los ojos recordando la forma en que el me contestó hace poco.
- somos humanos, imbecil.
-no... Nosotros que somos, tu y yo.
- héroes, idiota.
- bien... ¿Que hay entre nosotros?
- un cama, el suelo y mi puño en tu cara si no te callas.
El no siguió hablaba por un tiempo hasta que estuvo completamente bestido, entonces sentí sus manos alrededor de mi cintura.
- ¿que tipo de relación tenemos? No somos amigos, no somos novios y mucho menos prometidos. ¿Que somos? - el murmura cerca de mi oído, mi corazón se contrae pues su tono es casi lastimero.
Intenta ocultarlo pero en realidad no puede.
Suspiro dándome vuelta para mirarlo.
- hasta ahora y mucho solo somos compañeros de curso, no te exaltes. Solo un polvo.
-pero soy el polvo que te quito la virginidad, ¿no?
-¿ te crees mucho por eso, eh? - el sonríe casi inexsistentemente y la dea la cabeza.
¦esto... No puede parecerme tierno... ¿Cierto?)¦ pienso a mis adentros.
Me alejo de él tomando una buena distancia.
- bien - gruñe - de todas formas tenía que ir a entrenar con midoriya.
Lo miro con el ceño fruncido pero el al parecer me ignora.
Suelto las pesas que al llegar al suelo hacen un ruido sordo.
Tomó aire mientras escucho la risa de kirishima junto al pikachu que solo ah venido a ver.
Suspiro por lo bajo ignorando todo lo que esos idiotas puedan decir.
Tomo agua jadeando por el esfuerzo de haber entrando toda la mañana.
Giro mi cabeza al escuchar la risa del que ahora es mi... ¿Amigo? Bueno, en proceso , auqnue en lo único que se ha esforzado es en tratar de meterse en los pantalones de todoroki...
Aunque tenga de novia a la chillona como lo es uraraka.
Lo miro por el rabillo del ojo cuando por fin giro mi cabeza como si mirara el piso.
Deku, todoroki o mitad mitad están riendo, el segundo en realidad negaba con una sonrisa pequeña en la cara...
Bien, en esos momentos podía sentir como un puñetazo en el estómago.
Todoroki reía con alguien más con el imbécil de deku.
Ja... Ja... Ja.
Y luego se pregunta que somos. Imbécil.
Suspiro dejando el gua a un lado y pasándome la toalla para cercano el sudor.
Los Imbéciles a mi lado aún ríen y kirishima se secaba el sudor mientras lo hacía.
- hey - llamó, ninguno ne toma en cuenta suspiro pues estoy cansando como para explotarles la cara - ya me voy, basuras.
Cuando iba caminando siento como alguien me toma del hombro, pesando que podría ser todoroki me doy vuelta para darle un puñetazo cuando el rostro duro de kirishima me detiene.
El desactiva su kosei cuando retiro mi mano de su rostro.
- ¡¡hermano, casi me matas!! - la risa de fondo de Kaminari es contagiosa asique solo reprimo mi risa ruedo los ojos y sigo mi camino con esos dos detrás de mi, cada uno con un brazo en mi hombro.
Gruño por el peso pero no los separo.
¡Como me gustaría que el mitad mitad viera esto y se muera de celos!
Así como lo hago yo cuando...
Cuando, nunca, por que a mi no me dan celos, nunca.
Lo que en verdad no sabía es que el bastardo si miraba, y que luego iría a mi propia habitación a echarmelo en la cara y no... No hablo de palabras.
¡¡ESE MALDITO ASQUEROSO DE MIERDA!!