Cogiste tus cosas, te sentaste conmigo y dijiste: —Te amé, quiero que lo sepas—me besaste. Era un beso triste, lento, con sabor a lágrimas.
Esto era el final.
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Jana |Historia corta|
RomanceEra un rompecorazones, pero aún así seguía tras ella. Era un desastre, pero yo la arreglaría. Eramos un lío, pero nos amábamos. Historia 100% salida de mi loca imaginación.
50.
Cogiste tus cosas, te sentaste conmigo y dijiste: —Te amé, quiero que lo sepas—me besaste. Era un beso triste, lento, con sabor a lágrimas.
Esto era el final.