H̷̷a̷̷t̷̷e̷̷ ̷̷m̷̷e̷̷ ̷ × Double B ×

Epílogo

-¿a donde vamos?

-Tú dijiste que querias conocerlo ¿no es así? Hoy es un día especial e iremos a visitarlo.

-¿Por fin podré conocerlo? - su rostro se iluminó, desde hacia ya varias semanas había comenzado a preguntar por él y creo que hoy es el dia correcto para hacerlo.

Lo dude mucho, no quería que se enterase de esta forma, pero ya habían pasado 8 años, 8 dolorosos años, años en los que no pude sacarme esa escena de mi mente.

Pero no podia dejarme caer tan fácil, habia personas que dependian de mi, hay personas que aún dependen de mi. Y fue por esa misma razón que para despejar mi mente me fui a Japón, no podía quedarme en este lugar por más tiempo.

Los recuerdos me atormentaban. Me hacian sentir la mierda de persona que realmente soy.

-¿Crees que pueda abrazarlo? A todos les gusta ser abrazados en su cumpleaños.

-no mi amor, eso no va a ser posible - sonreí un poco nostálgico.

-¿porque no? - su carita triste hizo que mi corazón doliera aún más.

-Mira - detuve mi paso y me puse en cuclillas hasta quedar a su altura- ahí adentro esta él, pero necesitamos ser muy silenciosos, es un lugar donde mucha gente esta descansando y ¿a ti te gustaría que te molesten cuando descansas?

-No

-Bueno, entonces prometeme que harás el menor ruido posible - levante mi dedo pequeño el cual tomo con el suyo cerrando nuestro trato.

-Te lo prometo- dijo mostrandome una amplia sonrisa, y no les voy a negar que me duele verlo, incluso cuando sonríe es identico.

-Ahora ¿Recuerdas que te dije que él tenia mucho dinero?

-Si, nosotros también tenemos mucho

-Bueno, pues él tenia muchas personas que le querian quitar ese dinero - me puse de pie nuevamente, tome su mano y seguimos caminando.

-¿También a ti te quieren quitar tu dinero?

-Afortunadamente no, pero mira, esas personas que querian quitarle su dinero son malas e hicieron una cosa realmente horrible.

-¿porque son malos?

-Porque...querian tener su poder, querian venganza de algo que él había hecho. Esa persona quería que él sufriera y se sintiera la peor persona del mundo- mis ojos comenzaron a tornarse rojos y las lagrimas amenazaban con salir.

-¿Venganza de que? -giro su carita- No llores, me harás llorar también - un pequeño puchero se formo en sus labios y sonreí de lado, eran identicos.

-Lo siento- limpié una lágrima que había escapado- Listo, llegamos.

-Pero...aquí no hay nadie -buscó por todos lados- ¿es una broma?

-No mi amor- me sente en el suelo y extendí los brazos hacia él- mira, ven, sientate.

Se sento en mi regazo y comencé a moverme de lado a lado, mesiendolo.

-¿Entonces donde esta? Quiero verlo

-Aquí - le mostré una carpeta llena de fotografías de nosotros dos, juntos, algunas abrazados, otras peleando, cocinando, sonriendo. Como si todo estuviese bien.

-¿fotos?

-Aqui- coloqué mi mano sobre el pequeño recuadro de cantera a mi costado- aquí esta él, yo te prometí que te traería a conocer a tu padre y aquí esta.