Sangre, sangre y mas sangre, en el suelo, el las paredes y en el techo, todo esta una pestilente mancha roja, pegajosa y caliente sangre. Me provoca nauseas estar aquí, no logro encontrar la puerta, no se como salir de esta habitación que de apoco se va llenando de esta sustancia roja escarlata, ya casi no se ven mi pies de tanta sangre que se acumula en el suelo. Trato de mantenerme en control a pesar de no entender nada de lo que pasa ¿será un ataque de locura? lo único que logro ver sin ninguna gota de sangre es el espejo, extrañamente esta muy limpio, lo miro detenidamente porque mi reflejo es un poco extraño, tengo la sensación de que no es del todo mi reflejo ¿pero de quien mas podría ser? si solo estoy yo en el baño, no podría reflejar a nadie mas ¿o si? a esta altura puedo cuestionarme todo, no es normal lo que veo, aun no se de donde salio toda esta sangre y me preocupa no poder salir de aquí antes de que todo se vuelva rojo.
Por mas que busco no logro encontrar la salida, ya no se encontraba en el lugar donde siempre ha estado, trato de orientarme tocando las paredes pero estas me queman las mano, derritiendo la piel de mis dedos ¿quizás estoy soñando otra vez? porque las quemaduras no me duelen, me arrodillo para meter las manos en la sangre, quizás la puerta ahora este en el suelo o en el techo, comienzo a desesperarme porque no logro entender nada, no despierto del sueño, la sangre sigue subiendo y no sé que hacer. Sigo buscando por todas partes la puerta sin tener éxito. De pronto escucho unos golpes que llamaron mi atención, buscaba rápidamente de donde venían hasta que me di cuenta que era el espejo lo que estaba siendo golpeado, no podía ver quien lo golpeaba porque no reflejaba nada solo se veía una gran oscuridad dentro de el, de apoco comencé a ver una silueta que con el dedo indice daba los golpes desde el interior de espejo, hasta que este se comenzó a quebrar, yo me seguía acercando al espejo muy sigiloso, hasta que sin previo aviso desde el interior vi un par de ojos rojos muy fuertes y una mano saliendo de el me toma del cuello y me lleva hacia el espejo hasta que mi cabeza choca contra el quebrando lo en mil pedazos. Del miedo salí disparado hacia atrás hasta que mi espalda toco una pared, entré en pánico a ver que el espejo era una especie de venta y dentro de el veía el rostro del joven con el que había soñado hace tiempo atrás. Su mirada llena de furia y odio se combinaba con esa mirada roja.- Déjame salir de acá, es mi turno de vivir. Me gritaba muy fuerte.- No me podrás detener toda la vida y lo sabes, cada día te haces mas dedil y yo mas fuerte, tu destino sera pudrirte en este infierno. No puedo mas con todo esto y comienzo a llorar, tenia miedo, la sangre seguía subiendo, no sabia que hacer, seguía escuchando los gritos.- Déjame salir, quiero salir de aquí. Trate de mover mis pies entre la sangre espesa y a flote sale un cadáver con mi mismo rostro, en ese momento cerré mis ojos y no supe más del mundo.
Cuando desperté lo primero que veo fue el rostro preocupado de mi madre, sí, mi madre no la biológica, no quien me dejo abandonado sin razones, otra madre, una mujer de verdad quien a pesar de todo me crió como si fuera una hijo mas de su vientre, a ella si puedo llamarla mamá a pesar que somos muy diferentes y muchas veces no logramos entendernos es mi madre, es quien me hizo parte de una familia y me dio hermanas. Estaba ahí con sus ojos llorosos tocando mi rostro.-¿ en dónde estoy mamá? ¿qué donde lo que pasó? no recuerdo muy bien que es lo que pasó. Mi madre me miró y sonrió levemente -Te golpeaste la cabeza contra el espejo del baño, quizás te resbalaste con el agua que estaba en el suelo, pero todo esta bien, te escuchamos gritar, decías que querías salir, así que fue lo mas rápido que pude cuando escuche que el espejo se rompió. La miré un poco desconcertado y en mi mente trataba de recordar en que momento grite, pero no recuerdo haber lo hecho en ningún momento, solo recuerdo que la otra persona que estaba dentro del espejo era quien gritaba que lo dejara salir.- Puse unos paños fríos en tu cabeza ya que tenias un poco de vidrio en la frente y unas cuantas cortadas, no sé que es lo que pasa en tu mente Cristian pero por favor no vuelvas a hacerte daño. Mi madre se puso de pie y de espaladas me dijo- es obvio que hoy no iras al colegio, quiero que te quedes acostado en tu cama, tu abuela te cuidara hoy, yo debo ir al trabajo. Creo que mi mejor respuesta solo fue quedarme en silencio, habían tantas cosas que no tenían ninguna explicación, pero de algo estoy seguro debo saber quien es esa persona que tanto quiere salir de ese lugar, antes que el me mate o me vuelva completamente loco.
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un necromante moderno
Paranormalun chico un poco peculiar, un poco loco, al igual que nosotros, no titubea al jugar con poderes fuera de nuestro entendimiento. juega con la vida y la muerte ¿o ellos juegan con él?