Un matrimonio arreglado no es tan malo

Epílogo: Toda mi vida a su lado

Este no es el final de nuestra historia, es solamente el comienzo porque estaremos toda la vida juntas. Sólo ella y yo.

Después de aquel beso que compartimos subimos a un auto que nos esperaba afuera de la iglesia, sí, muy cliché y todo pero simplemente hermoso. El auto era blanco al igual que nuestros trajes, tenía una pequeña cinta en la parte trasera que decía recién casadas, yo iba al lado derecho y mi hermosa esposa al lado izquierdo.

ㅡSi pudiera ahora mismo me voy contigo.ㅡ le susurré al oído, cosa que la hizo reír.

ㅡYo también huirá ahora mismo con mi esposa, pero debemos esperar a que la fiesta acabé y luego podemos ser libres.ㅡ dio un pequeño beso en mi mejilla y asentí.

Después de algunos minutos llegamos al lugar donde se llevaría acabo la pequeña fiesta de celebración por nuestro casamiento. El edificio era algo modesto, nadie sabía dónde ni a qué horas iba a ser nuestra boda (prensa y demás, algo íntimo) y así era mucho mejor, no tendríamos que dar explicaciones. Esta noche solamente éramos ella y yo.

Bajé del auto y le ofrecí mi mano con una enorme sonrisa en mi rostro, simplemente no podía dejar de pensar en lo increíblemente enamorada que estaba de esa pequeña mujer.

ㅡPero que caballerosa me saliste, gané una hermosa mujer y además educada.ㅡ reí un poco a lo que dijo.

ㅡEs cosa de Tenoh's.ㅡ le guiñe un ojo y vi un pequeño rubor alcanzar sus mejillas. Si me dijeran que sentía en estos momentos sería: felicidad. Michiru me daba felicidad y todo lo que pudiera desear, aunque siendo sincera no necesitaba nada más que a ella en mi vida.

ㅡDebemos entrar, Haru.ㅡ tomó mi mano delicadamente y nos guió hasta la entrada principal.

Se escuchaba un poco de música, era una canción que habíamos compuesto juntas, sólo para este momento.

Eternal Eternity, cómo decidimos ponerle a aquella pequeña pieza musical, habían dos versiones instrumental o normal, esta era la versión instrumental. Llegó el sólo de Michiru, ella cerró sus ojos y se dejó llevar por la música, mientras yo simplemente no podía dejar de verla.

ㅡEres mala, Michiru. Siempre te encierras en tu mundoㅡ le dije en el odio aún cuando no había terminado el solo.

Abrió los ojos y me miró, totalmente sonriente. ¿Cómo se respira?

ㅡRuka, mi hermosa y amada Rukaㅡ sonrió, su sonrisa era hermosa ㅡnunca te dejaría sola, porque tu eres mi mundo.

La pasamos muy bien en la fiesta, saludando a algunos conocidos y escuchan felicitaciones de su parte. Todo fue hermoso, como la mujer que tenía a mi lado. A las 1:00 de la mañana nos retiramos, queríamos tener nuestra anhelada noche.

Teníamos una suite en uno de los hoteles más caros y lujosos de Tokio Crystal City. Nos adentramos en la suite, con ella en mis brazos los besos y caricias no tardaron, yo quería despojarla de su vestido y ella quería arrancarme el traje, lo sabía.

La recosté en la cama mientras apoyaba mis codos a sus lados evitando que el peso de mi cuerpo cayera completamente sobre ella, quite mi corbata y mi traje dejándolos tirados en el suelo.

ㅡHaru...ㅡ mi esposa suspiraba, pare toda acción al verla. Era hermosisima.

ㅡ¿Que ocurre, princesa?ㅡ pregunté.

ㅡYo soy...bueno, ya sabes.ㅡ desvío su mirada y lo sabía, sí, sabía muy bien que Michiru era virgen. Al igual que yo...

ㅡYo también, así que no debes de qué preocuparte.ㅡ le sonreí calmada.