Capitulo XVI

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Le pedí a Hendrick que se fuera, necesitaba estar solo y tomar una decisión  que me ayude a marcar una línea y centrarme para así poder actuar de una mejor manera. Hendrick salió sin decir ni una palabra, yo subí a mi habitación y me senté en una esquina de mi cama. En mi mesa de noche estaba el diario de Nicole junto con la llave que había venido en el sobre. Cogí el diario y introduje la llave al pequeño candadito, lo abrí y mi primera impresión es que Nicole tenía una letra muy hermosa, en la primera hoja tenia pegado una pequeña foto de ella y a un lado escribió con un lapicero de tinta rosada: “Sueña lucha y consigue”, pase a la segunda página y comencé a leer, era un joven muy interesante y su capacidad de redactar su vida me envolvió lentamente, por unos segundos me escape de mi realidad y me introduje en el mundo de palabras que ella narraba en su diario, problemas de adolescencia, días felices, días tristes, pero siempre muy segura de sí misma.
En una parte del diario hablo de un muchacho que al parecer fue su primer amor, su forma de describirlo, la manera en la que definía sus ojos, labios, demostraban que ella está encantada de este chicho el cual se llamaba José, el tiempo paso y ellos nunca pudieron estar juntos, pero sí tuvieron una pequeña noche de aventura que describió con mucha pasión y sentimientos, una noche como cualquier otra, una fiesta, un par de tragos se atreve a hablarle y él le corresponde, risas, caricias, abrazos y largos bailes cada vez más emotivos, ella se sentía en el cielo y se perdía en sus ojos marrones, el se sabía que ella estaba enamorada de él, disfrutaron la noche, pasadas unas cuantas horas, se van en un auto que el padre de José le había prestado, Nicole tenia hoy la casa sola porque sus padres salieron urgentes a un viaje de negocios, el destino parecía poner todo a su favor para que esa noche el amor se convirtiera en pasión y deseos, llegaron a su casa y subieron a su habitación, pusieron música lenta de fondo y apagaron la luz.
Primero una caricia lenta a su cachete, luego sus rostros se acercaron lentamente hasta que por fin sus labios se encontraron, con un beso viajo a las estrellas, sus labios eran suaves, delicados y en medio de un beso muy apasionado se cola un mordisco que la enciende, el baja lentamente sus besos y pasa al cuello, con mucha cuidado  toca  y acaricia sus brazos hasta que llega a sus senos, ya en ese punto masajeó con mucha delicadeza y rudeza a la vez que le va quitando la camisa, todo sin dejar de besarse, el acto continua hasta que ambos estaban desnudos tocándose mutuamente, su manera de narrar este hecho fue tal que definió a la perfección toda la tensión sexual que estaba en la habitación, el deseo de terminar de unir sus cuerpos para así volverse uno, disfrutando siguiendo el ritmo lento que la música marcaba… Después de unas cuantas especificaciones que dejo en el diario empezó a narrar como fue el acto, el amor  y el deseo por fin se encontraron y dejaron como consecuencia una de las mejores experiencias de su vida.

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