𝑻𝑹𝑬𝑰𝑵𝑻𝑨 𝑫𝑰𝑨𝑺 𝑫𝑬 𝑺𝑴𝑼𝑻 𝑪𝑯𝑨𝑳𝑳𝑬𝑵𝑮𝑬 ‖𝑽𝑲𝒐𝒐𝒌‖𝑲𝒐𝒐𝒌𝑽‖

♡Día 27: En el auto.

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KookTae
Kook castaño, Tae rubio.
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— Amor, basta o chocaremos. —JungKook alejó con suavidad la mano traviesa de su novio que intentaba colarse dentro de sus pantalones de mezclilla azules.

— Entonces apresúrate para llegar a un lugar donde no nos vean.

JungKook sonrió por lo descarado que era su novio y condujo con un poco más de prisa deteniéndose fuera de su casa que estaba básicamente a la mitad de nada frente a la playa, en los lugares que nadie visitaba porque no eran "bonitos".

— A la parte trasera bebé, ahora.

TaeHyung sonrió y se pasó a la parte trasera del auto sin salirse de él, recibiendo una nalgada sumamente fuerte que lo hizo gemir cuando elevó su trasero para llegar a su destino. JungKook le siguió, quitándose su camisa negra y poniéndose sobre el rubio justo entre sus piernas quitándole pantalón dejándolo puesto solo en una pierna acanelada. El castaño no besó al rubio porque sabía que si lo besaba el menor terminaría en sus pantalones y no quería eso, o al menos no hoy.

JungKook rompió la camisa de tirantes blanca que usaba TaeHyung dejando al descubierto su pecho y vientre plano, sus tatuajes de rosas en su hombro derecho le gritaban que las besara así que lo hizo. Lamió beso y chupo todo el pecho del rubio bajando hasta toparse con la erección de TaeHyung la cual tomó en su puño, masturbándolo lento.

— Hyung~

— Shh bebé, sigue tocándote mientras yo me quito el pantalón.

TaeHyung obedeció, sosteniendo su erección, moviendo su mano por toda la extensión sintiendo una deliciosa corriente en su espina, le encantaba masturbarse frente a su novio. La mano libre de TaeHyung viajó hasta su boca donde lubrico tres de sus dedos para llevarlos a su entrada y comenzar a prepararse adecuadamente para que su novio lo folle.

— Oh hyung, se siente tan bien~

JungKook sonrió terminándose de quitar los pantalones, quedando igual de desnudo que su novio reemplazando los dedos largos del mismo por los suyos, moviéndolos con una velocidad rápida y curvándolos a ratos.

— ¿Te gusta bebé?

TaeHyung asintió, moviendo sus caderas para encontrarse con los dedos dentro de él.

— Vamos hyung, entra ya.

— Tú lo pediste.

JungKook retiró sus dedos y alineó la su polla en la entrada rosada de TaeHyung metiendo solo la cabeza sintiendo como las paredes internas de TaeHyung apresarlo deliciosamente.

— Hyung, entra ya, quiero que me beses. —TaeHyung estaba sufriendo al ver los labios de su novio frente a él pero sin poderlos tocar.

JungKook se metió de lleno y estampó sus labios delgados y rosas contra los belfos rojos y llenos de TaeHyung haciendo que éste último se corra fuertemente, soltando su esperma sobre su vientre, salpicando un poco a JungKook.

— Por Dios Tae, estabas tan cachondo que no duraste nada.

JungKook se mofó un poco de su novio comenzando a penetrarlo con ímpetu, besándolo fuertemente y con la boca abierta, sus estómagos juntos mientras sus lenguas se rozaban, el miembro de TaeHyung se puso erecto de nuevo gracias al beso, la polla de JungKook golpeaba hasta el fondo en el interior de TaeHyung mientras su estómago rozaba el miembro del rubio.

Ambos comenzaron a jadear y gemir, las penetraciones volviéndose desordenadas indicando el inminente orgasmo del castaño.

— Hyung, ¿Te vas a~ah venir? —TaeHyung preguntó en mitad de un gemido, JungKook asintió. — Bésame y terminemos juntos.

JungKook obedeció a su menor, follándolo fuertemente y besándolo, llegando juntos a la cúspide de su orgasmo, JungKook corriéndose en el interior de su novio y éste manchando su vientre con más semen.

— Dios Tae, esto siempre es increíble contigo. —El mencionado le sonrió a su novio perezosamente, ambos estaban muy cansados ya.

— Vamos a la casa hyung, levántame.

JungKook se carcajeó, saliendo del interior de su menor para ponerse sus pantalones, él llevaría a su menor hasta su hogar para que pudiera descansar, JungKook podía con eso.

— Vamos bebé, hyung te va a llevar a que descanses.

TaeHyung se aferró a los brazos de su hyung que caminaba por la arena hasta su hogar.

— Te quiero hyung. —JungKook sonrió sin mirar a su menor.

— Y yo a ti bebé.