-No volveré más, ¿no?.-Digo y ella niega con la cabeza con un poco de tristeza.-le podrías decir a Klaus que lo amo.-Le dije.
-Esta bien.-Dice con una lagrima cayendo por su mejilla. Me tiende las manos y se las cojo.-suerte Nadia.
-Gracias.-Le digo con las lágrimas recorriendo mi cara, sabiendo que jamás volveré a ver a mis seres queridos, a Klaus.
Me acerque a ella y le cogí las manos, sentí como me desvanecía, como miles de recuerdos aparecían rápidamente en mi mente, de pequeña cuando me caí en el precioso prado que rodeaba mi casa, cuando mis padres trabajaban para Mikael, cuando me enamoré de Klaus, cuando Klaus dijo que me amaba e hizo que lo olvidase para protegerme. Nuestro primer beso, lo amaba y ahora toda mi felicidad se acabo, estaba tan ciega por pensar que por una vez en la vida podría ser feliz, podría ser feliz junto al hombre que amaba.
Después de lo que parecía minutos e incluso horas, abrí los ojos esperando encontrarme algo horrible. Me encontraba en un bosque, ¿qué hacia en un bosque?, miré a mi alrededor, estaba rodeada de árboles, no sabía donde me encontraba, siempre escuche hablar del otro lado, pero nunca escuche que fuera un bosque. Mis piernas se echaron a andar sin un rumbo decidido, y mientras andaba más árboles me encontraba, era el mismo paisaje. Llevaba un rato enorme andando, decidida a parar ya que el paisaje era siempre el mismo, hasta que vi a lo lejos una luz. Corrí hacia ella, lo más rápidamente que puede, cuando llegue. La potente luz me rodeo cegándome, cerré los ojos y me llevé las manos a mis oídos, estaba asustada. Unas brazos grandes y fuertes rodearon mis hombros y me ayudaron a levantarme, ya que estaba en el suelo, abrí los ojos para encontrarme aún hombre alto, de pelo moreno tirando para rubio y ojos oscuros.
-Ahora estás bien.-Dijo con una voz grabe, no podía articular palabra alguna, así que asentí.- deja que te lleve a un lugar.-Volví a asentir, por raro que parezca, me fiaba de ese hombre. Me condujo por la luz, hasta que llegue a una especie de casa. Entramos dentro, era una casa, parecía real. Una vez dentro la luz desapareció y pude ver a muchas personas dentro.- aquí es donde viene las personas que mueren.-Me informa, pero yo estoy perpleja. Es muy normal.- se quien eres Nadia.-Lo miro sorprendida al saber mi nombre.
-¿Por qué lo sabes?.-Pregunto mientras miro a todas esas personas, hasta que reconozco a una, no puede ser. Me acerco a el, se me forma un nudo en la garganta. Esta vuelto de espalda, así que no me ve.- Kol.-No suena a una pregunta más bien a una afirmación. Se da la vuelta y cuando me ve se queda tan sorprendido o más al verme.
-¿Nadia?.-Tiene la boca abierta, esta muy sorprendido.-¿Por..por qué?.-No cree que haya muerto, lo comprendo, yo sigo sin asimilarlo.- ¿qué a pasado?.-Pregunta después de un buen rato.
-Mikael.-Susurro.
-¿Qué?.-Grita.-es…es imposible…el.-Sacudo la cabeza negando.
-Es posible cuando utilizas a una bruja con mucho poder.-Le digo y se me quita el nudo de la garganta. Lo abrazo y el no tarda en rodearme con sus brazos.- estoy tan asustada, Kol.-Una lágrima se desliza por mi cara y me aprieta más fuerte contra el.
-Es normal.-Dice y me coge las mejillas, me limpia las lágrimas.- te acostumbrarás.- Lo vuelvo a abrazar más fuerte.
Él y yo siempre hemos tenido una gran vinculo de amistad, me obliga a sentarme en uno de los sofás que hay en la sala. Es todo un poco raro, yo me esperaba un sitio oscuro con alguien que torturaba a la gente que se encontraba en ella, pero es todo tan ¿normal?, no parece que hayamos muerto. Empiezo a contarle todo lo que paso desde que volví a Nueva Orleans, el asentía y en otras se quedaba sorprendido, cuando le conté que Rebekah y Marcel estaban juntos.
-Vaya.-Dice después de yo haber terminado.- no me esperaba ser tío tan joven.-Se ríe y yo me río con el.- Seguramente que Klaus se esté echando todas las culpas por tu muerte.
-Lo se.-Digo, la verdad me lo esperaba, se como es Klaus, se que se echará todas las culpas por el resto de su eternidad.- oye, ¿quién es aquel tío?.-Señalo al hombre que me trajo hasta aquí.
-Es Alaric.-Me informa.- es un buen tío, aún que intente matarlo un par de veces cuando estábamos vivos.-Me río a carcajada limpia y el me imita.- ¿por qué te ríes?.
-Por que siempre has sido muy impulsivo.-Digo.
Seguimos hablando durante horas, hasta ponernos al día, la verdad es que a pasado muchísimos años y cuando me enteré que el murió fue un gran palo. Alaric se unió a nosotros, dijo que conocía a Elena y a todos los demás, fue una gran sorpresa, reconoció que Elena y Jeremy era como unos hijos para el, y también que Damon era uno de sus mejores amigos pero que muchas veces era un enorme capullo, en eso le di la razón. Yo les conté mi relación con Klaus, no pude evitar soltar un par de lágrimas y después de eso nos quedamos en silencio.
-¿Te gustaría verlo?.-Dice Alaric mirándome fijamente a los ojos.
-¿Puedo verlo?.-Pregunto rápidamente mientras se me acelera el corazón.
-Si.-Se levanta y hago lo mismo.- pero, no puedes hablarle.-frunzo el ceño.- no puede escucharte.
Si puedo verlo odiare no poder hablarle, pero prefiero no hablarle a no volver a verlo nunca.
-No me importa, solo quiero verlo.-Digo casi suplicante, el asiente y me coge de la mano.-¿vienes Kol?.
-No.-Suspira con la mirada triste.- aquí estaré cuando regreses.
Asiento y vuelvo para mirar a Alaric, ambos empezamos a andar hacia fuera de la casa. Empezamos a andar por el bosque y de nuevo la luz nos vuelve a rodear y a cegarnos. Cierro los ojos otra vez, es inevitable. Cuando vuelvo a abrirlos me encuentro en una calle, la reconozco al instante, estamos en Nueva Orleans. Mi instinto hace que corra a una gran velocidad y sintiendo los pasos de Alaric detrás de mi. Cuando llego a la casa de Klaus y entro me encuentro todo en total silencio y completamente oscuro, no hay nadie. Subo a las habitaciones y entro en cada una de ellas, no hay nadie, tampoco hay nadie en la de Klaus. Me da un vuelco al corazón cuando pienso en donde podría estar, subo las escaleras que dan a la azotea de la casa. Cuando llego el fuerte y frío viento me roza la cara, empiezo a andar. Y lo veo allí sentado mirando al horizonte y con la mirada perdida, me siento a su lado y veo sus ojos llenos de lágrimas.
-Amor.-Dice.- esté siempre será nuestro lugar secreto.
-Siempre nuestro.-Digo y más sabiendo que el no me puede escuchar, pongo la mano en su cara.
-Por favor, vuelve.-Dice suplicando mirando el cielo.
-Me gustaría tanto.-Dije con la voz rota.
-Me dejaste.-Empieza a sollozar, lo que hace que mi corazón se parta en dos.
-Lo se.-Empiezo a sollozar.
-Te amo tanto, amor.-Veo sus ojos cuando miles de lágrimas empiezan a cubrirle su precioso rostro.
-Yo también te amo.-Mis lágrimas amenazaban en salir y salieron, no podía parar de llorar, no después de ver como el también llora y llora por mi culpa.
-Ahora, me gustaría que estuvieras aquí conmigo.-Dice en un intento imposible de limpiarse las lágrimas ya que de nuevo salían. Lo abracé, no sentirá mi contacto, pero muy en el fondo sentía su calor.
Aquí el primer capitulo de Right Now. Estoy, literalmente llorando, es que mientras escribía el final del capitulo empezó a sonar Human de Christina Perri y TT_TT. ¿Qué os aparecido el primer capitulo?. También daros las gracias por el recibimiento que habéis dado a esta segunda temporada. Mil gracias, Besooooos :) .
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Right now [Klaus Mikaelson] {Secuela de EDUO}.
FanficSe supone que todo volvería a ser como antes, pero, estaban tan equivocados. No volverá a ser como antes. Ella ya no esta, el no dejara de lamentarse y culparse por todo lo que paso esa noche. Pero, quien sabe lo que podría ocurrir. Secuela de: Enam...