🐰 Two 🐰

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Ya estaban en la zona sur de Daegu y deambulaban a paso lento por ahí, buscando algún auto o camioneta que quisiera llevarlos hasta el lugar que cumpliría la función de hogar durante las dos siguientes semanas. Las calles de tierra estaban prácticamente desiertas, era un poco temprano para que el pueblo despertara, pero por fortuna la suerte no los abandonó.

Una camioneta un poco destartalada y descolorida se estacionó en la bereda y les habló/gritó a los chicos -¡Hey amigos! ¿A donde van? ¿Los puedo llevar?- Era un chico de tez morena y sonrisa cuadrada, no tendría mas de 20 años y el acento sureño estaba arraigado en su voz.

Yoongi frenó y detuvo las maletas -Vamos a la casa de Sam, ¿La conoces?

El hombre se bajó de la camioneta y fue a abrazar a Yoongi eufóricamente -¡Un pariente de Sam! Pero que gusto verlos aquí, ese chico nos dijo que vendrían, dame esas maletas y esa mochila, suban, suban.

Yoongi, algo aturdido por el repentino abrazo, miró a Jimin y se encogió de hombros, Jimin soltó una pequeña risita y subió a la camioneta junto con su hijo.

-Bien, ¿Donde Sam me dijiste? Allá vámos- El chico arrancó la camioneta, la cual comenzó a dar pequeños saltos debido a las múltiples piedras que habían ahí.

-¿Conoces a Sam?- Preguntó Yoongi muy curioso.

-¿Que si lo conozco? No solo yo, todo el pueblo conoce a ese chico, dile a alguien que eres su pariente y te bajan el cielo.

Yoongi rió -¿Por qué es tan así?

-Sam es buena persona.

Yoongi asintió, iba a hablar pero el joven lo interrumpió -¿Y tú y el chico a tu lado son....pareja?

Jimin y Yoongi se miraron -¿Qué? No no no claro que no- Yoongi rompió a reír, y Jimin también -No somos parejas, somos primos de Sam, y el pequeño es hijo de Jimin, que lo traemos para que conozca a su tío Sam y al campo.

-Ohhh, cuanto lo siento- El hombre se rió meneando la cabeza, y dejando al descubierto nuevamente su adorable sonrisa cuadra. Pasaron un puente, doblaron y llegaron a una pequeña cerca -Ya estamos aquí, pueden bajarse.

El chico ayudó a Yoongi a bajar las maletas, siempre con una sonrisa -¿Cuánto le debo?

-No se preocupe por dinero, luego se lo cobro yo a Sam con algun favorcito, vayan a descansar, fue un largo viaje.

Yoongi le hizo una reverencia y el hombre se subió a su camioneta. -!!Adios señor del campo!!- Gritó su hijo moviendo la mano.

Entre los dos movieron la cerca y entraron, al lado de la entrada había un galpón lleno de madera y más al lado, otro galpón con dos tractores dentro. También habían gallinas, gallos, pollitos y patos por todos lados, tanto así que a Yoongi le faltó poco para arollar a un pollito amarillo que se había separado de su madre.

La casa era completamente de madera, de solamente un piso, rodeada de muchas flores, y al lado, había otra casa, pero era únicamente una pieza que contenía una cama e incontables trofeos en las repisas y medallas en las paredes.

«Debe ser la pieza de Sam»

Entraron y un calor abrazador los recibió, la cocina de leña estaba prendida. -Bien, hay dos piezas, pido la individual- Yoongi corrió y dejó su maleta, luego volvió a la entrada. -Ustedes se quedarán con la matrimonial.

-Eres peor que un niño Yoongi- Jimin sonrió

-Papá, ¿Puedo ir a jugar?

Jimin se agachó, le cerró el abrigo a su hijo y le besó la frente -Ve, diviértete.

Escape // Yoonmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora