Octava parte.-

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Graduación, Matrimonio, Boda, Adopción, Familia, Cuentos por la noche, Videojuegos, Despedida.

-Vamos Hazza.

-No se bailar Louis.

-Yo tampoco, pero no vinimos al baile para nada.

-Pero…

-Ven.

El rizado tomo la mano de Louis y los dos caminaron a la pista de baila, comenzando a balancearse de un lado a otro, agarrándose de los brazos como si hicieran cadena. Uno de los pasos de Louis hizo que pisara un pie del rizado, haciéndolo poner rojo de la vergüenza, el ojiverde soltó una risita. Y tomando las manos de Louis, las puso en su cintura, para pasar las suyas al cuello del ojiazul. Imitando a las demás parejas. Se acurruco en el pecho del castaño y se dejó llevar por la melodía. Louis sonrío y recargo su mentón sobre el cabello rizado de su acompañante.

Ya era imposible negar lo que sentía y con esa invitación al baile, Louis había más que aceptado al rizado en su vida.

<<…>>

El rizado espera sentado en la fuente, a la espera de Louis. Quien lo había citado en ese lugar, no había ni una sola alma en ese lugar, el ojiverde solo podía esperar a la hora en que su novio se dignara a hacer presencia en el lugar.

Así que mirando sus dedos, comenzó a jugar con ellos, a la espera del castaño.

Unos pasos y luego el ojiazul parándose a unos centímetros de él, los dos se sonrieron y el rizado parándose a recibirlo con un beso. El ojiazul disfruto de aquel beso, para luego separarse.

Eh hincándose ante la atenta mirada jade de su chico, saco aquella cajita de terciopelo, la cajita que muchas parejas esperan.

-Harry, cásate conmigo.

El ojiverde lo miro sorprendido, tapándose la boca con las manos. Y con lágrimas en las mejillas, dijo sí ante la propuesta, para luego ser levantado por el ojiazul y dándole una vuelta entre sus brazos, besarlo.

<< … >>

Louis miraba a Harry mientras sus palabras cerraban el sello de amor-compromiso-cambio sus manos a las mejillas del rizado y acariciando un rizo para hacerlo a un lado. Se acercó con prudencia y mirando una vez más sus brillantes ojos jade, beso aquellos labios con lentitud y amor.

El rubio, el castaño y el morocho celebraban entre sí, mientras miraban a Louis y Harry besarse arriba de aquel altar, cerrando su promesa de amor.

-Lo hizo-sonrío Liam.

-Ese es mi chico-grito Niall-Bien, literalmente hablando, porque ahora es de Harry-Zayn se rió junto con Niall.

Mientras el ojiverde y ojiazul se miraban con una sonrisa en la cara, sus ojos brillaban y sus mejillas se encontraban sonrojadas. Como si fuera la primera vez.

-Te amo Harry.

-Te amo Louis.

Los dos suspiraron y se abrazaron con complicidad.

<< … >>

Harry y Louis caminaban de la mano, se mandaban sonrisas con complicidad cada tanto y sus ojos brillaban de emoción.

Los dos entraron a la casa hogar, siendo recibido por una señora, que le sonreía y hablaba sobre los chicos. Mientras caminaban hasta el cuarto de juegos donde esto se encontraban.

La mujer abrió la puerta del lugar y mirándose con complicidad, escanearon todo la sala, mientras la mujer los miraba a la esperaba de ver quién era el chico suertudo por irse.

Louis miraba a todos los niños, sin saber a cuál elegir, rascaba su nuca en claro indicio de incertidumbre. El rizado tenía la mirada fija en un pequeño que leía en una de las mesas, inconsciente una sonrisa se forma en sus labios y acercándose a Louis para susurrarle su decisión, el ojiazul le sonrío y asintiendo acepto.

<< … >>

Los dos tomaban las manos del pequeño niño en sus manos, luego de haber hecho el papeleo debido. Ahora tenían un nuevo integrante en la familia, su pequeño Jeremy. Aquel niño que cautivo a Harry y por consecuente con Louis.

Tenían un hijo los dos.

Su hijo.

Ahora eran una familia, en todas las letras.

<< … >>

Harry miraba al pequeño en su cama, mientras se dedicaba a leer un cuento a su hijo, como todos los días por las noches a la hora de dormir del pequeñito.

El rizado contaba con todo el amor que podía, aquel cuento que se posaba en sus manos. Jeremy de vez en cuando preguntaba algo o se quejaba por el desenlace de la historia.

De apoco los ojos del pequeño comenzaron a caer, hasta quedarse dormido.

Como todas las noches, Harry repitió el procedimiento y cuidando que estuviera bien tapado, dejo un casto beso en sus frente, le sonrío al chico y deseando buenas noches se retiró de la habitación apagando la luz en el proceso.

<< … >>

Louis y Jeremy corrían por las calles, mientras lanzaban alguna que otra risita. Los dos llegaron apresurados a casa, el ojiazul se sentó en la alfombra, mientras prendía la consola.

El pequeño Jeremy-ya no tan pequeño-se sentó a lado de su padre, sin siquiera molestarse en quitarse la mochila y los dos comenzaron a jugar, mientras soltaban risas y alguna que otra broma.

Harry rodo los ojos por su esposo e hijo, siempre hacían eso todos los días. El rizado sonrío y se giró regresando a la cocina.

La sala estaba llena de sonidos proveniente de los videojuegos, las risas de un padre e hijo y las gemidos molestos, cuando perdían-con alguna que otra mala palabra por parte de Louis-que era regañado por el rizado, haciendo reír al más chico. Y aquellos bailes de victoria.

<< … >>

El ojiverde y ojiazul miraban con orgullo a su hijo, quien acomodaba mejor la mochila en su hombro. Les regalo un abrazo a cada uno y despidiéndose tomo camino fuera de la casa. Los dos se sonrieron alegremente, el rizado rodeo la cintura de su esposo y este lo tomo por los hombros.

Los dos veían a su hijo partir a la universidad, ahora ya grande y con metas en la vida.

El joven se volteó a verlos una vez más y con una saludo de mano volvió a su camino. Louis devolvió el saludo quitando por un momento la mano de los hombros de su esposo. Harry sonrío y lo vio partir.

-Lo hicimos bien.

Louis beso la mejillas del ojiverde y este asintiendo devolvió el beso.

[…]

CHICO LINDO  ¡Larry Stylinson!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora