¿Cómo se conocieron?
• Leon Scott Kennedy.
Lo viste entrar a la sala. Era alto y se te hizo guapo. Ese aire de "estoy harto de toda esta mierda" se te hizo algo graciosa por parte de un hombre como él. En sus manos sostenía unos papeles y luego se acercó a tí. Te pusiste de pie y aún así seguía pareciendo que estuvieras sentada por lo alto que él era. Le dedicaste una sonrisa y él te la devolvió.
Leon te dictó tus datos mientras tu asentías y afirmabas toda la información sobre tu persona. Él asintió y se sentó en la silla frente a tí, acercandola a la tuya.
—Serás mi compañera en las misiones que surjan, ¿estás dispuesta? Te advierto que cualquier cosa puede pasar y tendrás que tomar muchas desiciones que no te dejarán dormir por largas noches.— Pestañeaste, sorprendida, era más bien como si te estuviera contando su vida... o sus pesadillas. Aún así estabas dispuesta.
—Sí, quiero ser tu compañera, pase lo que pase.— el castaño se echó para atrás en su silla y sonrió con alivio, sentía que podía confiar en tí.
—Entonces, bienvenida a bordo, ______— soltaste un suspiro de alivio. Sabías que no sería nada fácil, que debías enfrentar horrores, cosas escalofriantes pero estabas segura y querías acompañarlo para ayudarlo.
• Chris Redfield.
Estabas sentada sobre una camilla, mientras un especialista en enfermería te revisaba. No había signos de algo maligno, no recordabas que una de esas criaturas muertas te mordiera o algo similar. En sí no recordabas nada, te habías golpeado fuerte la cabeza y quebrado el brazo derecho.
Chris te miraba desde afuera de la sala, él te había traído allí, con la preocupación de que cuando te encontró, estabas semi inconciente. Un apretón en su hombro hizo que volteara, su hermana, le sonreía con compasión.
—Está bien, no muestra signos de haber sido mordida por zombies u otra criatura.— aquello lo alivió. —Sin embargo, perdió la memoria y no recuerda quién es, así que hay que tenerle paciencia.— explicó su hermana y luego sonrió en forma de bienvenida hacia tí.
—Hey, ¿cómo te encuentras?— te preguntó el hombre de fuertes músculos, sonriendote.
—Odio las inyecciones... pero estoy bien, sólo me duele el golpe en mi cabeza... Gracias por salvarme Chris.— no recordabas nada, pero el pavor a las inyecciones era un comienzo, de algo estabas segura y era que querías estar cerca del cápitan de la BSAA para agradecerle por haberte salvado.
—No es nada, ven, te enseñaré el lugar, si quieres...— sonreíste y enseguida lo seguiste, despidiendote de su hermana, Claire, quién también era un amor de persona.
• Albert Wesker.
Admirabas a Albert desde la distancia, jamás cruzaste palabra con él, ni siquiera se han cruzado. De todas formas esa mañana estabas de suerte, te iban a elegir para el cargo de ayudante de enfermería y él sería quien te asignaría aquel puesto. Entraste a su oficina por primera vez, nerviosa a más no poder. Te sorprendiste al ver al rubio sin sus típicos anteojos de sol negros.
—Buen día...— saludaste y Wesker alzó su mirada hacia tí, una mirada azulada pero fría, te encongiste un poco en tu lugar.
—Toma asiento.— te indicó y enseguida lo hiciste. Él ojeó tu expediente, parecía muy interesado, miraste alrededor de su oficina, no había cuadros, ni fotos, era una oficina común y corriente. El rubio carraspeó y tú enseguida volviste tú atención hacia él. —Te han dicho que serías ayudante de enfermería, ¿verdad?— algo confundida, asentiste.
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resident evil ; {preferences, one shots, reactions, scenarios, etc.}
RandomDecidí hacer algo más cómodo que sólo one shots. Resident Evil no me pertenece.