¿Beso?

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Aki estaba muy molesto pues Isamu se la había pasado molestándolo, se supone que algo así no le debía pasar, estaba muy serio, realmente ya no soportaba sus burlas, ya habían pasado dos días y lo seguía molestando, saco una navaja de su bolsillo, no seria difícil matarte aquí y ahora.

Isamu saco una navaja también, lo se, no seria difícil matarte, los dos se miraban con molestia y cierto odio. 

Ya deja de molestar... a mi también ya me tienes cansado dijo Kane. 

Ahh que tierno defiendes a tu novio... que linda pareja son. 

Aish ya deja eso... solo paso porque estabamos borrachos a mi me gustan las mujeres... no seas idiota.

Demuestralo... haz algo que demuestre que si te gustan las mujeres.

Kane se quedo pensando... umm a ver que se me ocurre pero de todos modos te lo voy a demostrar ¿si lo hago dejas de molestarnos? 

Si tienes mi palabra. 

Espero que sea cierto... sino no... tendremos que pelear a puños.

Suena bien, a ver si logras demostrarlo. 

Ya veras que si. 

Ronin solo los veía desde una la sala... no le gustaba hablar mucho así que salio al patio a que le diera el sol pero vio que estaba ahí Haru así que decidió mejor no molestarlo. 

Llego el maestro de la jovencita, ellos lo miraron y guardaron sus navajas, decidieron ir a la clase de ese maestro. 

Señor estamos tan aburridos que hasta queremos estar en su clase se quejo Kane, seguido de Aki e Isamu que tomaron unas sillas y se sentaron con unos cuadernos, lo que sorprendió al maestro es que estaban participando en la clase, poniendo atención y comenzaron a resolver los ejercicio aunque estaban batallando un poco se acercaban a preguntar. 

De hecho a lo lejos estaba Ronin viéndolos y también se acerco con un cuaderno. 

Haru vio que Daichi estaba batallando se bajo y le quito el cuaderno, a los minutos ya había anotado en una hoja las respuestas del ejercicio que le habían dado el maestro, pues el estaba poniendo atención también, le entrego el cuaderno, ella miro las respuestas.  

La joven le enseño el cuaderno al maestro y el le dijo que estaban bien las respuestas aunque uso un método distinto y mas sencillo para que la chica pudiera entenderlo. 

Sabes ese método que usaste también es bueno de hecho es mucho mas fácil de entender, eres muy inteligente jovencito, si tu quisieras podrías asistir a la universidad.

Haru lo miro y se despidió regresando al árbol donde estaba, cerro los ojos y siguió escuchando la clase.  

El no habla mucho por lo general es muy serio, al igual que ese joven que acaba de llegar, señalo a Ronin. 

El maestro los miro, a pesar que el se daba cuenta a que se dedicaban sabia que no eran mas que jóvenes incomprendido que estaban en familias diferentes a lo que podría vivir un joven común, pero el no podía hacer nada por ellos a menos que ellos decidieran por si mismos.

Continuo con su clase y después siguió la clase de música con otro maestro que le tocaba ese día. 

Los chicos solo andaban por la casa sin nada que hacer. 

¿Crees que nos dejan salir de aquí? 

Podríamos preguntar al guardaespaldas... quizás y nos deje salir con tal de no vernos por un rato. 

Por el momento no se... ese tipo de cosas debo preguntarle al señor Inoue. 

Mas tarde les digo que fue lo que me respondió. 

Los jovenes ya estaban muy aburridos. 

Kane miro a Isamu haciéndole señas para que lo siguiera, ahora si te voy a demostrar que me gustan las mujeres. 

Kane se acerco a Daichi, la puso contra la pared y comenzó a besar su cuello, bajo sus manos a la cintura y comenzó a darle unos besos en el cuello aunque no quiso dejarle marcas, así estaba bajando las manos de la cintura. 

No vieron llegar a Kenji que le soltó un golpe en la cara y lo dejo en el piso, tomando a la joven y cargándola como princesa saliendo rápidamente de ahí, la joven estaba llorando pues no le gusto para nada que la trataran así. 

Bueno ya los voy a dejar de molestar dijo Isamu saliendo de ahí bastante sorprendido por lo que habia pasado. 

Kane se tallaba el rostro sintiendo el golpe que le había dado el guardaespaldas, ni tiempo le dio de soltar un insulto.

Kenji bajo a Daichi sentándola en su cama revisando su cuello y acomodando bien su vestido, lo siento no debí alejarme de ti, estaba agachado viéndola a los ojos, no debí dejar que se te acercara, lo siento, si quieres puedes hablar con tu padre sobre esto... puedo aceptar un castigo... no debí dejarte ni un minuto.

No fue tu culpa ademas no sabias que esto podria pasar.

Se acerco olvidándose del mundo, a fin de cuentas estaban con la puerta cerrada, le dio un abrazo a Daichi, se acerco a sus labios lentamente y le dio un beso en los labios. 

Daichi no supo que hacer y se cubrió los labios, el le quito las manos y le volvió a dar un beso pero esta vez le correspondió, soltó un gemido y eso le dio acceso de meter la lengua, comenzó un beso lento, disfrutando de sus labios, por falta de aire se separaron, dejando al menor con los labios rojos y la respiración agitada.

Espero que esto te haga olvidar el mal momento que pasaste, solo no le menciones a nadie.

Fue mi primer beso, dijo el menor. 

Lo se, por eso quise darte un beso lento que pudieras disfrutar y recordar. 

El menor se sonrojo completamente, mirándolo a los ojos y recargándose en su pecho. 

Gracias por darme mi primer beso. 

No tienes porque agradecer yo también lo disfrute. 

El menor lo abrazo y se quedo así unos minutos escuchando el hermoso sonido de su corazón. 

Kenji le dio un beso en la frente. 

No tenían nada que decirse, disfrutaron del silencio y esos sentimientos que compartían.



El trapo de la mafia TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora